Propuestas para el ¡®sprint¡¯ electoral
Quiz¨¢ la intr¨¦pida edil Mayr¨¦n Beneyto debiera aprovechar esta jubilaci¨®n anticipada para pasar por un parvulario
A menos de un mes para el comienzo de la campa?a electoral, que de hecho ya est¨¢ lanzada, a muchas gentes de la izquierda m¨¢s cl¨¢sica los dedos se les hacen hu¨¦spedes. Se diluyen algunas de las certezas triunfalistas que les alentaban hasta ahora y empiezan a considerar la capacidad de resistencia de la derecha gobernante, fr¨ªvola e imp¨²dica a la hora de echar mano de los recursos p¨²blicos, como el cheque energ¨¦tico y las falsas inauguraciones, para congraciarse con el electorado menos proclive. En este trance hay que celebrar como una afortunada decisi¨®n la clausura de RTVV que, en otro caso, nos estar¨ªa apaleando con una desaforada propaganda partidista. Solo hay que ver y o¨ªr en qu¨¦ postraci¨®n ha quedado TVE, cuyos noticiarios se han trufado de los gui?os, visajes y delirios del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y su comparsa.
En el caso valenciano ¨Cpues somos un caso por m¨¢s que les pese a los patriotas¨C el panorama se agrava porque esta sociedad est¨¢ lastrada por sus bajos ¨ªndices de civismo y cultura. Del primero ¨²nicamente hay que mencionar la degradaci¨®n democr¨¢tica en que nos han sumido los sucesivos gobiernos populares en el curso ser los ¨²ltimos 20 a?os. Contemplados desde este final de ciclo ¨Co eso queremos creer¨C deprime constatar la reata de memos, tarambanas y sinverg¨¹enzas que, luciendo los colores del PP, han prosperado a nuestra costa al tiempo que se pon¨ªan las leyes penales por montera. Y como no nos duelen prendas hemos de reconocerles la habilidad que han exhibido para neutralizar al poder judicial. Tambi¨¦n es verdad que la criada les puede salir respondona, aunque igual estamos confundiendo los deseos con la realidad.
Y en punto a cultura podr¨ªamos sintetizar el diagn¨®stico reproduciendo la carta de dimisi¨®n de la concejala de Cultura de Valencia y presidenta del Palau de la M¨²sica, do?a Mayr¨¦n Beneyto. Pero no reproducimos nada. Ya lo han hecho muchos medios informativos estatales, fascinados por la cantidad de faltas ortogr¨¢ficas y sint¨¢cticas que es posible cometer en la redacci¨®n de unas pocas l¨ªneas. Lo cierto es que por estos pagos solo ha podido sorprender a los menos le¨ªdos, pero del bochorno no nos hemos librado nadie. Quiz¨¢ la intr¨¦pida edil debiera aprovechar esta jubilaci¨®n anticipada para pasar por un parvulario. Por lo dem¨¢s, aunar el PP ind¨ªgena con la cultura es incurrir en un ox¨ªmoron, tanto como querer familiarizar el gato con el agua. Su paso por la consejer¨ªa del Ramo, otrora tan boyante, ha sido lo m¨¢s parecido a una gesti¨®n liquidadora.
As¨ª pues, para este tramo final de la campa?a, somos del parecer que de ser cierto como aseguran los entendidos que la regeneraci¨®n democr¨¢tica y la corrupci¨®n no movilizan al votante, se deber¨ªa poner el ¨¦nfasis en otros asuntos, como la financiaci¨®n de la autonom¨ªa, que es el maltrato a que nos somete el Gobierno central y del que depende la calidad de la sanidad y ense?anza p¨²blicas en este Pa¨ªs Valenciano. Ah¨ª los de Comprom¨ªs, la ¨²nica fuerza sin mando a distancia, tienen mucho que decir. La transparencia, la limitaci¨®n de mandatos para eximirnos del deprimente espect¨¢culo de los pol¨ªticos momificados pisando moqueta (y no aludimos solo a Rita Barber¨¢). Tambi¨¦n vendr¨ªan al canto unas palabras sobre la laicidad y los privilegios de la Iglesia ¨C?o eso ser¨ªa demasiado para esta izquierda?¨C, la rid¨ªcula Ley de Se?as de Identidad y las anacr¨®nicas Diputaciones provinciales, comederos de clientes y amigos, o algo peor, como empieza a emerger en la de valenciana del eminente Alfonso Rus.
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