Gri?¨¢n liga su marcha de la Junta de Andaluc¨ªa a la ¡°erosi¨®n de los ERE¡±

Tras 52 meses en el cargo, Jos¨¦ Antonio Gri?¨¢n dimiti¨® ayer como presidente de la Junta de Andaluc¨ªa, y lo hizo cargando sobre sus espaldas todo el desgaste pol¨ªtico que el caso de corrupci¨®n de los ERE ha provocado al Gobierno andaluz desde que el fraude se conoci¨® en enero de 2011. Hasta ahora, Gri?¨¢n hab¨ªa rechazado siempre vincular su renuncia a esta causa, que hered¨® cuando en 2009 asumi¨® la jefatura del Gobierno andaluz. Incluso en el Parlamento, cuando el l¨ªder de la oposici¨®n asegur¨® que su decisi¨®n de no repetir como candidato socialista se deb¨ªa a los ERE, Gri?¨¢n lo desminti¨® con vehemencia.

?l se ci?¨® a razones de car¨¢cter personal y familiar y otras de ¨ªndole pol¨ªtica como el de propiciar un relevo generacional. ¡°El caso de los ERE nada ha puesto ni ha quitado de mi decisi¨®n; nada me empuja y nada me retiene¡±, proclam¨® en sede parlamentaria a finales de junio. Todo lo contrario dijo ayer cuando admiti¨® que una de las razones de su dimisi¨®n ha sido la de ¡°preservar a la Junta de la erosi¨®n¡± provocada por el caso de los ERE.

Hasta ahora, solo la oposici¨®n del PP vinculaba la marcha del que ha sido el cuarto presidente de Andaluc¨ªa con la corrupci¨®n de los expedientes de regulaci¨®n de empleo. Pero, de manera un tanto sorprendente, aunque muy gri?aniana porque hasta entonces la hab¨ªa negado, Gri?¨¢n lig¨® su ¡°necesaria renuncia¡± al hecho de ¡°sacar a Andaluc¨ªa y la presidencia de la Junta de un debate que est¨¢ siendo obst¨¢culo para luchar contra la crisis¡±. Un paso atr¨¢s para que este caso ¡°deje de entorpecer la pol¨ªtica cotidiana¡±.

Gri?¨¢n no ocult¨® el dolor y el desgarro que le ha supuesto el que sus adversarios le hayan situado en el punto de mira de este asunto, sobre todo, porque lo considera injusto. ¡°Es mucho el da?o personal que se me ha hecho, pero sobre todas las cosas me duele el da?o a la Junta. Aun sabiendo que con la renuncia est¨¢s respondiendo con una decisi¨®n que parece dar la raz¨®n a quienes no la tienen, es bueno dar el paso atr¨¢s y esperar a la reparaci¨®n, que sin duda habr¨¢ que llegar y que pondr¨¢ a cada uno en su sitio¡±, se?al¨®.

Con esta justificaci¨®n, Gri?¨¢n probablemente est¨¦ arrastrando a todos los que trabajaron con ¨¦l en la Consejer¨ªa de Econom¨ªa y Hacienda cuando la Intervenci¨®n General de la Junta emiti¨® hasta 15 informes contra el procedimiento administrativo de los ERE, aunque estos no detectaron menoscabo de dinero p¨²blico. Entre ellos, a la consejera de Hacienda y Administraci¨®n P¨²blica, Carmen Mart¨ªnez Aguayo, en un momento en el que se dise?an los presupuestos andaluces para 2014. Tambi¨¦n el viceconsejero de la Presidencia, Antonio Lozano, imputado por la juez Mercedes Alaya. Y tal vez la locomotora tambi¨¦n tire del vag¨®n que ocupa el responsable de Econom¨ªa, Antonio ?vila, que dirige una macroconsejer¨ªa con competencias tan diversas como universidad, innovaci¨®n, ciencia, empresa, empleo y los ERE. La continuidad de estas tres personas y de los cinco consejeros socialistas restantes ¡ªlos tres de IU van a seguir¡ª depende ya de la pr¨®xima presidenta, Susana D¨ªaz, que ser¨¢ la que ponga la altura del list¨®n de separaci¨®n con la etapa Gri?¨¢n.

El presidente en funciones se mostr¨® convencido de que en su antiguo departamento se actu¨® ¡°con total legalidad¡± y que no hay ning¨²n delito que le puedan imputar.

Gri?¨¢n esperar¨¢ a la ¡°reparaci¨®n¡± del da?o causado por los ERE como senador por la comunidad aut¨®noma. Seguir¨¢ as¨ª aforado por el Tribunal Supremo, mientras que si solo conserva el esca?o de diputado auton¨®mico, que puede o no compatibilizar, lo ser¨ªa por el Tribunal Superior de Justicia de Andaluc¨ªa. ¡°Mi esca?o es m¨ªo¡±, respondi¨® en una conferencia de prensa en la que ley¨® su despedida.

Tambi¨¦n seguir¨¢ como presidente federal y secretario general de los socialistas andaluces, aunque de sus propias palabras parece deducirse que tampoco por mucho tiempo. ¡°Ya veremos c¨®mo evolucionan los acontecimientos¡± tras la conferencia pol¨ªtica de noviembre, se?al¨®. A este c¨®nclave, que puede generar movimientos internos inesperados, los socialistas andaluces llevar¨¢n la propuesta de limitar a dos los mandatos institucionales.

El hecho de que Gri?¨¢n ligara su renuncia al caso de los ERE dej¨® en un plano muy secundario otra de las razones por las que dimite: el provocar un cambio generacional en la pol¨ªtica andaluza, ¡°que se ajuste con los tiempos¡± y que ¨¦l, confes¨®, no pod¨ªa protagonizar. La elegida por ¨¦l y tambi¨¦n por los avalistas de su partido es Susana D¨ªaz, quien antes de su investidura solo tiene previsto una intervenci¨®n p¨²blica el jueves ante el comit¨¦ director del PSOE andaluz.

Gri?an neg¨® que hubiera mentido al Parlamento cuando dijo que permanecer¨ªa en el cargo hasta el final de la legislatura: ¡°No ment¨ª. Ha habido circunstancias personales, que no voy a detallar, que me han obligado a acelerar los tiempos¡±.

En la dimisi¨®n de Gri?¨¢n todav¨ªa hay zonas oscuras dif¨ªciles de entender porque las explicaciones que ¨¦l mismo y su partido han dado han sido muy cambiantes. ¡°Da la impresi¨®n de que ha construido el guion de los motivos de su renuncia a posteriori¡±, opin¨® un dirigente socialista. El propio l¨ªder del PSOE las ci?¨® al ¨¢mbito personal y familiar; luego convoc¨® unas primarias expr¨¦s en el mes de julio que el vicesecretario general del PSOE andaluz, Mario Jim¨¦nez, justific¨® ante posibles ¡°contingencias internas¡± ante un eventual adelanto electoral por desavenencias con IU a la hora de elaborar el Presupuesto. Aunque la fecha electoral tambi¨¦n pasar¨¢ a ser responsabilidad de D¨ªaz, Gri?¨¢n calific¨® de ¡°s¨®lido y fuerte¡± la coalici¨®n con Izquierda Unida. ¡°La estabilidad pol¨ªtica del Gobierno andaluz es una garant¨ªa de futuro para Andaluc¨ªa¡±, subray¨®.

Antes de comparecer en la sala de prensa del palacio de San Telmo, Gri?¨¢n adelant¨® a los consejeros, en la reuni¨®n del Consejo de Gobierno, el contenido de su ¨²ltima intervenci¨®n en conferencia de prensa como presidente. Lo hizo despu¨¦s de que se aprobaran cuestiones no menores como la decisi¨®n de pleitear por la distribuci¨®n del d¨¦ficit p¨²blico. Cuando termin¨®, levant¨® la sesi¨®n sin dar pie a emociones. Todo el Gobierno (falt¨® Elena Cort¨¦s, de viaje en Luxemburgo) celebr¨® una comida de despedida en Casa Salva, pr¨®xima a la sede regional socialista, que pagaron a escote (32 euros cada uno).