¡°Nos falta un S¨®crates para blindar la democracia de la demagogia¡±
Marcos Chicot, finalista del 65? premio Planeta con el thriller 'El asesinato de S¨®crates', cree que en Espa?a se ense?a mal la Filosof¨ªa
¡°Ojal¨¢ hubiera hoy en Espa?a un Pit¨¢goras o un S¨®crates, que ayudar¨¢n a crear los mecanismos de contenci¨®n para blindar la democracia de la demagogia y a los pol¨ªticos con ideas impermeables y mecanismos para no caer en las barbaridades que vemos; los necesitamos y, en cambio, no existen¡±, apunta serio Marcos Chicot, flamante finalista del 65? premio Planeta con El asesinato de S¨®crates (150.250 euros), mezcolanza de thriller y novela hist¨®rica sobre una profec¨ªa del or¨¢culo de Delfos que predice el asesinato del gran fil¨®sofo pol¨ªtico.
Ha ido Chicot (Madrid, 1971) a tiro fijo, a rebufo de su exitoso El asesinato de Pit¨¢goras. Imposible criticarlo: durante 11 meses fue el e-book en castellano m¨¢s vendido en Amazon en 2013, donde se autoedit¨® tras quedar cuarto en el Planeta de hace otras tantas ediciones. A¨²n hoy se mantiene entre los 20 m¨¢s solicitados. Psic¨®logo de formaci¨®n y economista, hizo, admite ahora, ¡°una locura¡±: dej¨® sus carteras de clientes y la ejecuci¨®n de malabarismos financieros para madurar una ¡°novela redonda, con un thriller trepidante combinado con ense?anzas del mundo cl¨¢sico, una novela amena pero que entretenga¡± que ya le rondaba por la cabeza pero que al nacer su hija, con s¨ªndrome de Down, decidi¨® tirar adelante: dejarle novelas que se vendieran tanto que garantizasen a su Luc¨ªa, hoy de siete a?os, el futuro incluso cuando ¨¦l no estuviera. ¡°Pas¨¦ hasta el dinero que ten¨ªa a plazo fijo porque no quer¨ªa arriesgar: cada euro lleva el nombre de mi hija¡±, resume. ?Es m¨¢s seguro vivir de los libros y a¨²n menos si no se crea un long best seller? ¡°Fue una locura, s¨ª: las posibilidades de ¨¦xito eran m¨ªnimas¡±.
Pero no sucedi¨® as¨ª, como espera que tampoco ocurra en esta entrega, ambientada de nuevo en un mundo que naci¨® en su cabeza cuando era estudiante, tambi¨¦n, de Filosof¨ªa: ¡°Ten¨ªa una asignatura que se llamaba Nacimiento de la Filosof¨ªa, y qued¨¦ fascinado porque me dije: ¡®Aqu¨ª nace el hombre como tal¡¯¡±. En ese contexto, S¨®crates es ¡°el padre de la filosof¨ªa moral¡± y, por ello, deber¨ªa ser uno de los mejores gu¨ªas para la clase pol¨ªtica actual. ¡°Todo pol¨ªtico tiene poder y el poder implica capacidad y la capacidad otorga responsabilidades¡±, afirma Chicot usando una frase que encabeza una novela con la que pretende ¡°mostrar la pol¨ªtica de entonces y establecer paralelismos con el sistema actual¡±.
Admite el escritor que, como su admirado S¨®crates, ¨¦l tiene tambi¨¦n un punto de mirada aristocr¨¢tica sobre las cosas de la res publica: ¡°Escogemos al mejor m¨¦dico posible para que nos atienda, pero en cambio, salvando distancias, hacemos como entonces: los elegimos por sorteo o por aclamaci¨®n popular; ?qui¨¦n llega hoy a presidente de gobierno? Casi nunca el mejor sino el m¨¢s capacitado para la lucha por ser presidente, el que sabe medrar mejor en un mar a rebosar de tiburones, o sea, que compramos a la gente con mayores capacidades para medrar, caracter¨ªsticas que suelen ser antag¨®nicas de los atributos que ha de tener todo mod¨¦lico jefe de gobierno¡±¡
Si bien Chicot ya llevaba cierto bagaje en el arte de construir un artefacto literario (su primera novela, Oscar, es de 1997 y un a?o despu¨¦s obten¨ªa el premio Francisco Umbral por Diario de Gordon) es sorprendente que sus cr¨ªmenes filos¨®ficos tengan y puedan tener tal eco en ventas, en una sociedad que est¨¢ maltratando y dejando en el desv¨¢n de la cultura al mundo cl¨¢sico y las letras. ¡°El problema es que la Filosof¨ªa se est¨¢ ense?ando muy mal, siempre a partir de procesos mnemot¨¦cnicos y sin vincularla a la realidad; con mis asesinatos, t¨ªtulos metaf¨®ricos, intento precisamente resucitarlos, que sirvan de divertimento pero tambi¨¦n para acceder de otra manera a la Filosof¨ªa¡±. Lleva camino de ello.
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