M¨²sica para sanar cuerpo y alma
Un ciclo lleva a grandes int¨¦rpretes de cl¨¢sica a cuatro hospitales madrile?os
Cinco de la tarde de un domingo en el Hospital Cl¨ªnico San Carlos. No hay clases ni lecciones de Medicina, pero en el aire se respira algo que s¨ª es magistral. Del otro lado de una puerta, en un pasillo vac¨ªo cercano al sal¨®n de actos, viene un sonido antiguo de tiorba ¡ªuna especie de la¨²d¡ª que retumba en las paredes. En una hora escasa, esa misma m¨²sica sonar¨¢ ante un auditorio lleno en el propio hospital. Los int¨¦rpretes de m¨²sica antigua Jordi Savall (Igualada, Barcelona, 1941) y su hijo Ferr¨¢n (Basilea, Suiza, 1979) abren el ciclo M¨²sica en vena en los hospitales madrile?os.
La iniciativa est¨¢ impulsada por la asociaci¨®n hom¨®nima, que desde 2012 promueve el acercamiento de las artes a los pacientes y personal sanitario en Madrid. Este a?o es el primero que se al¨ªan con el Centro Nacional de Difusi¨®n Musical (CNDM) para organizar el ciclo que llevar¨¢ a m¨²sicos de primera fila a cuatro hospitales diferentes (San Carlos, Doce de Octubre, Gregorio Mara?¨®n y Puerta de Hierro) en una docena de conciertos hasta el 10 de junio. De esta forma, el CNDM lleva a sus artistas a estos hospitales p¨²blicos de forma gratuita antes de que pasen por el Auditorio Nacional. Savall lo hizo el martes como director de la Capella Reial de Catalunya.
Dicen que la m¨²sica es un b¨¢lsamo para el alma pero, ?pueden sanar el cuerpo las notas de un piano? Eso es lo que tratan de responder, en esta tarde de domingo, los pacientes del Cl¨ªnico a¨²n vestidos con los camisones blancos. ¡°Las vibraciones de un instrumento o una voz tienen un valor curativo. Yo mismo padec¨ª un tifus de peque?o, y la m¨²sica me ayud¨® a superar la enfermedad y vencerla¡±, dice Jordi Savall. M¨¢s cient¨ªfico se pone su hijo Ferr¨¢n: ¡°Cualquier est¨ªmulo que te ayude a superar una situaci¨®n es v¨¢lido. Hay enfermedades que no puede curarte la m¨²sica, pero s¨ª que puede ayudarte a generar endorfinas o a encontrar paz para afrontar la dificultad¡±.
En el auditorio del Cl¨ªnico, las dos primeras filas est¨¢n reservadas para enfermos y familiares. No pueden evitar que se les escape una sonrisa cuando la lira da gamba de Jordi da la entrada a un Ferr¨¢n que dulcifica los agudos de su voz para entonar una hermosa canci¨®n de cuna de Israel o una tonada sefard¨ª con letra de Cervantes que habla de amor y viajes en barco. El p¨²blico est¨¢ absorto y, junto a una l¨¢mpara hogare?a de sobremesa, Ferr¨¢n y Jordi se unen en un concierto paternofilial de apenas 45 minutos pero que para ambos es un placer que cada vez pueden sentir menos a menudo por culpa de su apretada agenda. Ser¨¢ a¨²n m¨¢s dif¨ªcil a partir de ahora: el padre fue nombrado el mi¨¦rcoles Premio Nacional de M¨²sica 2014 en la categor¨ªa de Interpretaci¨®n.
El concierto de esta tarde, un mano a mano familiar, es un viaje por Oriente Medio, cantos de exilio y sufrimiento, de pueblos que se refugiaron en la m¨²sica para superar una vida que les asfixiaba. ¡°Algunas de las m¨²sicas del recital han ayudado a la gente a sobrevivir. Es el caso de las m¨²sicas sefarditas con las que abrimos el concierto, o la de los esclavos, que era lo ¨²nico que les quedaba despu¨¦s de hab¨¦rselo arrebatado todo¡±, dice Savall padre.
A este recital seguir¨¢n otros once. El pr¨®ximo, el de la violinista Viktoria Mullova en el Puerta de Hierro. Tras ella, pasar¨¢n por los centros la soprano Raquel Andueza, los pianistas Judith J¨¢uregui y Christian Zacharias o el bar¨ªtono Leo Nucci en un ciclo que cerrar¨¢ la pianista Elisabeth Leonskaja en el Gregorio Mara?¨®n. Todos ellos hacen un par¨®n en sus agendas para dedicar algunos pasajes a aquellos que encuentran en la m¨²sica un f¨¢rmaco sanador.
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