Obras que rehabilitan vidas

Uno de los atractivos del programa de vivienda social de la Fundaci¨®n H¨¢bitat3, impulsado por la Mesa del Tercer Sector, es el compromiso de cuidar los inmuebles que terceros hayan cedido. Para que, por ejemplo, una familia desahuciada pueda entrar en un piso es necesaria desde una mano de pintura hasta mejoras en aspectos como la eficiencia energ¨¦tica. Unos trabajos que, a su vez, tambi¨¦n rehabilitan vidas: detr¨¢s de brochas, planchas y martillos hay parados de larga duraci¨®n que vuelven al mundo laboral.

Es el caso de Francisco, Juan y Vicente. Los tres trabajan para Aprise, una de las seis empresas de inserci¨®n laboral con las que H¨¢bitat3 tiene contratado el servicio de mejora y rehabilitaci¨®n de las fincas. Como a tantos otros trabajadores de la construcci¨®n, la explosi¨®n de la burbuja inmobiliaria se llev¨® por delante sus vidas. Ahora aplican su experiencia para que uno de los pisos que ha recibido la fundaci¨®n, en Santa Coloma de Gramenet, pueda ser puesto a disposici¨®n de las entidades sociales.

¡°Es un c¨ªrculo virtuoso¡±, resume Carme Trilla, presidenta de la Fundaci¨®n. H¨¢bitat3 tiene 302 pisos en Catalu?a, que han venido desde diferentes v¨ªas. El 80% de ellos proceden de particulares pero tambi¨¦n hay cesiones de la Generalitat. Los esfuerzos de la entidad, sin embargo, se han orientado a que propietarios que tienen un piso vac¨ªo lo cedan para un uso social, renunciando a los muy suculentos m¨¢rgenes del mercado inmobiliario en la capital catalana. Y ayudando a generar un parque de vivienda de alquiler social catal¨¢n donde, seg¨²n la Mesa, 230.000 familias son susceptibles de una vivienda de este tipo.

¡°En el caso de la cesi¨®n se responde ante los propietarios de los pagos mensuales, tambi¨¦n del buen uso de las viviendas, y de su retorno en perfecto estado cuando finalice el periodo de alquiler¡±, recuerda Trilla. Los t¨¦cnicos de la fundaci¨®n acuerdan el plan de obras necesario para rehabilitar el piso y los trabajos se van entregando de manera rotativa a las empresas de inserci¨®n, sin competencia de precio. Adem¨¢s de Aprise est¨¢n Formaci¨® i Treball, Trinijove, SAO, Apip y Engrunes. Todas tienen en com¨²n que emplean perfiles de dif¨ªcil ingreso al mundo laboral.

Casi en un 50% de las viviendas que ha recibido la fundaci¨®n en sus dos a?os de existencia han necesitado obras. ¡°No se trata de trabajos de lujo, sino que permitan que se pueda vivir confortablemente¡±, a?ade Trilla. El monte medio de las obras ronda los 3.000 euros. Los pisos pueden ser utilizados para los programas de atenci¨®n residencial a personas con riesgo de exclusi¨®n social. Los servicios sociales determinan el precio del alquiler que pueden pagar y la diferencia con el real la asumen las propias entidades o la Administraci¨®n.