Fotograf¨ªa y Arquitectura, maridaje feliz
La Biblioteca Nacional hace aflorar en Madrid sus fondos gr¨¢ficos, que expresan y acreditan la riqueza monumental en el siglo XIX
Arquitectura y Fotograf¨ªa consumaron un matrimonio perfecto en el siglo XIX, con Espa?a por monumental escenario y la Biblioteca Nacional como legataria de su copiosa herencia. As¨ª lo pone relieve la exposici¨®n Mirar la Arquitectura, que exhibe la Sala Recoletos de la Biblioteca Nacional hasta el 4 de octubre. Comisariada por Helena P¨¦rez Gallardo, historiadora de la Fotograf¨ªa, y Delf¨ªn Rodr¨ªguez, catedr¨¢tico e historiador del Arte, la exposici¨®n est¨¢ dividida en seis secciones. Muestra 175 originales, algunos expuestos por vez primera, entre fotograf¨ªas, planos, ¨¢lbumes, libros ilustrados y dibujos, as¨ª como estereoscopios y grafoscopios. Todos proceden de los ricos fondos del centro anfitri¨®n madrile?o y de instituciones como la Biblioteca Nacional de Francia, el Archivo de la Villa, el Museo del Prado y la Biblioteca Real de Madrid.
Seg¨²n Delf¨ªn Rodr¨ªguez, la exposici¨®n relata gr¨¢ficamente el tr¨¢nsito experimentado por la representaci¨®n arquitect¨®nica desde el dibujo, el grabado y la estampa hasta las litograf¨ªas, los daguerrotipos y la fotograf¨ªa, culmen de la plasmaci¨®n objetiva de aquel arte. En la segunda mitad de la centuria decimon¨®nica, explica Helena P¨¦rez Gallardo, la Arquitectura hall¨® en la Fotograf¨ªa una aliada inestimable por sus cualidades, utilizables desde criterios descriptivos, as¨ª como para la restauraci¨®n y la ordenaci¨®n de los ajuares monumentales de los que Espa?a se hallaba ricamente dotada, si bien en muchas ocasiones amenazaban ruina.
El esplendor divulgativo de las Bellas Artes que acompa?¨® en Europa al desarrollo del romanticismo, el historicismo y el positivismo del siglo XIX encontr¨® en Espa?a un vivero documental y monumental inagotable que atrajo a los fot¨®grafos pioneros hacia la Pen¨ªnsula y que, dado su inter¨¦s, contribuyeron en muchos casos a salvar tanta riqueza de la ruina. Aqu¨ª se les ofrec¨ªa desde la fascinaci¨®n por el arte nazar¨ª, de la Andaluc¨ªa musulmana, hasta la sobria magnificencia del arte ¨¢ulico del monasterio de San Lorenzo de El Escorial, cuyas primeras fotograf¨ªas realizar¨ªa el fot¨®grafo y esp¨ªa brit¨¢nico Charles Clifford (1819-1863). Su ?lbum monumental de Espa?a, de 1863, que la exposici¨®n muestra, es un testimonio de aquella profunda afecci¨®n, emulada por su disc¨ªpulo Jean Laurent, notario gr¨¢fico del Madrid de entonces y verdadero impulsor del comercio de la fotograf¨ªa de arte.
Precisamente, expresi¨®n del potente nexo entre fot¨®grafos y arquitectos fue la construcci¨®n en la madrile?a calle de Granada n¨²mero 7, del estudio fotogr¨¢fico de Laurent y Compagnie por parte del egregio arquitecto Ricardo Vel¨¢zquez Bosco - autor entre otras edificaciones, del palacio de Cristal del Parque del Retiro y del ministerio de Agricultura. El estudio madrile?o alberga hoy un colegio p¨²blico. As¨ª lo confirma Helena P¨¦rez Gallardo, que acaba de publicar su Fotograf¨ªa y Arquitectura del siglo XIX?(Ediciones C¨¢tedra), donde consta este nexo madrile?o dentro de un documentado relato sobre la representaci¨®n monumental a lo largo de la Historia.
La exposici¨®n permite ver los nexos de la aristocracia con los albores de la fotograf¨ªa ¨Cel duque de Montpensier fue quiz¨¢s el primer gran coleccionista fotogr¨¢fico de Espa?a-, r¨¢pidamente incorporada por las coronas europeas y empleada por los pol¨ªticos para propagar las virtudes de las grandes obras p¨²blicas, de las que tambi¨¦n la exposici¨®n da noticia al evocar la figura de Louis Reynaud.
Mirar la Arquitectura. De 10 de la ma?ana y ocho de la tarde los d¨ªas de diario, salvo los lunes. Festivos hasta las 14.00. Acceso gratuito. Biblioteca Nacional. Paseo de Recoletos, 20-22.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.