¡°El beb¨¦ dej¨® de llorar y pens¨¢bamos que se nos mor¨ªa¡±

Un beb¨¦ de apenas dos semanas de vida ha sido abandonado este mi¨¦rcoles en un contenedor de basura en Mejorada del Campo, a 20 kil¨®metros de Madrid, de donde lo ha rescatado una pareja de guardias civiles que pensaron que se les mor¨ªa antes de lograr sacarlo.

El que ha dado la voz de alarma es Daniel, un vecino del pueblo que paseaba a su perro junto a un parque infantil en la avenida de los Toreros cuando ha escuchado al beb¨¦. El llanto sal¨ªa de un? contenedor, de los que est¨¢n bajo tierra, por lo que ha llamado a la Guardia Civil.

"Eran las 7,15 y hemos llegado enseguida porque est¨¢bamos a apenas 200 metros", cuenta Carlos Rodr¨ªguez, de 35 a?os. Cuando ha llegado junto con su compa?ero, Andr¨¦s Moyano, de 30, el reci¨¦n nacido segu¨ªa llorando. "En seguida hemos sabido que era un beb¨¦", prosigue el agente.

"No pod¨ªamos meternos en el contenedor porque ni mi compa?ero ni yo cab¨ªamos en el hueco y, aunque hubi¨¦ramos cabido, era mejor no hacerlo por si le aplast¨¢bamos", explica el guardia civil, que decidi¨® llamar a la Polic¨ªa Local para que a su vez localizar a las gr¨²as de la empresa de recogida de basuras y poder levantar el contenedor. Entretanto, "cada vez se escuchaba menos llanto y m¨¢s ag¨®nico, pens¨¢bamos que se nos mor¨ªa", afirma Andr¨¦s todav¨ªa angustiado.

Las gr¨²as tardaron unos cinco o diez minutos, tiempo en el que el ni?o ha dejado de llorar y los agentes se tem¨ªan lo peor. A su llegada, la gr¨²a ha levantado el contenedor y lo han abierto por una esquina. "Hemos sacado bolsa a bolsa y poco a poco, con rapidez pero con mucho cuidado, para evitar que el ni?o muriera aplastado por el peso de la basura", explica Carlos.

Un operario de la empresa de basuras ha encontrado al beb¨¦ en una bolsa "que pesaba mucho". Dentro hab¨ªa una mochila oscura, de la que al abrir la cremallera ha salido un bracito del beb¨¦."R¨¢pidamente me lo he puesto en el pecho y me he subido al coche patrulla, parec¨ªa que no respiraba, no reaccionaba ni respond¨ªa a los est¨ªmulos", explica el agente.

Su compa?ero Andr¨¦s se ha puesto al volante y han salido a toda velocidad hacia el Hospital del Henares. "Cuando llev¨¢bamos un kil¨®metro, el beb¨¦ ha roto a llorar y ya nos hemos tranquilizado, con lo tranquilizador que puede ser el llanto de un beb¨¦", ironiza Andr¨¦s. Ambos han respirado. Carlos sabe bien a qu¨¦ suena ese llanto, ya que es padre de dos hijos de 2 y 13 a?os.

El beb¨¦ ha ingresado en el servicio de urgencias y est¨¢ siendo examinado por los m¨¦dicos, aunque en principio est¨¢ bien. Se calcula que tiene dos semanas, es cauc¨¢sico y no se le ha apreciado ninguna lesi¨®n. Las enfermeras han comentado a los agentes que creen que llevaba poco en la mochila, ya que hab¨ªa hecho solo una deposici¨®n y estaba reci¨¦n alimentado.

La Fiscal¨ªa de Menores ha abierto una investigaci¨®n para encontrar a los padres. Para ello se est¨¢ buscando a las mujeres que hayan dado a luz en las ¨²ltimas fechas por la zona. Los progenitores se enfrentan a una acusaci¨®n por abandono de menores o, incluso, asesinato en grado tentativa.