La exdiputada de ICV acusada de prevaricaci¨®n se escuda en el S¨ªndic

La secretaria de organizaci¨®n de Inicitiva per Catalunya-Els Verds, N¨²ria Buenaventura, se enfrenta a ocho a?os y medio de inhabilitaci¨®n por un delito de prevaricaci¨®n. Buenaventura era directora general del Departamento de Medio Ambiente cuando en 2009 concedi¨® 3.374 autorizaciones para la captura de cuatro especies de ave protegidas mediante el m¨¦todo de liga (que consiste en poner pegamento en los ¨¢rboles y atraer a los p¨¢jaros). Esta modalidad de caza la prohibi¨® ella misma seis meses antes, en consonancia con las legislaciones europea y espa?ola. En la vista oral celebrada este mi¨¦rcoles, Buenaventura ha argumentado que autoriz¨® estas capturas siguiendo las recomendaciones del S¨ªndico de Greuges, el expresidente de ICV Rafael Rib¨®.

Buenaventura ha declarado ante el juez que, en 2008, prohibi¨® "por primera vez en Catalu?a" el m¨¦todo de la liga. La Federaci¨®n Catalana de Caza present¨® una queja ante la Sindicatura de Greuges y el s¨ªndic recomend¨® al departamento que elaborase un estudio para determinar si, como contempla la ley europea, se trata de "un m¨¦todo masivo" y no selectivo. Buenaventura se ha escudado en que, para recoger los datos, necesitaba autorizar la caza durante un tiempo. En 2010, y tras constatar que efectivamente la liga era un m¨¦todo de caza perjudicial para las aves, el departamento restaur¨® la prohibici¨®n.

Seg¨²n Buenaventura, la autorizaci¨®n se hizo "con pleno derecho". Las normativas europeas y espa?olas proh¨ªben la caza con liga, ha recordado, "con la excepci¨®n de que sirva a fines educativos o de investigaci¨®n". El "experimento", como lo llam¨® la exdiputada, dur¨® 38 d¨ªas, durante los cuales se pod¨ªa capturar a machos de cuatro especies de p¨¢jaros fring¨ªlidos (jilguero, verder¨®n, pinz¨®n y pardillo). Seg¨²n los peritos, se cazaron 65.576 aves, entre las que hab¨ªa hembras y p¨¢jaros de otras especies. El fiscal, Miguel ?ngel P¨¦rez de Gregorio, cree que esas cifras "demuestran que la caza con liga no es selectiva".

El fiscal se ha apoyado en las declaraciones de los testigos; entre ellos, un agente del Seprona de la Guardia Civil. P¨¦rez de Gregorio ha argumentado que el experimento no era objetivo ni cient¨ªfico, ya que quienes recog¨ªan los datos eran los mismos que disfrutaban de las autorizaciones: los cazadores. "Para estos cazadores", ha afirmado, "el experimento no respond¨ªa a objetivos educativos, sino que los capturaban para exhibirlos en concursos de cante o para autoconsumo".

Los peritos han ratificado esa tesis: el estudio debi¨® haberse encargado a un organismo independiente, y no a los cazadores. Adem¨¢s de no reunir suficientes garant¨ªas cient¨ªficas, el estudio era "innecesario", han subrayado, porque la legislaci¨®n europea ya se?ala con claridad que la liga no es un m¨¦todo de caza selectivo.

La abogada de Buenaventura, Merc¨¨ Claramunt, ha asegurado que el experimento estuvo controlado en todo momento por los Agentes Rurales, que ped¨ªan la autorizaci¨®n a los capturadores y les preguntaban qu¨¦ hab¨ªan cazado. La entonces subdirectora general de los Agentes Rurales, Rosa Maria Torre, tambi¨¦n ha declarado como testigo y ha reconocido que los agentes no pod¨ªan conocer con exactitud qu¨¦ animales se estaban cazando. "Si los escond¨ªan bajo una piedra, evidentemente no pod¨ªa haber un control completo", ha concedido, ir¨®nico, el juez, que deja el caso visto para sentencia.