En Com¨² Podem aplaza su decisi¨®n sobre el refer¨¦ndum unilateral

Miembros de la confluencia de izquierdas, en sus dos versiones ¡ªEn Com¨² Podem en el Congreso de los Diputados y Catalunya S¨ª que es Pot en el Parlamento aut¨®nomo¡ª temen que un refer¨¦ndum unilateral acabe siendo otro 9-N, el ¡°proceso participativo¡± ideado por Artur Mas en 2014, que no tuvo reconocimiento internacional y que se celebr¨® a pesar de la prohibici¨®n del Tribunal Constitucional.

El gran interrogante es qu¨¦ har¨¢ la confluencia si Puigdemont, un independentista de toda la vida ¡ªMas no lo era¡ª, vuelve a poner las urnas. De momento, el president ya ha enviado la pelota al tejado de la izquierda afirmando que el reconocimiento del refer¨¦ndum lo dar¨¢ una alta participaci¨®n. Por su parte, el l¨ªder de ERC, Oriol Junqueras, les ha instado a superar el ¡°inmovilismo¡±.

Pese a ser partidario de la consulta pactada, Xavier Dom¨¨nech, cabeza de lista de En Com¨² Podem, se abre a escuchar la f¨®rmula unilateral. No despejar¨¢ la inc¨®gnita hasta conocer c¨®mo ser¨¢ la votaci¨®n. ¡°Me piden que me tire a una piscina. Y no es un problema: me he tirado a muchas. Quiero saber si tendr¨¢ agua. Tienen que explicar si ser¨¢ decisivo o no. Si se hace otro 9-N no se har¨¢ ning¨²n favor a este pa¨ªs¡±, afirma.

El plan secesionista no ofrece dudas: anuncia un refer¨¦ndum con una fecha l¨ªmite (antes de finales de septiembre de 2017), con efectos jur¨ªdicos y pregunta binaria ¡ªPuigdemont se ofrece a consensuarla con el Gobierno¡ª; y considera que bastar¨ªa el 50% m¨¢s uno de los votos para ganarlo. Junts pel S¨ª y la CUP rebaten que sea otro 9-N porque dicen que esta votaci¨®n ser¨ªa vinculante y la de Mas no lo fue, y porque en 2014 gobernaba CiU y ahora hay una mayor¨ªa secesionista que debe cumplir, sostienen, el ¡°mandato¡± del 27-S (las elecciones auton¨®micas que arrojaron como resultado un Parlamento con mayor¨ªa de diputados independentistas, aunque el porcentaje en votos del secesionismo fue del 47,8%).

La duda es hasta d¨®nde est¨¢ dispuesta a llegar la confluencia de izquierdas, porque hace un a?o vot¨® en el Parlament en contra de la declaraci¨®n independentista del 9 de noviembre y hace dos semanas, cuando Junts pel S¨ª y la CUP plantearon su resoluci¨®n para un refer¨¦ndum unilateral de independencia, se abstuvo.

Catalunya S¨ª que es Pot plante¨® adem¨¢s su propia propuesta de consulta, omitiendo la condici¨®n de que fuese pactada. Pero su plan pone tantas precauciones que parece dif¨ªcil que prospere sin ese acuerdo: que tenga reconocimiento internacional ¡°previo¡±, que estimule la participaci¨®n, que tenga efectos pol¨ªticos y jur¨ªdicos reales y que el Parlament adopte iniciativas ¡°ante el Estado¡± para lograrlo. Los independentistas replican que en 2014 ya pidieron la consulta, sin ¨¦xito.

Joan Coscubiela (ICV), portavoz de S¨ª que es Pot, no aclara si apoyar¨¢n un refer¨¦ndum unilateral y alega que no caer¨¢n en ¡°debates simplistas¡±. ¡°Hemos huido de los adjetivos. No nos hemos movido: lo importante es que Junts pel S¨ª ha vuelto a reclamar el refer¨¦ndum cuando dec¨ªan que era una pantalla pasada¡±, se?ala. ICV se resisti¨® hace dos semanas a excluir de la propuesta de consulta la condici¨®n de que fuera pactada, y eso gener¨® pol¨¦mica en S¨ª que es Pot. En ese grupo parlamentario no est¨¢n los comunes de Ada Colau, aunque ejercen en ¨¦l una indiscutible influencia.

Junts pel S¨ª y la CUP creen que la clave no es qu¨¦ votar¨ªan en un hipot¨¦tico refer¨¦ndum los comunes ¡ªson mayoritariamente federalistas pero tambi¨¦n hay secesionistas¡ª, porque seguramente apelar¨ªan a la libertad de voto. La clave, dicen, es si reconocen o no que Catalu?a es soberana. Los secesionistas les necesitan para apuntalar el refer¨¦ndum, y son optimistas: recuerdan que en la consulta del 9-N acabaron votando Joan Herrera, Dom¨¨nech o Colau.