Las mujeres gitanas se revuelven

¡°No es m¨¢s guapo y m¨¢s sexy el que mejor viste, sino el que m¨¢s personalidad tiene. Ese es el que al final tiene ¨¦xito¡±, contesta enigm¨¢tico Sina¨ª Jim¨¦nez cuando se le pregunta si la integraci¨®n entre gitanos y payos y la igualdad de las mujeres cal¨¦s son algo factible o solo una quimera. El secretario general de la Federaci¨®n Sociedad Gitana en Galicia sal¨ªa ayer por la tarde del Parlamento con un pu?ado de buenas palabras, que no es mucho, en el bolsillo. ?l y Mar¨ªa Jim¨¦nez, hija de Lupe, ¨²ltima v¨ªctima de violencia machista en Galicia, acababan de reunirse con la presidenta de la C¨¢mara, Pilar Rojo, para presentarle la reci¨¦n nacida Asociaci¨®n de Mujeres Gitanas y su proyecto para crear una red de oficinas de ¡°asistencia integral¡± en pro de la igualdad.

Hoy, de nuevo, les toca cita institucional con Alfonso Rueda. Y ser¨¢ la segunda vez que el vicepresidente de la Xunta los reciba desde que la mujer nacida en Vilaboa muri¨® acuchillada supuestamente a manos de su marido en febrero. La agenda pol¨ªtica de Sina¨ª Jim¨¦nez, desde aquel fat¨ªdico d¨ªa, no da tregua. Del delegado del Gobierno al fiscal jefe, pasando por ¡°todos los grupos parlamentarios¡±. Este hombre que tiene a gala ser tataranieto de ¡°don Paulo, primer rey de los gitanos de Galicia¡±, no ser¨¢ el m¨¢s sexy ni el m¨¢s guapo, pero hay unos cuantos cargos payos que ¨²ltimamente han querido hacerse la foto con ¨¦l.

Bajo el paraguas de Sina¨ª, Mar¨ªa Jim¨¦nez, a la que han empezado a llamar entre los de su etnia ¡°la hija coraje¡±, se ha convertido en portavoz del nuevo colectivo de mujeres gitanas, que forma parte de la Federaci¨®n. Su objetivo, con estas reuniones, es recabar apoyo econ¨®mico para tejer una red de oficinas por la integraci¨®n femenina de su raza como camino para la efectiva inserci¨®n de los gitanos en la sociedad. ¡°Cada vez, desde que muri¨® mi madre, estoy mejor de ¨¢nimo¡±, comenta. ¡°Esta responsabilidad me ayuda, tengo mucho empe?o. Si hubiera habido antes centros as¨ª donde se informase a las gitanas, mi madre no estar¨ªa muerta¡±.

No hay dinero, por ahora. Pero Mar¨ªa y Sina¨ª, que comparten apellido como miles de los de su raza, avanzan que optar¨¢n a todas las subvenciones posibles y que se abrir¨¢n cinco oficinas en ¨¢reas con mucha poblaci¨®n cal¨¦ (Vigo, A Coru?a, Santiago, Pontevedra y Ferrol). Con los Ayuntamientos de Lugo y Ourense, por su parte, se negociar¨¢ ¡°alg¨²n tipo de colaboraci¨®n¡±. ¡°Contrataremos trabajadores sociales payos y recibir¨¢n una formaci¨®n espec¨ªfica¡±, describe Sina¨ª, ¡°pero, en primera instancia, en los problemas entre matrimonios mediar¨¢n consejos de ancianos mixtos, de hombres y mujeres, que van a estar disponibles para cada una de estas oficinas¡±. ¡°En Ourense y Lugo¡±, donde viv¨ªan (antes de huir ella) Lupe y su esposo, Jos¨¦ Luis Corti?as, ¡°los consejos ser¨¢n itinerantes¡±.

Si un problema est¨¢ muy enquistado, ¡°entonces tendr¨¢ que mediar un gitano de respeto, que est¨¢ por encima del consejo¡±. Este cargo de honor de la ley gitana no solo lo ostentan hombres, recalca Sina¨ª: ¡°A las gitanas de respeto las llamamos t¨ªas¡±. Jim¨¦nez rechaza la idea de estar creando una red paralela a las que ya existen en la sociedad para la integraci¨®n y contra la violencia. ¡°Esta es la mejor manera porque los gitanos tenemos nuestra cultura; lo malo de ella lo vamos tirando y nos quedamos con lo bueno. Creemos firmemente en nuestro proyecto¡±.