Los h¨¦roes del Alvia logran su parque dos a?os y medio despu¨¦s
Pese a las promesas, el barrio de Santiago en el que descarril¨® el tren a¨²n carece de transporte p¨²blico y hay zonas sin saneamiento
Cuando el 24 de julio de 2013 un vag¨®n de varias toneladas destroz¨® el modesto palco de ladrillos que los vecinos del barrio compostelano de Angrois utilizaban para sus fiestas, los pol¨ªticos se apresuraron a prometerles que les construir¨ªan un parque en otro lugar. Hab¨ªan pasado de ser ciudadanos de segunda de la periferia urbana a convertirse en h¨¦roes por lo que, seg¨²n ellos matizaban, har¨ªa cualquier persona: ayudar a los viajeros del tren Alvia que acababa de descarrilar a las puertas de sus casas dejando 80 muertos y 144 heridos. Dos a?os y medio han tenido que esperar para comenzar a disfrutar a¨²n ahora de su nuevo espacio p¨²blico.
Isidoro Casta?o y Mart¨ªn Rozas, secretario y vicepresidente de la asociaci¨®n de vecinos de Angrois, han recorrido media Espa?a asistiendo a homenajes por lo que hicieron. Sobre la pista deportiva en la que ahora juegan los rapaces del barrio, ambos agradecen que, con el tiempo, los homenajes hayan ido a menos, pero lamentan que tambi¨¦n hayan desaparecido muchas de las promesas que les hicieron los pol¨ªticos.
Apenas dos meses despu¨¦s del accidente, Adif, la empresa p¨²blica gestora de las v¨ªas f¨¦rreas, ced¨ªa unos 3.000 metros cuadrados que no usaba al otro lado de la curva en que descarril¨® el tren, en su parte interior. Ah¨ª comenzaron los retrasos. Hubo que preguntar a los anteriores 11 propietarios expropiados para construir el AVE si permit¨ªan que esos terrenos se dedicasen a un parque o los quer¨ªan recuperar. El Ayuntamiento de Santiago tardar¨ªa un a?o en licitar los trabajos, que no adjudic¨® hasta diciembre de 2014, demora que no se aprovech¨® para realizar las catas arqueol¨®gicas obligatorias en un lugar por el que pasa el Camino de Santiago que llega desde Ourense. Aparecieron restos de un castro, que hubo que analizar, as¨ª que los trabajos no comenzaron hasta el pasado septiembre, m¨¢s de dos a?os despu¨¦s del accidente. Unas obras de relativa sencillez, de poco m¨¢s de 150.000 euros, que no iban a durar m¨¢s de tres meses, que ya llevan cuatro y que se abrir¨¢n para su uso sin estar terminadas del todo.
El parque de Angrois consiste en una peque?a pista deportiva, una zona de juegos infantiles y un espacio de descanso para peregrinos. En este ¨²ltimo se iban a ubicar bancos, mesas y una fuente cedidos por una escuela de canteros, pero el retraso de las obras del entorno hizo que el convenio caducase y ahora lo que se demora es el mobiliario de piedra. Tambi¨¦n est¨¢ pendiente la construcci¨®n de una peque?a caseta que har¨¢ de sede de la asociaci¨®n.
¡°Nuestras reclamaciones eran otras, antes del accidente lo ¨²nico que quer¨ªamos del parque eran los columpios, el resto nos lo han dado sin pedirlo¡±, matiza Isidoro, quien recuerda que en Angrois hab¨ªa un parque infantil que desapareci¨® por culpa del tren. Estaba junto a las entonces v¨ªas convencionales, no valladas. Hace 14 a?os una ni?a que jugaba cerca muri¨® arrollada y se elimin¨® aquel lugar de ocio por seguridad.
El espacio de uso p¨²blico se redujo a¨²n m¨¢s cuando se ampliaron y vallaron las v¨ªas para el AVE Ourense-Santiago. Porque por Angrois pasa el AVE, sin parar, pero no el autob¨²s urbano, la principal y m¨¢s antigua de sus reclamaciones para que los vecinos no tengan que caminar un kil¨®metro hasta la parada m¨¢s pr¨®xima, mejora que el Ayuntamiento remite al estudio que har¨¢ para renovar en unos meses la concesi¨®n del transporte urbano.Tambi¨¦n hay viviendas que a¨²n carecen de saneamiento y caminos sin ninguna iluminaci¨®n. ¡°El Ayuntamiento aqu¨ª no ha invertido un duro, ni antes ni despu¨¦s del accidente, ni este ni los gobiernos anteriores¡±, coinciden Isidoro y Mart¨ªn. Las obras que s¨ª sufren, como hicieron en su momento con las del AVE, son las de ampliaci¨®n de la vecina autopista AP-9. Hasta que no est¨¦n terminadas seguir¨¢n sin pantallas que protejan sus viviendas del ruido del tr¨¢fico, pero mientras los camiones y excavadoras ya llenan de baches y tierra sus caminos.
En su espera por el parque y por el bus que no llega, los vecinos se solidarizan con la espera de las v¨ªctimas del accidente por la justicia. Dos a?os y medio despu¨¦s el segundo instructor del caso ha propuesto juzgar al maquinista del tren como ¨²nico responsable del accidente por despistarse y no frenar a tiempo antes de la curva de Angrois. Las v¨ªctimas han recurrido porque consideran que Adif y Renfe tambi¨¦n deben ser responsables por reducir la seguridad tanto en las v¨ªas como en el tren.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.