Un polic¨ªa muere arrollado por un tren en Embajadores

Un hombre de 28 a?os, natural de Costa de Marfil, arroj¨® este viernes a las v¨ªas del tren a un polic¨ªa que trataba de identificarle. El convoy de Cercan¨ªas que entraba en ese momento en la estaci¨®n de Embajadores, en el centro de Madrid, alcanz¨® de lleno al agente, que falleci¨® en el momento. El agresor, que cay¨® con ¨¦l, se encuentra muy grave.

El polic¨ªa fallecido, Francisco Javier Ortega, que tambi¨¦n ten¨ªa 28 a?os, patrullaba con otro compa?ero a las doce del mediod¨ªa cuando el presunto agresor, Ali Raba Yode, les grit¨® e insult¨®, explican fuentes policiales. Los agentes intentaron identificarle, pero Raba Yode, con antecedentes por resistencia a la autoridad y robo con violencia, se neg¨® y ¡°se puso muy nervioso¡±, apunt¨® la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes. Un v¨ªdeo grabado por un testigo muestra c¨®mo el hombre agarr¨® al polic¨ªa justo en el momento en que el convoy entraba en la estaci¨®n y tir¨® de ¨¦l hacia atr¨¢s, de modo que ambos cayeron a la v¨ªa.

El polic¨ªa muri¨® en el acto. Ortega, nacido en Madrid y con familia abulense, no estaba casado ni ten¨ªa hijos, aunque s¨ª pareja. Formaba parte de la Brigada M¨®vil de la Comisar¨ªa General de Seguridad Ciudadana, encargada de tareas de seguridad en trenes y autobuses. Los bomberos rescataron al otro hombre, atrapado debajo del tren. El herido estaba consciente cuando llegaron los sanitarios del Samur, aunque despu¨¦s perdi¨® el conocimiento. Sufri¨® un traumatismo craneoencef¨¢lico y fue ingresado en estado muy grave en el hospital Doce de Octubre.

El hombre estaba fichado por la polic¨ªa con varias identidades. Hab¨ªa cumplido los 28 a?os un d¨ªa antes, el 1 de enero, seg¨²n la fecha que el propio herido hab¨ªa proporcionado a la polic¨ªa en encontronazos anteriores. Tambi¨¦n hab¨ªa sido arrestado por infracci¨®n de la Ley de Extranjer¨ªa y por entrada irregular en Espa?a.

El agresor, de Costa de Marfil, ten¨ªa antecedentes por robo con violencia

Ning¨²n pasajero pudo apearse del tren durante buena parte de la ma?ana en la estaci¨®n de Embajadores, pr¨®xima al c¨¦ntrico barrio de Lavapi¨¦s y en la que confluyen una l¨ªnea de Cercan¨ªas y dos de metro, que funcion¨® con normalidad. Los servicios de emergencia del Ayuntamiento de Madrid recibieron la primera llamada de alerta a las 11.56; a partir de ese momento, se cerraron los dos andenes de la l¨ªnea de C-5 de Renfe, que une la capital con las localidades de Humanes y M¨®stoles.

¡°?Han detenido al de Atocha?¡±, preguntaba uno de los curiosos que se agolpaban al salir a la calle. Los autobuses que circulaban hacia el centro de Madrid tampoco hac¨ªan parada en la glorieta de Embajadores y los vecinos del n¨²mero 7 de la plaza tuvieron que esperar m¨¢s de una hora para acceder a sus casas. La zona, llena de agentes y furgones policiales, fue acordonada hasta que fue retirado el cad¨¢ver del fallecido.

Un grupo de polic¨ªas esperaba en la boca del metro la retirada del cuerpo de su compa?ero. El ministro del Interior, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, y la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, se acercaron para transmitirles sus condolencias. Cifuentes explic¨® que el agente que patrullaba con Ortega solo pudo ¡°contemplar¡± el forcejeo, pues todo sucedi¨® con mucha rapidez. ¡°Ha dado su vida trabajando para garantizar la seguridad de los ciudadanos¡±, a?adi¨® en Twitter.

¡°Es muy com¨²n ver polic¨ªa por aqu¨ª, aunque a veces van de paisano y ni siquiera te enteras¡±, aseguraba el taquillero del tren. Uno de los trabajadores del metro apunt¨® el motivo: ¡°En la glorieta de Embajadores hay mucho menudeo y paran las kundas¡±, los taxis inprovisados que trasladan a los drogadictos hasta la Ca?ada Real, donde estos compran sus dosis.

A las tres de la tarde, cuando los trenes volvieron a detenerse en Embajadores, los viajeros caminaban hacia la salida, ajenos a lo que acababa de suceder. Solo los empleados continuaban comentando lo ocurrido.