?Y ahora qu¨¦?

Apenas tres meses despu¨¦s de la decepci¨®n ol¨ªmpica de Madrid 2020, la inversi¨®n de 17.000 millones de euros que se le presupon¨ªa a Eurovegas, un espejismo de proporciones colosales que convertir¨ªa a Alcorc¨®n en la capital europea del juego y en un pabell¨®n internacional de las convenciones de negocios, se desvaneci¨® dejando a la regi¨®n sin m¨¢s castillos en el aire a los que aferrarse. Si Ana Botella (PP) acus¨® el coste pol¨ªtico por la decisi¨®n del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional del pasado 7 de septiembre, que encumbr¨® a Tokio y releg¨® a Madrid a la ¨²ltima casilla, el turno de encajar el golpe le ha llegado ahora a Ignacio Gonz¨¢lez (PP).

No ser¨¢ el primer sapo que se trague en sus 15 meses como presidente de la Comunidad, tras la espantada de Esperanza Aguirre en septiembre de 2012. Al fiasco que la apuesta del magnate estadounidense Sheldon Adelson por Asia ¡ªy de Aguirre por Adelson¡ª supone para el Gobierno regional se suman un sinf¨ªn de reveses que Gonz¨¢lez, lugarteniente de Aguirre durante sus nueve a?os en la Puerta del Sol, ha heredado de su predecesora y a¨²n presidenta del PP de Madrid. Agotados los ases en la manga, se impone la gesti¨®n mundana. Un escenario especialmente complejo para Gonz¨¢lez, que se estren¨® en el cargo recortando de una sentada 2.700 millones para 2013, en los que fueron los presupuestos regionales m¨¢s austeros en una d¨¦cada.

A ese tajo monumental hay que a?adir los encontronazos con el Ejecutivo de Mariano Rajoy para relajar la ley antitabaco, seg¨²n reclamaba Las Vegas Sands, y para revisar el sistema de financiaci¨®n auton¨®mica. Un pulso que, por el momento, ha ganado el ministro de Hacienda, Crist¨®bal Montoro, que tambi¨¦n impuso a Gonz¨¢lez el objetivo de d¨¦ficit asim¨¦trico. La esperanza de Madrid es que el modelo de financiaci¨®n se revise en verano de 2014 con car¨¢cter retroactivo.

A falta de a?o y medio para las elecciones auton¨®micas y sin conejos en la chistera a los que aferrarse, Gonz¨¢lez no conoce ni siquiera si ser¨¢ el candidato elegido por Rajoy para optar a gobernar la Comunidad. Y todav¨ªa le queda un conflicto dormido por resolver: la privatizaci¨®n de la gesti¨®n de seis hospitales de la red p¨²blica, paralizada por la justicia desde septiembre. A la espera de que se resuelva el gran frente abierto que a la Comunidad le queda pendiente, lo que est¨¢ claro es que las consecuencias de lo que decida la justicia afectar¨¢n, de forma puede que decisiva, a Gonz¨¢lez.

Eurovegas es la prueba. Pese a que el m¨¢s esc¨¦ptico con el proyecto en el equipo de Aguirre, desde que supo de ¨¦l por primera vez en 2007 ¡ªen unas negociaciones apadrinadas por Miguel Sebasti¨¢n, ministro del Gobierno socialista de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero¡ª y de sus cifras megal¨®manas, fuera el actual presidente auton¨®mico.

En el PP matizan que, cuando Aguirre dice que Adelson ¡°se encaprich¨®¡± de Madrid, en realidad era ella ¡°la que estaba encaprichada¡± con el proyecto. Su relaci¨®n con el magnate de los casinos ¡ªespecialmente cordial, ah¨ª est¨¢n las invitaciones a Guadalajara o a almorzar en el palacete que Aguirre posee en el centro de Madrid- y uno de los principales benefactores del Partido Republicano de EE UU, en una sinton¨ªa ideol¨®gica parecida, no encontr¨® la misma calidez en Gonz¨¢lez.

El propio Adelson, tras el relevo de Aguirre en septiembre de 2012, se reuni¨® con el nuevo presidente al poco de su nombramiento para testarle y comprobar que sus planes coincid¨ªan con los de Aguirre. Aunque la conexi¨®n personal con Gonz¨¢lez nunca fue la misma y las negociaciones se endurecieron, el multimillonario valor¨® los incentivos fiscales y otros cambios legales que aprob¨® Gonz¨¢lez antes de final de a?o.

Prueba de ello es el comunicado que Las Vegas Sands emiti¨® el jueves, agradeciendo, ¡°en concreto a la Comunidad de Madrid¡±, que ¡°trabajara de forma continua en esta oportunidad con los intereses de los espa?oles en mente. Deber¨ªan ser elogiados¡±.

Resueltas las competencias regionales y municipales, quedaba lo m¨¢s complejo: atender a los cambios a nivel estatal que exig¨ªa Adelson, y negociar con la UE para que no pusiera trabas. La Comunidad percibi¨® sin embargo que las negociaciones se hab¨ªan enquistado. Ni siquiera las tres recepciones con las que Rajoy agasaj¨® a Adelson en La Moncloa parecieron desatascar la situaci¨®n. Adelson se ofusc¨® especialmente a ra¨ªz de las promesas de Rajoy la pasada primavera, cuando el presidente le asegur¨® que cumplir¨ªa con todas sus peticiones, seg¨²n fuentes regionales. En septiembre segu¨ªan sin solucionarse, lo que deriv¨® en una bronca may¨²scula de los Gobiernos de Rajoy y de Gonz¨¢lez, y por ende entre la direcci¨®n nacional de G¨¦nova y el PP de Madrid. A la gresca, la Comunidad reclam¨® con urgencia a Rajoy que se resolviese el marco legal que requer¨ªa Eurovegas.

Las nuevas peticiones de la multinacional de Las Vegas hace dos semanas lo hicieron innecesario, pues sentenciaron definitivamente el proyecto. Las exigencias, especialmente ¡°radicales¡±, dejaron a Rajoy y Gonz¨¢lez sin margen de maniobra. La principal de ellas, asegurar que ni los posibles cambios en la legislaci¨®n comunitaria ni que un cambio de partido en el Gobierno regional y/o estatal tumbasen el proyecto.

Las constantes advertencias del PSOE e IU de que en caso de gobernar revertir¨ªan el proceso inquietaron al presidente de Las Vegas Sands (que posee adem¨¢s el 52% de las acciones de la empresa).

En una petici¨®n ¡°innegociable¡± para Adelson e ¡°imposible¡± de cumplir, seg¨²n la calific¨® Gonz¨¢lez, el empresario reclamaba revertir toda la inversi¨®n que realizara, m¨¢s las p¨¦rdidas que se podr¨ªan generarse, en caso de que un cambio normativo obstaculizara el proyecto. Ya puestos, tambi¨¦n exig¨ªa indemnizaciones.

Y as¨ª finaliz¨® la partida de p¨®quer con Eurovegas como premio. Cumpliendo el augurio que el secretario general de los socialistas madrile?os, Tom¨¢s G¨®mez, pronunci¨® el pasado julio: ¡°Tenemos la informaci¨®n de que Eurovegas se ha ca¨ªdo¡±. Hasta qu¨¦ punto las negociaciones fueron o no un farol, solo lo sabe Adelson.