Pol¨¦mico homenaje en Italia a un aviador centenario que luch¨® en Espa?a
Altraitalia, la asociaci¨®n progresista de residentes italianos, deplora los agasajos al piloto de bombardero fascista Luigi Gnecchi
Parec¨ªa que no quedaba vivo ning¨²n aviador italiano de los que lucharon en la Guerra Civil espa?ola al servicio de Franco y de repente ha aparecido uno, y muy notable.
Se trata del piloto Luigi Gnecchi (Lecco, 1914), que mand¨® una escuadrilla de bombarderos medios Fiat BR. 20 (Cicogna) de la Aviazione Legionaria en Espa?a, siendo condecorado con una medalla de plata al valor, y luego particip¨® en la Segunda Guerra Mundial, en el curso de la cual fue uno de los pocos aviadores de Mussolini que combatieron, con escasa eficacia, eso s¨ª, en la Batalla de Inglaterra (los Chianti raiders, o los pilotos del Blitz del Duce), de la que es uno de los ¨²ltimos supervivientes.
Gnecchi ha aparecido con todas sus muchas medallas (incluidas las del III Reich) y sus recuerdos con motivo de cumplir cien a?os para estupefacci¨®n de la asociaci¨®n de italianos progresistas residentes en Barcelona Altraitalia en cuyo seno el grupo Altramemoria es promotor y parte civil en el juicio en curso en la Audiencia Provincial de Barcelona por los bombarderos de la aviaci¨®n fascista sobre Barcelona entre 1937 y 1939, calificados como delitos de lesa humanidad.
El abogado de Altramemoria, Newton Bozzi, manifest¨® ayer a este diario la ¡°indignaci¨®n¡± que les ha provocado la aparici¨®n del personaje tras no encontrar ellos ninguna colaboraci¨®n por parte del Gobierno italiano para localizar (y eventualmente encausar) a posibles supervivientes de aquellas acciones de bombardeo. Gnecchi, auroleado de hero¨ªsmo y en buena forma para su edad, ha sido felicitado efusivamente en su aniversario por el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas A¨¦reas italianas, el general Pasquale Preziosa, que lo ha calificado de modelo a imitar y portador de ¡°valores que es esencial seguir para enfrentarse a los compromisos de hoy y los desaf¨ªos de ma?ana¡±.
Asimismo, la ministra de Defensa, Roberta Pinotti, ha deseado en su cuenta de twitter ¡°tanti auguri all aviatore pluridecorato¡± (incluida la Cruz de Hierro de segunda clase).
Para Altramemoria que se aplauda como hacen las autoridades italianas ¡°la pasi¨®n, el coraje y la competencia¡± de un aviador fascista resulta ¡°escalofriante¡± adem¨¢s de rayar en el recochineo, vista la actitud de falta de colaboraci¨®n de esas mismas autoridades, escamote¨¢ndoles informaci¨®n para las pesquisas judiciales. ¡°Tienen datos y no nos los dan, eso est¨¢ clar¨ªsimo¡±, deplor¨® Bozzi. ¡°Es una verg¨¹enza¡±.
Combati¨® en la Batalla de Inglaterra con los alemanes y gan¨® la Cruz de Hierro
No se sabe si Gnecchi, que acab¨® su carrera militar con el rango de teniente coronel, fue uno de los pilotos italianos que bombardearon Barcelona y de los que Altramemoria ha identificado a 21. Lo que es seguro, pues ¨¦l mismo se vanagloria, es que particip¨® en acciones de bombardeo en Espa?a. Bozzi explic¨® que han presentado un escrito en el juzgado a fin de poder practicarle un interrogatorio. ¡°Le deseamos que cumpla otros cien a?os¡±, ironiz¨®, ¡°pero deber¨ªamos poder interrogarlo lo antes posible, averiguar d¨®nde estuvo en Espa?a y qu¨¦ lugares bombarde¨®¡±.
En una entrevista en la RAI con motivo de su centenario, que se cumpli¨® el 5 de marzo, el viejo aviador agasajado, apasionado del golf y el bridge, habl¨® el pasado d¨ªa 10 de su carrera militar. Explic¨® que form¨® parte del CAI (Cuerpo A¨¦reo Italiano) en Espa?a como jefe de una escuadrilla de Fiat BR. 20 e incluso record¨® entre risas una cancioncilla de aquella ¨¦poca. Consideraba que la Guerra Civil no fue muy peligrosa para ellos, los aviadores italianos, ¡°por falta de verdadera fuerza de caza adversaria, a excepci¨®n de algunos aviones rusos¡±.
Durante la Batalla de Inglaterra, evocava, el 11 de noviembre de 1940, tras una acci¨®n en la costa sudoriental inglesa, su avi¨®n fue alcanzado en un motor durante un combate con cazas Hurricane y hubo de realizar un aterrizaje forzoso en Francia cargado a¨²n con tres bombas. El mariscal Kesselring le impuso la Cruz de Hierro de segunda clase, algo de lo que Gnecchi se manifiesta todav¨ªa hoy muy orgulloso.
Sin embargo, y pese a su pasado fascista, el aviador se neg¨® a volar para la Rep¨²blica de Sal¨®. el Estado creado por Mussolini en el norte de Italia, en la nueva Aeronautica Nazionale Repubblicana (ANR) que sigui¨® combatiendo junto a los alemanes tras la capitulaci¨®n de Italia y el cambio de bando. Numeros pilotos italianos se unieron a la Aeronautica Cobelligerante Italiana, la fuerza a¨¦rea del gobierno realista de Badoglio, formada en octubre de 1943 y que volaba para los Aliados. No consta que Gnecchi lo hiciera.
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