Tres v¨ªas para el ¡®caso ERE¡¯ en el Supremo
El alto tribunal decidir¨¢ a partir de septiembre si asume la causa o solo la parte de los aforados Alaya se?ala a los exconsejeros Gaspar Zarr¨ªas y Mar Moreno
La envergadura del caso de los ERE marcar¨¢ los tiempos en su paso por el Tribunal Supremo. Tras m¨¢s de tres a?os y medio de instrucci¨®n, la juez Mercedes Alaya remiti¨® el martes la causa al alto tribunal al encontrar indicios que supuestamente incriminan en el fraude a aforados, entre ellos, los expresidentes andaluces Manuel Chaves y Jos¨¦ Antonio Gri?¨¢n. El proceso en el Supremo se ve alterado por el periodo estival (solo hay una sala en funcionamiento), por lo que habr¨¢ que esperar hasta septiembre para que se d¨¦ curso a la documentaci¨®n remitida por la magistrada (la exposici¨®n razonada para inhibirse y 20 de los 80 tomos del sumario). Seg¨²n fuentes cercanas a la instrucci¨®n, la decisi¨®n del Supremo podr¨ªa demorarse entre dos y tres meses.
A la vuelta de las vacaciones, la Sala de lo Penal del Supremo enviar¨¢ al fiscal la exposici¨®n razonada remitida por Mercedes Alaya para que realice un informe sobre la competencia del tribunal y su contenido, como hace con todas las causas que llegan al Supremo de otros juzgados espa?oles. Seg¨²n fuentes judiciales, el documento remitido por Alaya es de 376 folios y va acompa?ado de varios anexos, tanto en papel como en soporte digital. Dichas fuentes descartan que, pese a la voluminosa documentaci¨®n, el fiscal se demore ¡°m¨¢s de la cuenta¡± en su cometido.
La decisi¨®n de los magistrados podr¨¢ demorarse entre dos y tres meses
Una vez elaborado el informe, el fiscal enviar¨¢ este documento junto con el escrito de la magistrada a dicha sala del Supremo, en la que un tribunal colegiado deliberar¨¢ si comparte los indicios de delito apreciados por la juez Alaya sobre alguno o sobre todos los aforados y decidir¨¢ qu¨¦ hace con el caso. Seg¨²n fuentes judiciales, en la exposici¨®n razonada ¡ªque Alaya no ha notificado a las partes¡ª, la juez no solo nombra a Gri?¨¢n y a Chaves sino tambi¨¦n a siete exconsejeros. Adem¨¢s de los se?alados junto a los dos expresidentes, en el auto del pasado septiembre, en virtud del art¨ªculo 118 bis de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (Jos¨¦ Antonio Viera, Antonio ?vila, Manuel Recio, Carmen Mart¨ªnez Aguayo y Francisco Vallejo), Alaya apunta hacia los exconsejeros de la Presidencia Gaspar Zarr¨ªas (a quien orden¨® investigar Alaya por su supuesta relaci¨®n con el exsindicalista y conseguidor de los ERE Juan Lanzas) y Mar Moreno.
Alaya acusa a la anterior c¨²pula del Gobierno andaluz porque considera que dise?¨® el fondo para conceder ayudas sociolaborales en los ERE y subvenciones directas a empresarios de manera arbitraria, una v¨ªa que dot¨® con 721 millones de euros entre 2001 y 2010. En el auto de septiembre, Alaya les comunicaba que los consideraba part¨ªcipes o conocedores del dise?o del fondo, concebido para burlar la ley, en opini¨®n de la magistrada.
La gran inc¨®gnita a despejar ahora es cu¨¢l ser¨¢ la decisi¨®n de los magistrados. ¡°El Supremo jam¨¢s se ha enfrentado a una causa de estas dimisiones y si atendemos a los antecedentes es muy aventurado dar una sola respuesta¡±, asegura uno de los abogados, quien llega a calificar el volumen de la instrucci¨®n como ¡°monstruoso¡± (201 imputados y un sumario que supera los 300.000 folios). Es por ello que dichas fuentes apuntan a tres posibles desenlaces con sus correspondientes consecuencias: que el alto tribunal asuma el caso de los ERE al completo, que solo retenga la parte que afecta a los nueve aforados o que devuelva la causa a la juez Alaya para que contin¨²e con la instrucci¨®n.
Entre las fuentes consultadas, la decisi¨®n que gana m¨¢s peso es la tercera. Consideran que el Tribunal Supremo devolver¨¢ a Alaya el caso para que concluya la instrucci¨®n, una vez ultimada deber¨¢ remitirla de nuevo al alto tribunal para, ya entonces s¨ª, investigar a los aforados. ?C¨®mo afectar¨ªa esta decisi¨®n a la instrucci¨®n? La principal consecuencia, y la m¨¢s directa, ser¨ªa su dilataci¨®n en el tiempo ya que, seg¨²n dichas fuentes, ¡°a¨²n resta mucho por hacer¡±, principalmente, ¡°el menudeo de las empresas que recibieron ayudas directas¡± del Ejecutivo andaluz, que alcanzan los 127 millones de euros.
La segunda opci¨®n m¨¢s probable es que el Supremo trocee el caso y retenga la parte que afecta a los aforados. Esta decisi¨®n ir¨ªa en contra de la postura que, desde un primer momento, ha defendido Alaya, quien considera que la causa es ¡°inescindible¡± debido a la conexi¨®n que existe entre las diferentes l¨ªneas de investigaci¨®n abiertas y para ¡°evitar en el futuro hipot¨¦ticas sentencias contradictorias¡±. De dividir la causa, el Supremo no solo asumir¨ªa la parte pol¨ªtico-financiera del caso sino tambi¨¦n, previsiblemente, la referente a las empresas de la Sierra Norte de Sevilla por la supuesta implicaci¨®n del exconsejero Jos¨¦ Antonio Viera en la concesi¨®n de las ayudas a estas empresas. La Guardia Civil acus¨® al exconsejero de tener ¡°relaciones e intereses¡± para concentrar el 61% de las subvenciones directas a compa?¨ªas de esta peque?a comarca de 30.000 habitantes. Esta segunda opci¨®n es la que, en los ¨²ltimos meses, ha defendido la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n con el objetivo de ¡°concluir en un plazo razonable la instrucci¨®n¡± con la utilizaci¨®n ¡°racional y eficiente de los recursos humanos y materiales de la justicia¡±.
La opci¨®n m¨¢s probable es que la sala devuelva la causa a la juez
A la hora de retener esta parte de la causa, el Supremo tambi¨¦n deber¨¢ decidir si solo se queda con los aforados que le son competentes (los diputados Chaves, Viera y Zarr¨ªas; y el senador Gri?¨¢n) o si arrastra con ellos a los otros exconsejeros, actualmente diputados andaluces. Si solo se queda con los cuatro primeros, Alaya deber¨¢ acudir al Tribunal Superior de Justicia de Andaluc¨ªa (TSJA) para que se haga cargo de Mart¨ªnez Aguayo, Vallejo, ?vila, Recio y Moreno. ¡°Los magistrados del Tribunal Supremo estudiar¨¢n si existen indicios contra a algunos o contra todos los aforados. Una vez resuelto este punto, decidir¨¢ si asume la parte de los nueve aforados o solo la de los cuatro que le son directamente competentes. En este asunto, no hay una regla establecida¡±, explican fuentes judiciales.
La tercera opci¨®n, y la menos probable seg¨²n las fuentes consultadas, es que el Supremo asuma la causa al completo y respalde as¨ª la decisi¨®n de la juez Mercedes Alaya de no dividir el caso antes de inhibirse, tal y como tambi¨¦n apoy¨® a finales de julio la Audiencia Provincial de Sevilla. En ese caso, el alto tribunal deber¨ªa concluir una instrucci¨®n en la que ¡°a¨²n queda bastante trabajo¡±, seg¨²n dichas fuentes. ¡°Pese a lo medi¨¢tico del caso, es casi improbable que el Supremo asuma la causa al completo. Ser¨ªa como volver a empezar la instrucci¨®n y supondr¨ªa alargar el caso innecesariamente¡±, explica uno de los abogados.
Tras el paso atr¨¢s dado por Mercedes Alaya, la instrucci¨®n queda en suspenso hasta que el Tribunal Supremo tome una decisi¨®n. Seg¨²n fuentes judiciales, durante estos meses, la magistrada solo podr¨¢ acometer instrucciones de car¨¢cter urgente. ¡°Podr¨¢ dictar alg¨²n auto de embargo pendiente u ordenar alguna actuaci¨®n que sea de vital importancia para el buen desarrollo de la investigaci¨®n, pero poco m¨¢s¡±, precisan dichas fuentes, que a?aden que, previsiblemente, Alaya ¡°centrar¨¢ sus fuerzas¡± estos meses en la investigaci¨®n sobre el supuesto fraude en cursos de formaci¨®n para desempleados, una causa judicializada en siete de las ocho provincias andaluzas. ¡°Lo que s¨ª est¨¢ claro es que el caso ERE descansar¨¢ este oto?o en Sevilla¡±, concluye la defensa de varios imputados.
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