Eug¨¨nia Broggi deja Grup 62 para crear L¡¯Altra Editorial

¡°Un d¨ªa me di cuenta de que hab¨ªa perdido el respeto por mi propio trabajo, me olvid¨¦ de la importancia y el sentido de cada libro publicado y ya no me importaba hacer libros simplemente para poder facturar mucho¡±. Ese d¨ªa madur¨® en otro de junio del a?o pasado, cuando Eug¨¨nia Broggi (Barcelona, 1974) decidi¨® abandonar Grup 62, donde ejerci¨® de editora desde 2004 de sellos como Emp¨²ries, Labutxaca y El Aleph. ¡°No me supe adaptar al ritmo que impon¨ªa Planeta¡±, resume. Pero ni medio a?o ha pasado sin que haya reaparecido, aunque ahora due?a de su propio sello: L¡¯Altra Editorial.

Con un b¨²ho como logotipo que evoca el que publicitariamente luce en lo alto del paseo de Sant Joan con la Diagonal de Barcelona donde ella vive, pero que tambi¨¦n simboliza por ahora ¡°tanto la proximidad como las cosas peque?as¡± y el hecho de que su aventura es unipersonal, el proyecto se define r¨¢pido en lo material. A saber: L¡¯Altra Editorial, a raz¨®n de una docena de t¨ªtulos al a?o, con tiradas cortas de 1.500 ejemplares, b¨¢sicamente s¨®lo narrativa (¡°es lo que se hacer¡±) y en una ¨²nica colecci¨®n, apostar¨¢ tanto por autores catalanes como extranjeros, en su mayor¨ªa j¨®venes (¡°vamos a favor de la literatura actual¡±) o, como mucho, ¡°cl¨¢sicos contempor¨¢neos de de hace 20 o 30 a?os¡±. Los primeros t¨ªtulos hasta mayo ratifican la apuesta: L¡¯¨²ltima nit, los relatos del ahora al alza James Salter (¡°es el t¨ªpico autor que me hubiese costado hacer en Grup 62¡±), i Els nois, de Toni Sala, ser¨¢n los dos primeros t¨ªtulos de febrero, al que se a?adir¨¢ el joven ganador menor de 30 a?os del premio Documenta de este a?o (que se fallar¨¢ esta misma semana). Les seguir¨¢n Barba xopa de sang, de Daniel Galera, una apuesta de la revista Granta entre las promesas brasile?as, y la ¨²ltima obra de la autora de Tenemos que hablar de Kevin, Lionel Shriver, El germ¨¤ gros.

La propuesta m¨¢s intangible de L¡¯Altra Editorial pasa, seg¨²n su editora, por ¡°conquistar un p¨²blico que habla y escribe en catal¨¢n pero que lee en castellano; hay un desequilibrio entre la calidad de lo que se edita en catal¨¢n y su visibilidad¡±, cree Broggi, que admite que ¡°en catal¨¢n en muchos casos se est¨¢n haciendo cosas m¨¢s comerciales que literarias¡±. Su c¨¢lculo pasa porque L¡¯Altra Editorial ¡°no venda mucho pero s¨ª lo suficiente¡±, a partir de una editorial de tama?o mediano, algo que, cree, tiene pleno sentido tras dos d¨¦cadas de globalizaci¨®n que han provocado que la gente aprecie ¡°volver a cosas peque?as, a la personalizaci¨®n, a saber qui¨¦n est¨¢ detr¨¢s de las cosas¡±. En su opini¨®n, ¡°el Grup 62 se ha hecho m¨¢s peque?o y hay unos autores y libros que se dejar¨¢n de hacer; eso explica que haya sitio para un par de editoriales medianas y un buen cat¨¢logo de sellos peque?os¡±. Un veterano y reci¨¦n jubilado como Xavier Folch, que apoya el proyecto de su exdisc¨ªpula en Emp¨²ries, defiende convencido de que ¡°hay espacio para las editoriales peque?as, m¨¢s creativas porque no han de dedicar tanto tiempo a la parte del negocio como hacen las grandes¡±.

Anagrama, en catal¨¢n

Broggi, nieta del popular m¨¦dico Mois¨¨s Broggi, editar¨¢ en principio s¨®lo en catal¨¢n porque ¡°la difusi¨®n de autores de aqu¨ª para el resto del Estado en castellano es compleja, cuestiones pol¨ªticas aparte¡±. Ella era, en cambio, el engarce entre Emp¨²ries y Anagrama en la coedici¨®n catalana de algunos de los t¨ªtulos que publicaba Jorge Herralde, para quien Broggi fue lectora entre 2002 y 2004. Ahora, Herralde abrir¨¢ una l¨ªnea de edici¨®n s¨®lo en catal¨¢n, con dise?o propio, donde tendr¨¢ cabida al menos esa media docena de libros, evocando quiz¨¢ aquel L¡¯ofici de viure de Cesare Pavese, que tuvo el honor de figurar entre los tres primeros t¨ªtulos de la editorial en abril de 1969 e inaugur¨® la ef¨ªmera colecci¨®n Textos, s¨®lo en catal¨¢n, y que en 1970 dejar¨ªa de publicar tras apenas cinco t¨ªtulos. Ahora, la ¨²ltima novela de Am¨¦lie Nothomb, Barba azul, estrenar¨¢ la nueva colecci¨®n a principios de febrero.