Guardias en Bellvitge para evitar el cierre de camas

El mot¨ªn contin¨²a en la planta 12 del hospital de Bellvitge. Este viernes se cumpl¨ªa una semana desde que pacientes, trabajadores y sindicatos del centro tomaran la unidad de infecciosos del piso 12 para evitar el cierre de 200 camas, previstas en el plan de hospitalizaci¨®n de verano.

La Junta de Personal decidi¨®, tras una reuni¨®n frustrada con la gerencia de Bellvitge, hacer turnos de guardia en los pasillos de la planta como muestra de apoyo a la acci¨®n de protesta que ya ha evitado el cierre de tres plantas. ¡°Habr¨¢ al menos dos delegados sindicales en cada turno. Nos repartiremos las horas para alertar a los compa?eros si intentan trasladarlos durante el fin de semana¡±, explic¨® el presidente de la Junta, Ram¨®n Montoya. El director gerente de Bellvitge, Alfredo Garc¨ªa, afirm¨® que ¡°se seguir¨¢ adelante con el plan previsto¡± y redujo el conflicto con usuarios y empleados a un problema ¡°estrictamente laboral y salarial¡± de los sindicatos.

Los trabajadores denunciaron que en las ¨²ltimas 24 horas, algunos pacientes fueron intimidados por m¨¦dicos de la unidad en la que deber¨ªan ingresar. ¡°Algunos internos han sufrido coacciones por parte de algunos facultativos, que los amenazaban con no recibir asistencia m¨¦dica y de enfermer¨ªa si se quedaban en esta planta¡±, protest¨® el delegado de CGT, Manuel de los Riscos. El gerente, por su parte, neg¨® estas acusaciones y asegur¨® que ¡°solo se visit¨® a los pacientes para explicarle la situaci¨®n¡±. Ante el enquistamiento del conflicto, los sindicatos han decidido solicitar la mediaci¨®n del Parlament y han enviado una carta para poder comparecer ante la Comisi¨®n de Salud.

La percepci¨®n que intent¨® trasmitir este viernes el director gerente de ¡°absoluta normalidad¡± en los servicios asistenciales de Bellvitge, se top¨® de cara con las voces que se agolpaban en torno a la sala de juntas donde Garc¨ªa iba a dar su primera rueda de prensa tras el inicio del conflicto para explicar su versi¨®n. Con los ¨¢nimos caldeados y la negativa de la gerencia de permitir la entrada libre a la comparecencia, trabajadores, pacientes y familiares tomaron los micr¨®fonos para desmentir a los directivos de Bellvitge. ¡°Es una situaci¨®n ca¨®tica y desgraciada a la que no quer¨ªamos llegar. La actividad est¨¢ fatal, las urgencias colapsadas con pacientes en los pasillos, y los profesionales estamos sufriendo una presi¨®n brutal, no damos abasto y hemos dicho basta¡±, resumi¨® el presidente de la junta de personal, Ram¨®n Montoya.

En una constante guerra de cifras, los directivos tambi¨¦n negaron que se vayan a cerrar, tal y como aseguraron los sindicatos, 206 camas. Garc¨ªa redujo la cifra a 150 plazas, como m¨¢ximo, en agosto. En cualquier caso, el documento interno repartido a los jefes de servicio refleja, al menos, el cierre de unas 170 camas, m¨¢s una unidad de hospital de d¨ªa. Con todo, el gerente prometi¨® que se volver¨ªan a abrir ¡°todas¡± las camas cerradas en verano.

A pesar de que en la memoria del centro consta que en 2009 el hospital ten¨ªa 906 camas disponibles y este a?o cuenta con 650 ¡ªseg¨²n las ¨²ltimas declaraciones de los directivos¡ª, Garc¨ªa niega que Bellvitge haya perdido m¨¢s plazas que ¡°las 70 camas estructurales¡± que redujeron en 2011.

En medio del cruce de acusaciones, los sindicatos tambi¨¦n han sacado a relucir los 11 millones de euros que, aseguran, tendr¨¢ que reducir el hospital del presupuesto para paliar el d¨¦ficit de 2013. Los directivos, por su parte, negaron la cantidad y redujeron la cifra a seis millones, aunque no especificaron a qu¨¦ afectar¨ªa.

Bellvitge no es el ¨²nico centro ahogado por las protestas y los recortes de verano. Tambi¨¦n el Vall d¡¯Hebron, otro de los ocho hospitales p¨²blicos del Instituto Catal¨¢n de la Salud (ICS), ha vivido un colapso en el servicio de urgencias que desencaden¨® las denuncias de los facultativos del servicio. En una carta dirigida a los responsables del Departamento de Salud, del ICS y de su propio hospital, los trabajadores alertaron del atasco que han sufrido las urgencias en las ¨²ltimas semanas, una situaci¨®n que ha obligado a varios pacientes a estar hasta cinco d¨ªas esperando una cama en planta. El hospital sali¨® al paso de la denuncia de los trabajadores y calific¨® de ¡°un hecho puntual en las ¨²ltimas tres semanas¡± el colapso. El centro neg¨® cualquier relaci¨®n de los hechos con los recortes y la reducci¨®n de camas en verano. Vall d'Hebron clausurar¨¢ alrededor de un centenar de plazas.