Vidas paralelas
Es inevitable pensar que Catalu?a se halla m¨¢s avanzada en el proceso de alcanzar, si no la independencia, al menos el ejercicio del derecho a decidir.
A la hora de reflexionar sobre la situaci¨®n y los procesos de Catalu?a y Euskadi o Euskal Herria, a los que tenemos cierta edad, que estudiamos lat¨ªn en el Bachillerato, se nos vienen a la mente las traducciones que hac¨ªamos de las Vidas paralelas de Plutarco, que eran unas biograf¨ªas comparadas de las cuales quiz¨¢s la m¨¢s famosa era la que trataba de C¨¦sar y Alejandro Magno. En un pasaje de la misma, C¨¦sar se lamentaba de que Alejandro a su edad ya era due?o del mundo, es decir, reconoc¨ªa el retraso con respecto a su punto de referencia. Es inevitable pensar desde Euskal Herria que Catalu?a se halla m¨¢s avanzada en el proceso de alcanzar, si no la independencia, al menos el ejercicio del derecho a decidir. Este retraso, si de verdad lo hay, no tiene por qu¨¦ ser necesariamente perjudicial, pues permite o puede permitir aprender de errores o aciertos en el proceso y, aunque sea muy dif¨ªcil, escarmentar en cabeza ajena.
En cuanto a cu¨¢les son las razones por las que el proceso catal¨¢n ha adelantado al vasco, son dif¨ªciles de definir. Es f¨¢cil pensar que la historia de violencia del Pa¨ªs Vasco es la causa principal por la que un movimiento a favor de la independencia que aparec¨ªa m¨¢s potente en la Transici¨®n en el Pa¨ªs Vasco que en Catalu?a ha sido rebasado por el proceso de esta ¨²ltima. Que resulte f¨¢cil no quiere decir que necesariamente sea cierto: a fecha de hoy, la posici¨®n del Estado es tan cerrada frente a un escenario de violencia como frente a una situaci¨®n de paz y de v¨ªas estrictamente pol¨ªticas. Por lo tanto, no debemos pensar que un movimiento vasco por el derecho a decidir y la independencia estrictamente por v¨ªas pol¨ªticas no se hubiese encontrado con la misma respuesta, es decir, no y nada m¨¢s que no. Quiero pensar que las causas son m¨¢s de estructura social que de actuaci¨®n pol¨ªtica, sea esta de lucha pac¨ªfica o armada.
En la Segunda Rep¨²blica el movimiento independentista catal¨¢n avanzaba m¨¢s r¨¢pido que el vasco. Las declaraciones de Maci¨¤ y de Companys solo pod¨ªan tener lugar en una sociedad estructurada cuyas ra¨ªces m¨¢s hondas y m¨¢s extendidas se hallaban en el anarquismo de primer tercio del siglo XX. La d¨¦cada de los sesenta en Euskal Herria se vive un despertar de un independentismo alejado del sabinismo vizca¨ªno de los or¨ªgenes del nacionalismo vasco. La lucha contra el r¨¦gimen de Franco acelera o fomenta la apuesta por la independencia. Llegamos a la Transici¨®n con un mayor apoyo a esta en Euskadi que en Catalu?a, sin perjuicio de las reclamaciones estatutarias catalanas.
El avance y la socializaci¨®n del apoyo a la independencia probablemente est¨¢n conectados con factores previamente ¨ªnsitos en la naci¨®n. Por lo tanto, el movimiento acelera cuando depende m¨¢s de movimientos sociales que institucionales y, al rev¨¦s, la institucionalizaci¨®n no lo hace avanzar. En Catalu?a, el nuevo ¨ªmpetu por la independencia parte de una iniciativa de movimientos sociales y apartidistas en la convocatoria de las manifestaciones de las dos ¨²ltimas Diadas. Estos movimientos sociales tan fuertes y pujantes han sobrepasado a los partidos, haciendo que estos deban sumarse al movimiento e incluso se vean obligados a colaborar, como es el caso de CiU y ERC.
En Euskal Herria, la apuesta por la independencia es m¨¢s que nada un referente estrat¨¦gico de un partido pol¨ªtico, o ahora ya de una coalici¨®n, y, aunque se haya extendido en parte de las bases de otro partido, no se haya trascendentalmente inserto en la sociedad fuera de lo institucional. Quiz¨¢s el propio r¨¦gimen paccionado tenga su parte de responsabilidad. En resumen, la distinta situaci¨®n de los procesos vasco y catal¨¢n probablemente se deba al origen actual de su impulso, y en cuanto a su evoluci¨®n posterior y final de una v¨ªa u otra, la social o la institucional, debemos esperar a los acontecimientos en Catalu?a y de ello sacar las conclusiones que puedan ser aprovechadas para el procedimiento vasco.
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