Bajo la sombra de otro ERE

Sus gafas de sol ocultan angustia y sorpresa. Le cuesta asimilar la noticia. Juan Jos¨¦ Gallardo tiene 40 a?os y durante 15 ha trabajado como administrativo en la base a¨¦rea de Mor¨®n de la Frontera (Sevilla). Es uno de los 66 empleados afectados por el ERE ejecutado por la empresa encargada de los servicios de mantenimiento del recinto militar. Gallardo est¨¢ casado, tiene dos hijos, ¡°una hipoteca que pagar¡± y el claro empe?o de buscar empleo ¡°desde ya¡±. Junto a este convencimiento, bajo esas lentes oscuras tambi¨¦n se oculta el batacazo que un expediente de regulaci¨®n de empleo supone para una plantilla, m¨¢s cuando los trabajadores avistan otro en el horizonte.

El presidente del comit¨¦ de empresa, Jos¨¦ Armando Rodr¨ªguez, recuerda que en agosto de 2010, cuando la compa?¨ªa Vinnell-Brown & Root Spain (VBR) aterriz¨® en Mor¨®n, en la base trabajaban 594 empleados. A los pocos meses, la empresa anunci¨® el despido de 286 empleados (finalmente afect¨® a 119). Las aguas parec¨ªan calmadas hasta que en mayo de este a?o, a trav¨¦s de una web de contrataci¨®n del Gobierno estadounidense, se filtrara un nuevo expediente con 144 afectados, para ejecutar de cara a la adjudicaci¨®n en 2014 del nuevo contrato de explotaci¨®n de estos servicios. ¡°Ahora han sido 66 pero, en febrero o marzo, anunciar¨¢n el despido de otros 80 hasta alcanzar esa cifra¡±, vaticina el representante. ¡°Han cambiado su pol¨ªtica de gesti¨®n, est¨¢n americanizando la base ante la pasividad del Gobierno. Estamos totalmente indefensos¡±, explica.

Han cambiado su pol¨ªtica de gesti¨®n, est¨¢n americanizando la base ante la pasividad del Gobierno

Presidente del comit¨¦

A pesar de que la empresa, con la que este peri¨®dico ha intentado hablar sin ¨¦xito, alega razones productivas, los trabajadores presentar¨¢n una demanda colectiva ya que ¡°el ERE no est¨¢ justificado¡±. Argumentan que la carga de trabajo ha aumentado un 30%. ¡°El criterio para los despidos ha sido arbitrario. No han tenido en cuenta ni antig¨¹edad, ni formaci¨®n... no les importa c¨®mo va a funcionar la empresa¡±, explica el presidente, quien asegura que lo ¨²nico que le preocupa a la empresa es ¡°hacerse¡± en 2014 con el nuevo contrato, que incluye la adjudicaci¨®n de los servicios de mantenimiento en las bases estadounidenses en Turqu¨ªa. ¡°Para ellos, la de Mor¨®n es un peaje que tienen que pagar¡±, a?ade el portavoz del comit¨¦, Javier Dom¨ªnguez.

Esta actitud, seg¨²n Rodr¨ªguez, ha quedado manifiesta a lo largo del proceso de negociaci¨®n del despido colectivo. ¡°Le hemos presentado un plan de viabilidad que contemplaba desde la creaci¨®n de 10 puestos de trabajo hasta la opci¨®n de tener en cuenta bajas voluntarias. No se han molestado en estudiarlo. Ten¨ªan muy claro a lo que iban¡±, denuncia el presidente. Adem¨¢s, los trabajadores insisten en que se sienten desamparados. ¡°Hemos denunciado que hay marines que est¨¢n ocupando nuestros puestos pero Inspecci¨®n de Trabajo hace o¨ªdos sordos¡±, critica Dom¨ªnguez.