La falta de anestesistas deja sin epidural a algunas parturientas en Valdeorras
Las urgencias acaparan los facultativos disponibles en detrimento de los partos
Los recortes emprendidos por el Servizo Galego de Sa¨²de (Sergas) ponen en peligro la oferta de la anestesia epidural a las parturientas en el hospital comarcal de Valdeorras. Aunque la gerencia contin¨²a ofreciendo este sistema analg¨¦sico a las embarazadas, no puede practicarlo cuando se generan urgencias en el centro hospitalario. Y han comenzado las quejas. Aunque el Sergas insiste en que mantiene el mismo n¨²mero de anestesistas de siempre, el comit¨¦ de personal matiza que ha suprimido el pago de horas extraordinarias que realizaba uno de estos profesionales mediante guardias localizadas, lo que ha mermado la prestaci¨®n. A ello se suma que la gerencia hospitalaria no ha cubierto la baja por enfermedad del jefe de servicio.
?Ambos factores se conjugaron contra una usuaria de este hospital a mediados de agosto. La mujer ten¨ªa programada una inducci¨®n del parto. El hospital le ofert¨® desde el comienzo del embarazo el servicio de anestesia epidural ¡ªun m¨¦todo de alivio de dolor durante las contracciones que requiere la introducci¨®n entre las v¨¦rtebras lumbares de un cat¨¦ter por el que se van suministrando los analg¨¦sicos¡ª pero llegado el momento no pudo practicarle esta t¨¦cnica. Cuando la parturienta alcanz¨® el nivel de dilataci¨®n adecuado, la anestesista le comunic¨® que no podr¨ªa someterla a esta anestesia porque hab¨ªa dos urgencias en el hospital que no pod¨ªa abandonar ya que no hab¨ªa m¨¢s anestesistas ese d¨ªa.
¡°Tuvo mala suerte¡±, sostiene el Sergas tras precisar que ¡°hoy como desde que se abri¨® el hospital hay cuatro anestesistas, pero una urgencia puede surgir en cualquier momento¡±. El comit¨¦ de personal sostiene, sin embargo, que falta uno de estos especialistas desde el 13 de agosto y que su baja por enfermedad no ha sido cubierta. A ello a?ade que la gerencia suprimi¨® ¡°para ahorrar costes¡± el servicio de anestesista de guardia localizada. ¡°Antes hab¨ªa siempre uno disponible al que se llamaba en caso de urgencia y cobrara por ello horas extraordinarias¡±, afirman. Los representantes sindicales de los trabajadores aseguran adem¨¢s que desde que uno de los cuatro anestesistas consigui¨® el traslado, ¡°los m¨¦dicos que vinieron para sustituirlo rechazaron el contrato en las condiciones que les ofertaba el Sergas¡±. La plaza se cubri¨® finalmente a comienzos de agosto, pero el servicio volvi¨® a quedar mermado de inmediato por la baja del jefe.
La mujer a la que le ofertaron la anestesia epidural que finalmente no le practicaron ¡ªpese a haberle programado consultas y anal¨ªticas con el anestesista antes del parto¡ª asegura que, frente a lo prometido, soport¨® ¡°dolores espantosos durante ocho horas¡±, solo aliviados ¡°por el buen hacer del personal de ginecolog¨ªa y matronas¡±.
El pasado mes de junio, 35 m¨¦dicos del hospital de Valdeorras denunciaron recortes en el personal de guardia, adem¨¢s de consultas masificadas y contratos en precario, medidas que, en opini¨®n de los profesionales, tienen como objetivo el ¡°desmantelamiento¡± de este centro sanitario comarcal. El Sergas neg¨® las deficiencias acusando a los facultativos de buscar solo mayores retribuciones econ¨®micas, y el sindicato m¨¦dico O'Mega-CESM traslad¨® la denuncia a la fiscal¨ªa alertando del riesgo sanitario como consecuencia de la gesti¨®n de ¡°una gerencia que antepone de forma dictatorial el ahorro indiscriminado a la eficiencia sanitaria¡±.
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