Las dilaciones echan por tierra la instrucci¨®n de un gran fraude fiscal
La fiscal¨ªa considera prescritos los delitos tributarios y de falsedad tras una d¨¦cada de pesquisas a Gr¨²as Estaci¨®n y retira los cargos a 18 imputados
En los a?os de esplendor del ladrillo, las plataformas de Gr¨²as Estaci¨®n se elevaban hacia el cielo desde el suelo de toda Galicia. La empresa de Padr¨®n (A Coru?a) disfrutaba de las mieles del negocio cuando en julio de 2004 uno de sus tres due?os, Seraf¨ªn Montenegro, denunci¨® a sus socios, su hermano Santiago y Carlos Mosquera, acus¨¢ndoles de gestionar la sociedad a trav¨¦s de una contabilidad b alimentada con facturas falsas y operaciones ficticias para eludir impuestos. As¨ª naci¨® el caso Estaci¨®n, un presunto macrofraude cuantificado en seis millones de euros entre 2002 y 2005, que tras acumular 21 imputados y cinco tipos de delitos (fiscal, societario, contable, apropiaci¨®n indebida y falsedad documental) est¨¢ ahora amenazado de ruina. Despu¨¦s de una d¨¦cada de lentas pesquisas, la fiscal¨ªa acaba de presentar un informe en el que retira su acusaci¨®n por delitos contra la Hacienda p¨²blica y falsedad documental alegando, entre otras cosas, que ya han prescrito. El ministerio p¨²blico solo mantiene las imputaciones contra tres personas. Y una de ellas es el denunciante.
La fiscal Ar¨¢nzazu San Jos¨¦ defiende la retirada de los cargos por delito fiscal y falsedad documental porque considera que ya han prescrito y por las contradicciones entre los dos peritos de la Agencia Tributaria que intervinieron en la instrucci¨®n, dos expertos del mismo organismo p¨²blico que llegan a conclusiones radicalmente distintas. El primero, ?ngel Fern¨¢ndez Docampo, present¨® su estudio en marzo de 2010 tras investigar la contabilidad de Gr¨²as Estaci¨®n y concluy¨® la existencia de indicios de falsedad documental y de nueve delitos fiscales cometidos presuntamente por Santiago Montenegro y Carlos Mosquera, por los que Hacienda dej¨® de ingresar unos 2,8 millones de euros por sociedades e IVA. El segundo, Jos¨¦ Mar¨ªa Gonz¨¢lez Seijo, revis¨® cr¨ªticamente el informe de Docampo cuatro a?os despu¨¦s a petici¨®n de estos dos imputados y con la oposici¨®n del denunciante (ahora tambi¨¦n imputado), que lo acus¨® de ocultar facturas falsas de Gr¨²as Estaci¨®n a las que tuvo acceso mientras investigaba otro fraude, el de la empresa viguesa Las Cinco Jotas.
El ¡°asombroso¡± giro de la causa
Cuando la fiscal¨ªa y los peritos empezaron a escarbar en la contabilidad de Gr¨²as Estaci¨®n, el derrame de sospechas por los supuestos desmanes contables lleg¨® a alcanzar a un capit¨¢n de la Guardia Civil y a un exadministrador de la Agencia Tributaria ¡ªluego desimputados¡ª y el expeditivo avance de la mancha oblig¨® a la juez a dividir la voluminosa causa en dos procedimientos judiciales (uno para la etapa 2002-2005 y otro para los a?os siguientes). La segunda parte ha sido archivada tras un peritaje realizado por Gonz¨¢lez Seijo y ahora, despu¨¦s del escrito del pasado 15 de enero en el que el ministerio p¨²blico descarta presentar cargos por delito fiscal y falsedad en el periodo 2002-2005, el caso Estaci¨®n agoniza.
La defensa de Seraf¨ªn Montenegro considera que la fiscal Ar¨¢nzazu San Jos¨¦, que se incorpor¨® a la instrucci¨®n en la recta final, ha dado ¡°un giro radical¡± a la posici¨®n mantenida hasta ahora por el ministerio p¨²blico ¡°tendiendo lazos¡± con los principales imputados. ¡°Se nos escapa y desconocemos cu¨¢l ha sido realmente la raz¨®n del asombroso cambio de criterio adoptado por el ministerio p¨²blico, pero desde luego es radicalmente imposible que este pueda deberse al resultado de las diligencias de investigaci¨®n¡±, afirma el letrado Jos¨¦ Antonio Chocl¨¢n en su respuesta a la fiscal¨ªa.
Chocl¨¢n critica que el ministerio p¨²blico ¡°deje de perseguir¡± los delitos fiscales aceptando ¡°ciegamente¡± los argumentos de Seijo, el segundo perito, pese a que este ¡°no tuvo acceso¡± a las facturas y albaranes que analiz¨® Docampo, el primer t¨¦cnico de Hacienda que cifr¨® el fraude en seis millones, autor seg¨²n el abogado del denunciante del ¡°verdadero informe pericial en el que se fundament¨® la actuaci¨®n de la fiscal¨ªa hasta el cambio de su representante¡±.
La defensa de Seraf¨ªn Montenegro recuerda que en 2011 la fiscal¨ªa se preguntaba por qu¨¦ estaba imputado el denunciante, que fue apartado de la administraci¨®n de Gr¨²as Estaci¨®n en 2002 tras acudir a los tribunales, mientras que cuatro a?os despu¨¦s se le considera el principal acusado por su gesti¨®n en la empresa entre 1999 y 2001, un ¡°periodo de tiempo que nunca ha sido objeto de investigaci¨®n¡± en esta causa.
La fiscal¨ªa se decanta por el dictamen de este segundo perito que, sin hacer nuevas pesquisas, puso en duda el m¨¦todo utilizado por su compa?ero para calcular el fraude en unos seis millones y descart¨® la existencia de los nueve delitos fiscales y de falsedad. ¡°Nos parece que los c¨¢lculos realizados por el perito Gonz¨¢lez Seijo son m¨¢s atinados¡±, esgrime la fiscal¨ªa, quien al margen de estas estimaciones admite ¡°otro grave problema¡±. El ministerio p¨²blico considera prescritos estos delitos contra la Hacienda p¨²blica cometidos presuntamente entre 2003 y 2005 porque los cinco a?os de plazo desde que fija la ley para que se evaporen las responsabilidades penales comenzaron a contar a finales de 2012, cuando se efectu¨® la acusaci¨®n formal contra Montenegro y Mosquera. La fiscal justifica la tardanza en formular estos cargos porque ¡°se estuvo a la espera¡± de la pericial de Docampo, presentada en marzo de 2010.
Este primer perito concluy¨® que Gr¨²as Estaci¨®n hab¨ªa facturado compras ficticias de gas¨®leo, neum¨¢ticos y equipos a varias empresas para inflar sus gastos. Docampo hall¨®, entre otros indicios, ¡°incompatibilidades horarias¡± para realizar los suministros de combustible, ¡°falta de capacidad de los veh¨ªculos¡± y ¡°defectos formales¡± en los albaranes y notas de entrega. El ministerio p¨²blico descarta ahora tambi¨¦n la falsedad documental porque, argumenta, las declaraciones de los imputados y de los conductores de los camiones de las empresas implicadas ¡°vienen a corroborar que es posible que [los indicios hallados por el perito] se trate de meros errores materiales dado que las facturas se elaboraban posteriormente¡±.
La fiscal da adem¨¢s m¨¢s credibilidad a la revisi¨®n que realiz¨® Seijo, quien consider¨® que la ¡°diferencia de precio¡± o la ¡°falta de justificaci¨®n formal a trav¨¦s de albaranes¡± que detect¨® Docampo en trasacciones de neum¨¢ticos y alquiler de equipos no no son indicios suficientes para considerar falsas dichas operaciones. La fiscal¨ªa comparte esta valoraci¨®n y a?ade que las explicaciones dadas por las empresas implicadas ante la juez instructora sobre estas irregularidades fueron ¡°coherentes¡±. Y apunta tambi¨¦n a la prescripci¨®n del delito porque las facturas presuntamente falsas fueron confeccionadas en 2003 y 2004 y ¡°los supuestos responsables de estos hechos son llamados a declarar¡± como tales con posterioridad a que transcurra el plazo de prescripci¨®n de tres a?os que marca la legislaci¨®n.
El ministerio p¨²blico solo considera ¡°constatada¡± la existencia de una caja b en Gr¨²as Estaci¨®n de 1999 a 2002, la que aport¨® Seraf¨ªn Montenegro a la causa cuando present¨® la denuncia. Y por esta contabilidad paralela formular¨¢ acusaci¨®n contra los hasta ahora principales imputados (Santiago Montenegro y Carlos Mosquera) por administraci¨®n desleal y contra el propio denunciante, a quien atribuye este mismo delito y otro m¨¢s de apropiaci¨®n indebida. La fiscal¨ªa convierte as¨ª al socio de Gr¨²as Estaci¨®n que acudi¨® a la justicia en el principal acusado de la causa.
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