No es f¨¢cil bailar el ¡®dembow¡¯
Un festival lleva a Villaverde Bajo un ritmo entre el rap y el hip hop originario de Santo Domingo
Se hace llamar Braly El Negro y todos los bailarines de dembow en Madrid parecen conocerlo. Es dominicano, tiene 19 a?os y su grupo cuenta con 25 bailarines. ¡°Antes nos hac¨ªamos llamar Criminal Crew [tripulaci¨®n criminal]¡±, dice Braly, ¡°pero ahora nos hemos cambiado a Crowd Dancers (bailarines en p¨²blico)¡±. No son los ¨²nicos. El dembow es un g¨¦nero musical que tiene sus or¨ªgenes en los a?os ochenta y tuvo su despunte en la Rep¨²blica Dominicana a mediados de los noventa y principios de la d¨¦cada de los 2000.
Emparentada con el reguet¨®n, que tuvo su apogeo en Puerto Rico, el dembow incluye sonidos electr¨®nicos y sus ra¨ªces estar¨ªan en el rap, el hip hop y el dancehall jamaicano. En sus bailes, los pasos no solo se centran en el meneo de caderas, sino tambi¨¦n en el movimiento de los pies, el cuello y los hombros. En algunos casos recuerda al break dance. Los sonidos pueden ser algo chirriantes y repetitivos, de menos fluidez que otros ritmos caribe?os, pero eso obliga a que los pasos sean m¨¢s atrevidos, avezados y epil¨¦pticos.
Gina naci¨® en Madrid y uno de sus padres es de origen dominicano. ¡°Estuve tres a?os en Santo Domingo cuando ten¨ªa uno y bailo desde que camino¡±, dice esta chica de 17 a?os en uno de los ensayos que tiene con su grupo a la salida de la parada de cercan¨ªas de Nuevos Ministerios un viernes por la tarde.
La mayor¨ªa de los aficionados a este baile son adolescentes y sus puntos de encuentro suelen ser el Centro Comercial de Nuevos Ministerios, la plaza de ?pera o barrios del sur de la capital como San Crist¨®bal, en Villaverde, o Aluche. En las discotecas matinales, entre uno y otro grupo se retan a duelos de baile, ¡°piques¡±, donde los contoneos van y vienen.
Como el reguet¨®n en su momento, el dembow no estuvo libre de ciertas cr¨ªticas por parte de los sectores m¨¢s conservadores en la Rep¨²blica Dominicana. Es un baile que procede de los barrios marginales. Sus letras, a veces demasiado expl¨ªcitas, o sus coreograf¨ªas desenfadadas provocaron rechazo entre las clases m¨¢s acomodadas y pudientes del pa¨ªs.
Dog Nigga es uno de los grupos m¨¢s experimentados de dembow en Madrid. Ellos estar¨¢n, junto con los Crowd Dancers, el 24 de septiembre en el primer festival callejero Pic¨® en el barrio, organizado por el colectivo Chico Tr¨®pico. El festival se hace en colaboraci¨®n con la Junta Municipal de Villaverde Bajo, incluido en el programa Madrid Activa. ¡°Es curioso ver la forma en la que algunos adolescentes de los barrios del sur se autoproducen, hacen v¨ªdeos y coreograf¨ªas para promocionarse en Internet¡±, dice Sara Brito, de Chico Tr¨®pico.
El t¨¦rmino Pic¨® viene de pick up, un tocadiscos port¨¢til que se utilizaba en las fiestas de las Antillas colombianas para amplificar todos los ritmos procedentes del ?frica durante los a?os ochenta. ¡°El nuestro es el primer altavoz pintado a mano hecho en Espa?a¡±, dice Brito. Adem¨¢s de los bailes habr¨¢ ¡°talleres de sonidos para aprender a hacer m¨²sica con todas las herramientas que est¨¢n al alcance de la mano, desde objetos tecnol¨®gicos como tel¨¦fonos m¨®viles, hasta frascos, cucharas, o botellas¡±. Tambi¨¦n estar¨¢ Ms Nina, una de las voces m¨¢s interesantes del nuevo reguet¨®n hecho por mujeres.
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