Carisma en Movimiento
Madrid en Danza se inicia con la madrile?a M¨®nica Runde El astro del baile contempor¨¢neo celebra el 25? aniversario de su compa?¨ªa
Con la contundencia de frases como ¡°el movimiento es tambi¨¦n salud mental, no solamente f¨ªsica¡±, M¨®nica Runde (Madrid, 1963) es por derecho propio una de las figuras m¨¢s relevantes de la presente edici¨®n del Festival Internacional Madrid en Danza. El certamen se abre este viernes en el Teatro de La Abad¨ªa con la potente presencia esc¨¦nica de La Runde, como se la conoce en la profesi¨®n imitando la manera de llamar a los m¨¢s flamencos; ella es Premio Nacional de Danza 2000, figura carism¨¢tica fundacional del baile moderno espa?ol y una de sus m¨¢s tenaces sostenedoras, con un consolidado prestigio en Am¨¦rica y otras plazas europeas.
En el Teatro de La Abad¨ªa y hasta el d¨ªa 9, la artista se muestra en solitario con cuatro nuevas piezas para celebrar as¨ª los 25 a?os de su compa?¨ªa: 10&10 Danza, uno de los conjuntos con m¨¢s larga trayectoria de la capital y por el que ya han pasado hasta tres generaciones de bailarines. Una tenacidad a prueba de tempestades: eso es lo que aflora al verla trabajar. Esta bailarina y creadora, de padre espa?ol y madre alemana, tambi¨¦n premio nacional de danza en Costa Rica, se ha comprometido con el asociacionismo y las reivindicaciones de un sector que parece vivir en constante crisis. Durante un tiempo, se ocup¨® de la asociaci¨®n mayoritaria de bailarines de Madrid y luch¨® por mantener abierto su estudio.
Los avatares han llevado a M¨®nica a seguir sobre las tablas y a intensificar el trabajo en solitario, un fiel reflejo de un panorama que parece buscar c¨®mo sostenerse en pie, pero siempre en un plano peligrosamente inclinado.
De lo novedoso, los homenajes y los lenguajes h¨ªbridos
La vig¨¦simo novena edici¨®n de Madrid en Danza, que empieza este jueves 6 hasta el 30 de noviembre, apuesta por cuatro ejes tem¨¢ticos: hacer un recorrido por la historia de la danza, apoyar a los nuevos talentos, resaltar el trabajo de los core¨®grafos locales y mostrar la renovaci¨®n de la tradici¨®n flamenca y espa?ola a trav¨¦s de la obra de artistas que exploran una nueva est¨¦tica. Seg¨²n la directora del festival, Ana Cabo, en el programa de mano del evento, la presentaci¨®n de nueve estrenos absolutos hace de la programaci¨®n un referente de la danza actual.
Para conmemorar la historia reciente de la danza el festival presenta las obras de dos artistas de talla mundial. La legendaria Susane Linke (L¨¹neberg, Alemania, 1944) muestra su obra de 1991 Ruhrort, un trabajo que celebra la trayectoria de una de las pioneras de la danza teatro, exbailarina de Pina Bausch, y el core¨®grafo belga, Wim Vandekeybus (Herendout, 1963), que sigue marcando la pauta de la escena de la danza contempor¨¢nea, presenta What the body does not remember, obra que realiz¨® en 1986 para su compa?¨ªa ?ltima vez. Vandekeybus instaur¨® desde entonces un lenguaje de la danza del riesgo, con desplazamientos sobre el suelo como no se hab¨ªa visto antes y que ahora hacen parte del vocabulario de todo bailar¨ªn contempor¨¢neo.
La apuesta por la innovaci¨®n cree hacerse a trav¨¦s de las coreograf¨ªas de artistas como Marina Mascarell, exbailarina del Nederlands Dans Theater (NDT), Tamako Akiyama y Dimo Kirilov, bailarines de la Compa?¨ªa Nacional de Danza. En el caso de Mascarell, se trata de una producci¨®n del teatro Korzo de La Haya, conocido por acoger a bailarines del NDT, para que se inicien como core¨®grafos. Pareciera que bailarines de renombrados ballets encuentran sin mayor dificultad el camino hacia festivales simplemente por venir de una determinada compa?¨ªa sin que esto garantice que sean realmente ejemplo de una investigaci¨®n art¨ªstica profunda.
Un seguimiento de estos artistas desde ahora hasta en algunos a?os dar¨¢ prueba de lo innovador de su propuesta en danza m¨¢s all¨¢ de su destacable virtuosismo como bailarines.
M¨®nica Runde lidera la cartelera de artistas locales. En una obra en la que a su vez articula la voz de core¨®grafos madrile?os como Carmen Werner y Carla Faci, Runde se homenajea a s¨ª misma por 25 a?os de trabajo art¨ªstico. Un reconocimiento seguramente merecido por su apuesta constante por la escena de la danza en Madrid.
Daniel Do?a, con su estreno Black box, es un ejemplo de la investigaci¨®n sobre lenguajes h¨ªbridos entre la tradici¨®n espa?ola y lo contempor¨¢neo.
Pregunta. La danza contempor¨¢nea espa?ola no pasa por un buen momento. ?Cu¨¢les cree usted que son las razones y c¨®mo le han afectado personalmente?
Respuesta. Las razones son los cambios en las ayudas econ¨®micas, la poca programaci¨®n y el escaso inter¨¦s institucional. Las ayudas econ¨®micas son escasas y llegan muy tarde. Adem¨¢s, se programan un 50% menos de espect¨¢culos de danza desde 2008, lo que significa menos trabajo. Respecto a las instituciones, las ayudas cada vez son m¨¢s peque?as y nuestro gran problema es adelantar el dinero antes de recibirlas. Acabamos nosotros subvencionando la marca Espa?a en nuestro pa¨ªs y en el extranjero.
P.??Que sea tan dif¨ªcil para una compa?¨ªa de danza contempor¨¢nea tener un repertorio estable tiene que ver con todo esto?
R.?Efectivamente, es uno de nuestros dramas, y c¨®mo no, tiene que ver directamente con la estabilidad econ¨®mica de las compa?¨ªas de danza contempor¨¢nea en nuestro pa¨ªs. 10&10 tuvo durante a?os estudio propio y un elenco estable. Esa es la ¨²nica manera de mantener un repertorio. Como la mayor¨ªa de compa?¨ªas de danza contempor¨¢nea, desde hace unos a?os trabajamos por producci¨®n. Eso significa que el repertorio se esfuma, y en el caso de querer reponerlo supone remontarlo todo (escenograf¨ªa, vestuario, ense?arlo a bailarines nuevos¡), lo que econ¨®micamente es imposible, porque los gastos son los mismos que los de hacer una nueva producci¨®n.
P. El programa de solos de creaci¨®n para celebrar los 25 a?os de 10&10 no tiene voluntad retrospectiva. ?No ve necesario mirar atr¨¢s?
R. He planteado un programa acorde con los tiempos que corren y que no se quedara en el caj¨®n de los recuerdos despu¨¦s de la celebraci¨®n. No es momento de mirar atr¨¢s. Ahora que todo est¨¢ cambiando, es momento de mirar el presente e intentar facilitar un futuro. Por eso un solo, pero no sola. Me acompa?an creadores de alt¨ªsimo nivel.
P. Las cifras aportadas por la SGAE sobre el descenso de espectadores en la danza son alarmantes. ?Qu¨¦ opina de esta situaci¨®n?
R. El descenso de espectadores corre en paralelo al descenso de programaci¨®n de danza. Es una pescadilla que se muerde la cola. Mientras no se tenga un teatro propio, un espacio para la danza, como tienen los centros dram¨¢ticos o la Compa?¨ªa Nacional de Teatro Cl¨¢sico, y se programen los espect¨¢culos, va a ser dif¨ªcil crear un p¨²blico estable de danza.
P. Su trabajo como maestra y core¨®grafa ha tenido una satisfactoria implantaci¨®n en M¨¦xico. ?C¨®mo surgi¨® esa colaboraci¨®n?
R. En Costa Rica conoc¨ª a la maestra Marcela Aguilar, costarricense radicada en M¨¦xico DF, con la que result¨® ten¨ªa un pasado com¨²n en el London Contemporary. Comenzamos colaboraciones creativas e interpretativas hace m¨¢s de diez a?os.
P. Su trabajo en el cine ha sido breve, pero en 2000 colabor¨® con John Malkovich en Pasos de baile. ?C¨®mo fue?
R. Intenso, porque el trabajo de cine no te da el tiempo de reflexi¨®n que s¨ª te da la preparaci¨®n esc¨¦nica con meses de ensayo con un director. En el cine todo es m¨¢s r¨¢pido, un rodaje es caro y enseguida hay que pasar a la siguiente toma. Malkovich tiene una forma de trabajar que al principio te parece el caos, pero en un momento dado te das cuenta de que tiene clar¨ªsimo qu¨¦ es lo que quiere y c¨®mo.
P. Usted imparte danza para actores. ?C¨®mo se les encauza hacia el movimiento?
R. Trabajo mucho la improvisaci¨®n, distintas t¨¦cnicas de estiramiento y desbloqueo articular. Lo que les ense?o es a liberar su cuerpo de tensiones para poder moverse libremente, a ser conscientes de su cuerpo en el espacio, su relaci¨®n con lo que les rodea y con los otros actores.
P. ?Qu¨¦ sugiere a los j¨®venes artistas de la danza que quieren comenzar una carrera en la creaci¨®n coreogr¨¢fica?
R. Primero, que trabajen con cuantos m¨¢s creadores puedan, en todo tipo de producciones, que beban de los que ya tienen conocimiento y trayectoria, y si no pueden hacerlo que los vean, que vayan al teatro y hagan hueco en la butaca de tanto ver. Luego, que sean fieles a sus convicciones creativas y no se dejen llevar ni por modas ni por exigencias de programadores.
P. Ya en su madurez tanto como creadora como mujer del escenario, ?han cambiado sus rutinas o siguen siendo las de siempre? ?C¨®mo es su relaci¨®n con su propio cuerpo y con el espejo hoy?
R. La rutina ha cambiado sustancialmente, pero no ahora por la edad, sino desde el momento en que dejamos de tener un elenco estable al que entrenar a diario en danza. Ahora el entrenamiento es m¨¢s variado, unos d¨ªas danza, otros yoga, otros Pilates, y recibidos todos ellos de otra manera, en el sentido en que lo que quiero es mantener un tono, no ir m¨¢s all¨¢ en lo f¨ªsico, como cuando uno es estudiante o forma parte de un elenco, y s¨ª mantenerme m¨¢s en lo emocional. El movimiento tambi¨¦n es salud mental, no s¨®lo f¨ªsica.
Episodios (Temporada 25). Compa?¨ªa 10&10 DANZA. Con: M¨®nica Runde. Coreograf¨ªas de Daniel Abreu, Pedro Berdayes, Claudia Faci, Carmen Werner y Luis Luque. Teatro de La Abad¨ªa. Del 7 al 9 de noviembre.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.