La Audiencia pide ahora que se reclame a la firma que aval¨® el buque
Espa?a se gast¨® 30 millones para intentar en vano un juicio en Nueva York contra ABS
La Audiencia Provincial de A Coru?a, en su sentencia absolutoria sobre la cat¨¢strofe del Prestige, deja abierta una ¨²nica puerta para reclamaciones civiles por da?os: emprender acciones contra el armador griego, Universe Maritime, y sobre todo contra la sociedad estadounidense American Bureau of Shipping (ABS), que certific¨® la navegabilidad del viejo petrolero. Pero es una v¨ªa totalmente ¡°inviable y falaz¡±, coinciden en afirmar las partes personadas en el juicio ¡ªm¨¢s de 2.000 representadas por 55 letrados¡ª, dado que supondr¨ªa un largo y caro proceso en Estados Unidos que el Estado espa?ol ya intent¨® sin ¨¦xito alguno. Espa?a gast¨® m¨¢s de 30 millones de euros en honorarios de abogados y peritos para intentar en vano un juicio en Nueva York contra ABS, la potente sociedad clasificadora. Ese fracaso cerr¨®, afirman las acusaciones particulares, la posibilidad de ¡°exigir la oportuna responsabilidad civil¡± por la cat¨¢strofe, como dictamina ahora la Audiencia coru?esa. El tribunal considera ahora probada la ¡°falta de honradez¡± de ABS al otorgar todos los certificados legales para navegar al viejo petrolero, y ve ¡°muy deficientes¡± las inspecciones y reparaciones que realiz¨®.
Pero este fallo est¨¢ en abierta contradicci¨®n con otro auto de la misma secci¨®n de la Audiencia ¡ªaunque con magistrados distintos¡ª que enjuici¨® el desastre del Prestige: fue ese mismo tribunal el que en 2008 impidi¨® llevar a juicio a ABS. Junto con la aseguradora brit¨¢nica, que s¨ª fue procesada como responsable civil directa y de hecho deposit¨® una fianza de 22,77 millones cuyo destino a¨²n queda por decidir, la clasificadora con sede en Houston (Texas) es la ¨²nica entidad solvente del enrevesado entramado empresarial del barco.
ABS lleg¨® a estar imputada por el Prestige al aceptar en 2007 el juzgado de Corcubi¨®n una ampliaci¨®n de la querella de la plataforma Nunca M¨¢is. Su abogado, Pedro Trepat, pretend¨ªa, antes de agotar el plazo de cinco a?os para que prescribiese el delito, que fuese incluido alg¨²n directivo de la clasificadora a fin de que, en caso de condena penal, la sociedad tuviera que asumir las indemnizaciones por reclamaciones civiles. Pero la Audiencia coru?esa revoc¨® en junio de 2008 esa imputaci¨®n, a instancias de la fiscal¨ªa, ¡°por razones de forma, fondo y tendenciales de la causa¡±. En aquel momento, el Estado espa?ol ya estaba iniciando un pleito en Nueva York contra ABS. Una acci¨®n que tambi¨¦n censur¨® en aquel auto de 2008 la Audiencia Provincial al considerarlo un ¡°juego a doble banda¡±. Y reclam¨® a la Abogac¨ªa del Estado que entregase al sumario espa?ol la ¡°bater¨ªa de pruebas y datos importantes que acumul¨® ante la justicia norteamericana¡±. El tribunal del Prestige, sin embargo, rechaz¨® incluir para el juicio toda esa documentaci¨®n, salvo alg¨²n informe que elogiaba la gesti¨®n del Gobierno.
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