Varias confesiones dejan a la mitad las penas por un gran alijo de coca

Las penas de c¨¢rcel para cada uno de los 17 narcos condenados en Galicia por transportar en 2013 3.000 kilos de coca frente a las costas de ?frica se han quedado reducidas a la mitad. Tras un largo juicio en Vigo en el que algunos de los que se sentaron en el banquillo acabaron admitiendo su participaci¨®n en los hechos, la sentencia conocida este mi¨¦rcoles establece sin embargo unas indemnizaciones al Estado que llegan a triplicar el valor del alijo (300 millones de euros). El transporte de la droga, dirigido desde Galicia y realizado con el barco pirata Riptide, fue un desastre y uno de los narcos fue grabado por la polic¨ªa consultando a una vidente el futuro de la operaci¨®n.

Con la confesi¨®n de Marcos Vigo como m¨¢ximo responsable de la operaci¨®n, tras alcanzar un acuerdo con la Fiscal¨ªa, el juicio se acab¨® convirtiendo en una defensa de los 18 acusados frente a las declaraciones del arrepentido que delat¨® a sus hombres para reducir su condena a nueve a?os. El tribunal ha impuesto finalmente a los participantes en la operaci¨®n solo un a?o m¨¢s de condena que al que fuera su jefe. Es el caso de Antonio Carballa Magdalena y Jos¨¦ Luis Vi?as Morgade, que se declararon inocentes. Id¨¦ntica pena impuso la Sala a los tres tripulantes del velero Pixapo, que intent¨® sin ¨¦xito alijar el cargamento en alta mar, Juan Domingo Covelo, Iv¨¢n M¨¦ndez y Rafael Couto. Otros como Jos¨¦ Manuel Rodr¨ªguez Camesella o Jes¨²s Iglesias Cumplido tambi¨¦n vieron reducida la pena aunque con dos a?os m¨¢s que los anteriores porque portaban sendas armas el d¨ªa de su detenci¨®n.

Al grupo que se encarg¨® de buscar desesperadamente un barco de repuesto cuando el Pixapo se averi¨® tambi¨¦n fueron condenados a 10 a?os, aunque el tribunal decidi¨® absolver a Francisco Javier Su¨¢rez porque considera que no se pudo acreditar que en realidad supiera que la embarcaci¨®n iba a participar en una operaci¨®n de narcotr¨¢fico.

Por recoger en el aeropuerto de Santiago y alquilarle un piso en la ciudad al intermediario del cartel sudamericano que env¨ªo el alijo a Espa?a -siempre por indicaci¨®n de Marcos Vigo-, Rogelio Collado Cesp¨®n fue condenado a tres a?os y medio de c¨¢rcel. Jos¨¦ Gregorio Hern¨¢ndez Rodr¨ªguez, con pasaporte venezolano, supervis¨® el transporte desde que la droga embarc¨® en el Delta del Orinoco. Fue detenido en Vigo cuando trataba de comprar un billete de avi¨®n para escapar de la redada policial. Le han ca¨ªdo nueve a?os.

El fallo impone a la tripulaci¨®n coreana e indonesia del barco pirata Riptide penas de nuevey 10 a?os de prisi¨®n. ¡°Se toma como consideraci¨®n primordial que para haber podido transportar esa enorme cantidad de droga, tanto el capit¨¢n como los miembros de la tripulaci¨®n tuvieron que conocer necesariamente que los fardos que transbordaron no conten¨ªan una sustancia legal, pues no es l¨®gico que un barco pesquero lleve consigo material distinto de las artes de pesca, carnaza, hielo y otros elementos auxiliares, ni que se desplace tan lejos de su zona habitual de pesca, pr¨®xima a las costas venezolanas¡±, concluye el tribunal.

La sentencia de 70 folios es un relato del flagrante fracaso de la operaci¨®n dirigida desde Galicia por Marcos Vigo, con amplios antecedentes policiales y un pasado vinculado a Los Charlines. ¡°Manten¨ªa una posici¨®n dominante en la pr¨¢ctica, en tanto que es quien se encargaba de los contactos con los sudamericanos, quien contact¨® con la organizaci¨®n de Rodr¨ªguez Camesella y dirig¨ªa y ten¨ªa la ¨²ltima decisi¨®n sobre si la operaci¨®n de transporte continuaba o de ponerle fin¡±, dice el fallo sobre el arrepentido.

El tribunal no pas¨® por alto los fallos de organizaci¨®n del grupo cuando el velero se aver¨ªa y el nodriza comienza a dar giros sobre si mismo esperando instrucciones que no llegan por lo que decide regresar a Venezuela. ¡°En el transcurso de la operaci¨®n de recogida de la droga en altamar se hab¨ªan producido problemas, como se evidencia en la conversaci¨®n llevada a cabo entre Camesella y Cumplido, en la que ¨¦ste pone de manifiesto que ¡°¡­ nos van a estar tocando las pelotas¡±, y hablan de una mala organizaci¨®n, que han mandado otro [barco], que tardar¨¢ unos cuatro d¨ªas¡± en alcanzar al Riptide.