Trampantojo navide?o
La Fundaci¨®n Mir¨® instala un ¨¢rbol de luces sin luces del artista Luis Bisbe
Hay tradiciones que se repiten cada Navidad: la comida, los regalos, la familia y la Nadala de la Fundaci¨®n Mir¨®, que desde 2007 presenta su particular visi¨®n de esta fiesta a trav¨¦s de la instalaci¨®n de un artista que reinterpreta alguno de los temas propios de esta ¨¦poca. Tras los trabajos de Perejaume, Ignasi Aball¨ª, Antoni Llena, Eul¨¤lia Valldosera o Regina Gim¨¦nez, entre otros, ha aceptado el reto de inundar de esp¨ªritu navide?o la fundaci¨®n barcelonesa Luis Bisbe (M¨¢laga, 1965), artista que trabaja con objetos cotidianos poniendo el ¨¦nfasis y remarcando mensajes contradictorios, disfunciones o iron¨ªas involuntarias. Y lo ha conseguido de una forma sutil, m¨¢gica y ficticia con purailusiondura, una instalaci¨®n (hasta el pr¨®ximo 8 de enero) en la que ha jugado con un abeto y unas luces, dos de los elementos m¨¢s tradicionales de estas fiestas, presentes en la mayor¨ªa de los hogares, que el visitante ve como un t¨ªpico ¨¢rbol de Navidad, pese a que las luces y el ¨¢rbol est¨¢n a m¨¢s de diez metros de distancia.
¡°Normalmente, en Navidad hay una especie de migraci¨®n inversa en la que los ¨¢rboles se meten en las casas y las luces se sacan hacia afuera, en la que se iluminan ¨¢rboles con luces artificiales como manifestaci¨®n de la ilusi¨®n ancestral del dominio de la naturaleza¡±, explica Bisbe junto al ¨¢rbol, un tejo de casi dos metros de altura que ha plantado en uno de los patios de la fundaci¨®n, junto a un centenario olivo. En el interior, en una de las galer¨ªas por donde el visitante recorre la colecci¨®n permanente, ha instalado algo m¨¢s de una docena de luces blancas colocadas de forma aparentemente an¨¢rquica. ¡°Hay gente que se confunde y las mira con cierta admiraci¨®n porque piensan que es una obra de Mir¨®¡±, explica con una sonrisa. Entre las luces y el ¨¢rbol, situados frente a frente, un cristal que obra el milagro: las luces del interior se reflejan en el cristal y parece que est¨¦n colocadas sobre las ramas del ¨¢rbol; unos pocos elementos con los que Bisbe pretende poner de relieve la dimensi¨®n ilusionista de la Navidad, sus creencias y apariencias.
¡°He querido remarcar la separaci¨®n entre el interior y el exterior, desestructurar el t¨ªpico ¨¢rbol, producir una imagen virtual a partir de medios anal¨®gicos. Es un enga?o, un trampantojo en el que la trampa queda a la vista y por lo tanto es arte. Adem¨¢s, la imagen que resulta te obliga a mirar afuera para demostrar que el museo no es solo lo que hay en las salas¡±, prosigue el artista que se confiesa ¡°poco navide?o¡±.
¡°Ahora le podr¨¦ decir a mi hijo que alguna vez he hecho un ¨¢rbol de Navidad¡±, explica Bisbe, que confiesa que a¨²n no ha visto el controvertido Bel¨¦n de la Pla?a de Sant Jaume, otra muy cl¨¢sica tradici¨®n de la Navidad barcelonesa.
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