Refugios para los artistas n¨®madas
Residencias como la Casa de Vel¨¢zquez acogen cada a?o a creadores extranjeros
Escondido en la Ciudad Universidad hay un edificio pensado para artistas. Al atravesar sus puertas resulta dif¨ªcil creer que la autov¨ªa est¨¦ justo al lado porque el ruido de los coches es sustituido por el sonido de la fuente del patio central donde las vistas dan al jard¨ªn y a la sierra de Guadarrama. Se trata de la Casa de Vel¨¢zquez, una de las instituciones y asociaciones que acogen artistas extranjeros en Madrid para que durante unos meses desarrollen un proyecto que se suele presentar al final de su estancia en una exposici¨®n colectiva.
"Este a?o hubo m¨¢s de 300 candidatos. Hay una fuerte demanda que responde a la necesidad de los artistas de tener este tipo de lugares para poder crear", se?ala Michel Bertrand, director de esta instituci¨®n francesa que abri¨® sus puertas a artistas e investigadores en 1928. La 86? promoci¨®n, que lleg¨® a la Casa a principios de septiembre, est¨¢ compuesta por 15 creadores (13 elegidos por la Academia de Bellas Artes de Par¨ªs, uno por el Ayuntamiento de Valencia y otro por la Diputaci¨®n de Zaragoza); la mitad de ellos son franceses, el resto, de otros pa¨ªses; trabajan disciplinas como la pintura, la escultura, la fotograf¨ªa, el cine o la composici¨®n musical y reciben entre 2.500 y 3.000 euros al mes. "Es una excelente beca. Son pocas las instituciones que pueden ofrecer condiciones de acogida como las nuestras", reconoce Bertrand.
Mar¨ªa do Mar Rego ha sido una de las elegidas. Esta fot¨®grafa franco portuguesa de 32 a?os confiesa que por fin tendr¨¢ tiempo de desarrollar un proyecto que lleva cinco a?os gestando. "Siempre he trabajado en cosas ajenas a la fotograf¨ªa para que mi amor por ella sea siempre libre", cuenta en un espa?ol con ligero acento portugu¨¦s sentada en el que ser¨¢ su estudio y su casa por un a?o. Es un d¨²plex situado en el jard¨ªn. Una de las paredes es una cristalera y por el suelo hay cajas con algunas de sus fotos en blanco y negro. Su proyecto, que como el de sus compa?eros tiene que estar relacionado con la cultura ib¨¦rica, trata sobre las similitudes y contrastes entre Espa?a y Portugal, "con cierto car¨¢cter autobiogr¨¢fico". Planea retratar la vida a lo largo de los principales r¨ªos que unen Espa?a y Portugal (Mi?o, Duero, Tajo y Guadiana), prestando especial atenci¨®n a las fronteras.
Tres becas para iberoamericanos
La Casa de Vel¨¢zquez no es la ¨²nica instituci¨®n de la capital que recibe a artistas. La Residencia de Estudiantes cuenta con tres becas para creadores iberoamericanos menores de 30 a?os con las que pueden vivir un a?o en el centro en r¨¦gimen de pensi¨®n completa. "Es un espacio de reflexi¨®n para trabajar pero tambi¨¦n un lugar de intercambio intelectual", explica por tel¨¦fono Alicia G¨®mez Navarro, directora de la residencia. El Matadero organiza desde 2011 El Ranchito, intercambios con artistas de otros pa¨ªses que pasan un mes aqu¨ª y a donde viajan durante otro mes creadores espa?oles. La pr¨®xima cita se celebrar¨¢ entre este mes de octubre y noviembre con Jap¨®n y Corea.
Pero, al margen de las instituciones, tambi¨¦n surgen iniciativas para acercar a los creadores de otros pa¨ªses a Madrid. Es el caso de Intercambiador, un estudio compartido por varios artistas en Carabanchel que desde 2011 realiza residencias e intercambios. Empezaron con un intercambio con una residencia de Holanda, luego acogiendo a una persona en casa de Marta Goro, una de las artistas del estudio y codirectora junto a Juan Garc¨ªa del proyecto, y ahora tienen un piso alquilado con cuatro habitaciones. "El 80% del dinero se nos va en pagar alquileres", comenta Garc¨ªa.
En este caso los cuatro artistas residentes tienen que pagar unos 360 euros por su estancia de dos meses. "Aunque muchos de ellos consiguen financiaci¨®n en sus lugares de origen", explica Goro y su compa?ero critica que de esta manera "solo pueden venir los artistas que se lo pueden permitir econ¨®micamente y lo que quieres para una residencia art¨ªstica de calidad es que venga un artista con un buen proyecto".
Durante el tiempo que dura la residencia los creadores viven juntos en el piso alquilado por Intercambiador, trabajan en el estudio junto al resto de autores madrile?os y al final presentan una exposici¨®n en el Espacio Trap¨¦zio, en Chueca (desde este viernes al 27 de octubre se puede visitar la muestra de los creadores residentes que han trabajado en Intercambiador los dos ¨²ltimos meses). Marta y Juan coinciden en que, a pesar de que cada vez dedican m¨¢s horas a su papel como gestores y menos a sus obras, la experiencia merece la pena. "Adem¨¢s, ellos entran en nuestra red. Les organizamos visitas a otros estudios, a galer¨ªas. Sitios que son dif¨ªciles de conocer para gente que viene de fuera", explica con orgullo Goro y a?ade que al d¨ªa siguiente, por ejemplo, visitar¨¢n la Casa de Vel¨¢zquez porque han sido invitados a la inauguraci¨®n de una nueva exposici¨®n.?
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