El impago de las ayudas enfrenta a entidades sociales y Generalitat

Albert Carbonell es el presidente de MIFAS, un grupo privado que ofrece servicios asistenciales a 170 personas con discapacidad f¨ªsica y acompa?amiento en la inserci¨®n laboral en Girona. En su caj¨®n reposan facturas de subvenciones por 642.000 euros que la Generalitat no le ha abonado entre 2011 y 2014. ¡°Solo en los intereses que tenemos que pagar a los bancos por las p¨®lizas y los avances para cuadrar cuentas nos gastamos 27.000 euros al a?o. Con eso pagar¨ªamos una plaza de cuidador¡±, explica Carbonell.

Se trata de una situaci¨®n a la que se ha tenido que acostumbrar el tercer sector. De hecho, el Comit¨¦ Catal¨¢n de Representantes de Personas con Discapacidad (Cocarmi) denunci¨® ayer que desde 2011 la Generalitat debe 82 millones de euros en subvenciones. La mitad, asegura la entidad, corresponden al Departamento a Bienestar Social. Otros 38,6 millones son adeudados por Empresa y Ocupaci¨®n. Ense?anza, Salud, Justicia y Presidencia tambi¨¦n tienen cuentas menores pendientes. El c¨¢lculo de Cocarmi se ha hecho con la informaci¨®n recolectada por las diez federaciones que forman el comit¨¦.

La Generalitat, sin embargo, tiene unas cuentas distintas. Desde Bienestar Social y Empresa y Ocupaci¨®n informan que la deuda acreditada es mucho menor. El primer departamento la cifra en 21 millones de euros; el segundo, 5,6 millones, el 31% de lo que denuncian las entidades.

Independientemente de la cifra, esta deuda hist¨®rica ¡°est¨¢ teniendo como consecuencia una reducci¨®n en el servicio, la p¨¦rdida de calidad y el aumento en las listas de espera. En definitiva, un creciente riesgo de exclusi¨®n social y laboral de las personas con discapacidad¡±, asegura Antonio Guill¨¦n, presidente de Cocarmi. ¡°Los avances conseguidos en las ¨²ltimas d¨¦cadas en el reconocimiento de los derechos de las personas con discapacidad, despu¨¦s de muchas luchas, se est¨¢n diluyendo¡±, se quej¨® Guill¨¦n.

De la deuda de MIFAS, 304.000 euros corresponden a Bienestar Social, el resto a Empresa y Ocupaci¨®n. El presidente de MIFAS pone ¨¦nfasis en que se adeudan transferencia incluso de programas que est¨¢n a punto de finalizar. Tal es el caso del Programa de Orientaci¨®n y Acompa?amiento a la Inserci¨®n de las personas con discapacidad y/o enfermedad mental (POIN). Esta iniciativa comenz¨® en julio del a?o pasado y termina el pr¨®ximo mes de junio. ¡°No hemos recibido nada por este concepto¡±, asegura Carbonell. Una portavoz de Empresa y Ocupaci¨®n inform¨® que a finales de este mes se dar¨¢n tres millones a las entidades participantes.

¡°Tenemos buena relaci¨®n con los servicios territoriales de los departamentos, hay di¨¢logo. Pero la respuesta siempre es la misma: no recibimos el dinero del Fondo de Liquidez Auton¨®mica. Entendemos las dificultades, pero lo ¨²nico que pedimos es fechas concretas de pago para poder organizarnos¡±, explica Carbonell.

En varias ocasiones, los trabajadores de la entidad de Girona han cobrado con 15 d¨ªas de retraso. ¡°A veces hay que hacer malabares contables para poder pagar. Tenemos la suerte de que tenemos un equipo comprensivo, pero donde tambi¨¦n hay dramas dom¨¦sticos¡±, se queja Carbonell. En temas como los dinamizadores ¡ªencargados de las actividades l¨²dicas¡ª ya se ha pasado la tijera.

Cocarmi pide ¡°v¨ªas de financiaci¨®n en condiciones favorables y que la Generalitat asuma el coste financiero derivado de los impagos¡±. Buscar financiaci¨®n bancaria es cada vez m¨¢s dif¨ªcil para las entidades. ¡°Los bancos no adelantan dinero para subvenciones de la Administraci¨®n, pues argumentan que no hay una fecha de pago clara. Los que s¨ª lo hacen, banca ¨¦tica, te cobran intereses del 5,5%¡±, dice Carbonell. Recurrir al Instituto Catal¨¢n de Finanzas (ICF) tampoco es opci¨®n. Esta entidad act¨²a como un banco y sabe que con el Gobierno catal¨¢n ¡°no hay una fecha cierta de pago¡±, explica un portavoz del instituto. El ICF s¨ª financia los conciertos.