¡°Si los sindicatos representan a los trabajadores, deber¨ªan defenderles¡±
"Nadie quiere ser empresario aqu¨ª", asegura el dirigente empresarial
Pello Guibelalde (Legazpi, 1944), presidente de la patronal guipuzcoana Adegi, clama por rebajar el nivel de enfrentamiento laboral y recuperar la confianza entre empresarios y trabajadores.
Pregunta. ?C¨®mo est¨¢n los empresarios en plena turbulencia econ¨®mica?
Respuesta. Est¨¢n preocupados porque es el sexto a?o de la crisis. Hay un cansancio generalizado. Tambi¨¦n hay preocupaci¨®n, porque se sienten poco respetados por la sociedad y est¨¢n solos. Las grandes preocupaciones de los empresarios, por este orden, son la gran debilidad de la demanda interna y el elevado coste laboral. La mitad est¨¢n en p¨¦rdidas, sin beneficios.
P. ?Por qu¨¦ dice que son poco respetados?
R. Al empresario se le quiere ver como el chivo expiatorio de todos los males, cuando no es cierto. Si a la mala situaci¨®n econ¨®mica sumamos que se le pone en la diana de todos los males, conseguimos que algunos empresarios piensen que no merece la pena invertir ni estar aqu¨ª.
P. ?Esa falta de aprecio tambi¨¦n viene de las instituciones?
R. No, hablo en general. Si queremos empleo, riqueza y bienestar, cuidemos el capital empresarial.
P. ?No hay elementos que puedan transmitir tranquilidad?
R. La ¨²nica tranquilidad que quiere el empresario es tener m¨¢s y mejores clientes. Pero vivimos una fase de confrontaci¨®n laboral que est¨¢ lastrando la actividad empresarial.
P. ?Euskadi resulta un lugar atractivo para invertir?
R. No es un lugar demasiado atractivo. Nuestros elevados costes laborales, las altas jornadas de trabajo, la permanente confrontaci¨®n laboral, la fiscalidad, los costes energ¨¦ticos¡ hacen que aqu¨ª no aterrice ning¨²n avi¨®n con bandera extranjera.
P. ?Qu¨¦ medidas propone para dar la vuelta a esa situaci¨®n?
R. Lo que hicimos siempre, o lo que hizo Alemania cuando era la enferma de Europa. Alemania hizo tres cosas: la expansi¨®n de las pymes, una reforma laboral dur¨ªsima de acuerdo con los potentes sindicatos alemanes y la aplicaci¨®n de una s¨®lida e innovadora formaci¨®n dual. Lo que realmente har¨ªa cambiar el signo y despegar ser¨ªa una visi¨®n compartida de pa¨ªs de todos los agentes implicados en Euskadi.
La crisis de Fagor ha sido un golpe dur¨ªsimo para la econom¨ªa"
P. ?No le parece muy lejano?
R. Es imprescindible construir un nuevo marco de relaciones laborales, tan deteriorado actualmente. Un acuerdo orientado al di¨¢logo y a los acuerdos compartidos y cuyo objetivo sea elevar la competitividad, dejando a un lado la confrontaci¨®n permanente y recuperando la confianza entre empresarios y trabajadores por inter¨¦s de ambos. Estamos trabajando denodadamente para incorporar a las empresas una mayor transparencia y comunicaci¨®n interna en la gesti¨®n, en los resultados e incluso en el capital. Esto parece que no ha calado en el ¨¢mbito sindical.
P. ?Vivimos el peor momento entre sindicatos y empresarios?
R. El abismo que algunos pregonaban para despu¨¦s del 7 de julio, con despidos masivos y otros augurios, no se ha cumplido. El 97% de las empresas ha cumplido lo prometido y mantenido jornadas y salarios. El 3% restante no lo ha podido hacer por causas muy justificadas.
P. ?Es falso que se han abrazado a la reforma laboral?
R. La reforma laboral es la legalidad, y nosotros no podemos incumplirla. Pero no hay que olvidar que en Gipuzkoa tenemos los salarios m¨¢s altos y las jornadas m¨¢s reducidas con respecto a nuestros competidores. A ver qui¨¦n hace as¨ª de Gipuzkoa un territorio competitivo.
P. ?Tiene la sensaci¨®n de que los sindicatos no representan el sentir de los trabajadores y juegan a otra cosa?
R. All¨¢ ellos. Que cada cual sea responsable de sus actos. Insisto en que, si no hay un acuerdo de relaciones laborales, la problem¨¢tica ser¨¢ inmensa. Aunque no nos lo creamos, el trabajo va a ser un bien escaso. Nosotros estamos viendo movimientos muy interesantes en muchos trabajadores que quieren llegar a acuerdos con el empresario, y empresarios con el trabajador. Adegi tiende la mano a los sindicatos, pero, si la rechaza, nuestros interlocutores dentro de la empresa ser¨¢n los trabajadores. Con ellos queremos una relaci¨®n fluida. Desde Adegi estamos alentando y acompa?ando este tipo de procesos. La empresa est¨¢ formada por empresarios y trabajadores. El sindicato no trabaja en la empresa. Si los sindicatos representan a los trabajadores, deber¨ªan defender sus derechos.
Las relaciones est¨¢n rotas unilateralmente por la Diputaci¨®n de Gipuzkoa con Adegi"
P. ?Qu¨¦ opina del pacto fiscal entre PNV, PSE y PP?
R. Adegi considera que es un acuerdo para la reactivaci¨®n de la econom¨ªa que da m¨¢s estabilidad y m¨¢s recorrido a la gobernanza de un Gobierno vasco que est¨¢ en minor¨ªa. Nos alegramos por un acuerdo que da estabilidad. Pero en lo referido a la fiscalidad, pedimos que sea equiparable a nuestros competidores. El Impuesto sobre Sociedades, por ejemplo. Una parte de los beneficios se queda en la empresa para invertir en maquinaria, personal¡ Esa es la fiscalidad que no se debe tocar, porque el dinero que el empresario se lleva a casa est¨¢ contribuyendo a trav¨¦s del IRPF y el Impuesto de Patrimonio. La fiscalidad no puede exprimir a las empresas. Por eso nadie quiere ser empresario aqu¨ª.
P. ?Y la crisis de Fagor?
R. Ha sido un golpe dur¨ªsimo para la econom¨ªa. Ya hemos dado nuestro ¨¢nimo a la presidencia de la Corporaci¨®n Mondrag¨®n y transmitido que tienen nuestro apoyo. De esto hay que aprender muchas cosas. Una empresa compartida por todos sus integrantes no es una patente de corso para no tener problemas. La empresa es de todos y todos nos hundimos o nos salvamos. Cualquier empresa, de cualquier composici¨®n accionarial, puede tener problemas si no aplica las erres de revoluci¨®n, rapidez, repensar y reforma r¨¢pida.
P. ?Qu¨¦ les ha parecido el apoyo econ¨®mico del Gobierno?
R. Nosotros nunca hemos dicho nada contra el trato que recib¨ªan las cooperativas. Han tenido una reglamentaci¨®n especial ante Hacienda, pero nada m¨¢s.
P. ?C¨®mo est¨¢n las relaciones con la Diputaci¨®n de Gipuzkoa?
R. Las relaciones est¨¢n rotas unilateralmente por la Diputaci¨®n de Gipuzkoa con Adegi. No tengo nada m¨¢s que decir.
P. ?No hay posibilidades de reconducir esta situaci¨®n?
R. La decisi¨®n fue unilateral. Nosotros queremos tener las mejores relaciones, pero dos no se entienden si uno no quiere.
P. ?Les doli¨® algo en especial?
R. Ellos deben decirlo. Vamos a dejar este tema.?
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