La red social de la solidaridad

Las redes sociales se han sumado a la tendencia del trueque solidario. En un toma y daca de favores, miles de mensajes pululan a diario en la plataforma Barcelona Actua (BAC), la red social altruista que se ha consolidado en la capital catalana como una gran cadena gratuita de ofertas y demandas entre sus m¨¢s de 9.000 usuarios. ¡°Ponemos las cosas f¨¢ciles para que quien quiera ayudar, ayude; y quien necesite ayuda, la pida sin problema. Dignificamos el hecho de que la gente necesite ayuda¡±, resume la fundadora de la iniciativa, Laia Serrano.

Desde ofertas de ropa de segunda mano o intercambios de libros hasta talleres laborales para aprender a crear empresas. Los mensajes que saltan en la plataforma de Barcelona Actua tocan todas las ¨¢reas sociales. ¡°Se trabaja desde una perspectiva muy horizontal. Todos podemos dar y recibir y, adem¨¢s, sensibilizamos a la gente con la situaci¨®n social y creamos comunidad entre los usuarios¡±, apunta Serrano. La red social tiene una media de cinco actividades semanales organizadas alrededor de la ciudad. Los lunes, por ejemplo, reparten lotes de comida a 40 familias sin recursos; los jueves, sirven comida a gente que vive en la calle.

B¨¢rbara Moreno, de 35 a?os, es una BACs, una de esos 9.000 personas que participan en la cadena de Barcelona Act¨²a. Reconoce que tard¨® ¡°casi un a?o¡± en ofrecerse para alguna actividad. Le¨ªa las ofertas y las demandas, pero no se atrev¨ªa a interactuar en la comunidad de voluntarios. ¡°Hasta que al final me decid¨ª a ayudar a repartir comida en el barrio de Gr¨¤cia¡±, alega. Despu¨¦s, ofreci¨® una falda de ballet que su hija no utilizaba y se apunt¨® a unos cursos de ingl¨¦s un par de veces al mes. Ya estaba metida en la rueda de favores.

Ahora, con un trabajo a media jornada y dos ni?os a su cargo, la joven no puede permitirse pagar unas clases de teatro que autogestionan entre los propios usuarios de la red social. Pero la profesora, Gemma Juli¨¤, y el resto del grupo han ofrecido ¡°becar¡± a los usuarios que no puedan pagar los siete euros por sesi¨®n que cuestan las clases. ¡°Nosotros asumimos los gastos. Cuando hicimos la convocatoria, se abri¨® la posibilidad de becar a los que no pudiesen coste¨¢rselo y ahora mismo hay dos personas que participan de forma gratuita¡±, explica la maestra. Aunque los talleres que monta BAC suelen ser totalmente gratuitos, esta actividad tiene un coste para aquellos que puedan pagarlo, ya que la profesora vive de lo que gana dando clases. A cambio de la ¡°beca¡±, B¨¢rbara se ha ofrecido para limpiar el local donde se imparten las clases. ¡°Estaba un poco sucio y yo tengo tiempo libre porque mi trabajo es a media jornada solamente. Y adem¨¢s, as¨ª me siento mejor¡±, apostilla.

Junto a las actividades de car¨¢cter m¨¢s solidario, como el reparto de comida o el acompa?amiento a mayores, la fundadora de la red social destaca las actividades laborales, dirigidas a encontrar trabajo o mejorar las habilidades de los usuarios en el ¨¢mbito laboral, y los talleres l¨²dicos y culturales, como el intercambio de libros el primer mi¨¦rcoles de cada mes, los almuerzos en ingl¨¦s cada dos semanas o los martes tem¨¢ticos en el barrio del Born. ¡°Estas actividades dan la oportunidad de conocerse en el barrio y hacer que la gente salga de casa sin gastar dinero¡±, se?ala Serrano.

Aunque la iniciativa est¨¢ plenamente extendida en Gr¨¤cia o El Raval, el objetivo es, seg¨²n la fundadora, consolidarse en otros barrios de Barcelona. ¡°Tenemos un proyecto para acompa?ar a gente mayor que vive sola en Sants, por ejemplo, pero la idea es que este modelo sea aplicable tambi¨¦n a otras ciudades. Estamos intentando hacerlo sostenible y que las empresas se impliquen con nosotros para crecer m¨¢s¡±, a?ade.

Para Navidad, los usuarios de Barcelona Actua han preparado un ti¨® el 23 de diciembre con regalos cedidos por otros voluntarios de la red social. La comunidad repartir¨¢ 25 bicicletas y otros juguetes entre m¨¢s de 60 ni?os sin recursos, hijos de familias en situaci¨®n de vulnerabilidad que tambi¨¦n son usuarios de la red social y recogen comida y ropa de los voluntarios de BAC. Luego, ellos contin¨²an la cadena atendiendo cualquiera de las demandas que puedan saltar en el buz¨®n de mensajes de la plataforma.