Hermosa deformidad

Impresionante y aleccionadora result¨® la pieza Fuck-in-progress, (follada en curso), el ¨²ltimo espect¨¢culo creado por el bailar¨ªn y core¨®grafo Jordi Cort¨¦s para su compa?¨ªa de danza integrada, Associaci¨®n Kiakahart, entre sus ocho int¨¦rpretes un bailar¨ªn sin piernas, Jaume Girbau, una bailarina con una pierna artificial, Miriam Aguilera y un bailar¨ªn invidente, Joan Casaoliva. Los tres logran que a trav¨¦s del erotismo, la sensualidad y el fetichismo sus cuerpos tomen una dimensi¨®n hermosa y expresiva. Cort¨¦s logra demostrar que las incapacidades f¨ªsicas no son un impedimento a la hora de bailar y mostrar sentimientos. La forma en que se relacionan con el resto de los int¨¦rpretes Mercedes Recacha, Annabel Castan, Rita Noutel, Ra¨¹l Perales, Gl¨°ria Jos¨¦ y el propio Jordi Cort¨¦s, es de una gran complicidad. Este espect¨¢culo puede verse hoy en la Sala Pina Bausch del Mercat de les Flors.

Fuck-in-progress es una obra de danza teatro que destila una intensidad que mantiene absorto al espectador, que no puede dejar de prestar atenci¨®n a lo que ocurre en el escenario. El humor, la crueldad y la sinceridad tornean el cuerpo de unos seres que expresan sus experiencias sensuales a trav¨¦s de la palabra. Un interesante collage musical, que abarca desde la m¨²sica cl¨¢sica a la de cabaret, pasando por la m¨²sica pop, ilustra este interesante montaje.

A lo largo de los 75 minutos que dura la obra abundan los fragmentos hipn¨®ticos, por ejemplo cuando la bailarina Miriam Aguilera se desprende de su pierna artificial e inicia un expresivo paso a dos con Jordi Cort¨¦s. Magn¨ªfica la agilidad y destreza que exhibe esta bailarina en su interpretaci¨®n. Tambi¨¦n resulta sorprende el dinamismo del cuerpo de Jaume Girbau, el hombre sin piernas. Lo interesante de Fuck-in-progress es que su director, Jordi Cort¨¦s, crea junto a sus bailarines un vocabulario gestual osado y sin limitaciones, y que lo pone al servicio de atrevidas ideas, logrando que el p¨²blico vea los trabajos de Assciaci¨® Kiakahart con normalidad y no como una experiencia curiosa.