El ¡®goya¡¯ y el ¡®greco¡¯ de Mu?oz Ramonet pueden ir al Prado

El pasado 24 de noviembre el Ayuntamiento de Barcelona confiaba en que los familiares de Julio Mu?oz Ramonet, el industrial que en 1991 dej¨® en herencia a esta ciudad un palacete en la calle Muntaner y la impresionante colecci¨®n de cientos de obras de arte que hab¨ªa en su interior firmadas por autores como Vel¨¢zquez, Goya, El Greco, Sorolla, Rembrandt, entre otros, no desobedecieran al juez. Por eso, envi¨® a Madrid, donde viven tres de las cuatro hijas de Mu?oz, un furg¨®n apto para transporte de obras de arte y se hab¨ªa pedido que las fuerzas de seguridad lo acompa?aran en el viaje de vuelta. Iban a recoger La Anunciaci¨®n de El Greco y La aparici¨®n de la Virgen del Pilar de Francisco de Goya, dos de las obras m¨¢s destacadas de la colecci¨®n. Pero la agente judicial se volvi¨® con las manos vac¨ªas pese a que Manuel Castelo, nieto del industrial, sab¨ªa que llamar¨ªan a la puerta de su casa del paseo de la Castellana a las 10.30 para llev¨¢rselas. Ahora, el destino de estas dos obras, valoradas en m¨¢s de siete millones y medio de euros, est¨¢ en manos de un juez que ha de decidir si obliga a entregarlas para que vuelvan a Barcelona o si acepta la propuesta de la familia de que sea el museo del Prado el que las acoja en dep¨®sito.

Nada es f¨¢cil en lo relacionado con el legado de Mu?oz Ramonet. Jos Prado, uno de los abogados de la familia, explica que el goya y el greco pueden acabar en Madrid ya que no se ha aceptado el ofrecimiento voluntario de Castelo de entregar en dep¨®sito las obras al Museo Nacional de Arte de Catalu?a (MNAC), con la condici¨®n de que se expongan en sus salas y no vayan al almac¨¦n. Seg¨²n Prado, las obras no est¨¢n ya en la capital catalana porque no se ha respondido a este ofrecimiento voluntario. Desde el museo barcelon¨¦s se asegura que ellos no han recibido ninguna petici¨®n formal y que cumplir¨¢n ¡°lo que el juez y el Ayuntamiento de Barcelona les diga, tanto si se han de exponer como conservarlas en el almac¨¦n¡±.

¡°Es una medida dilatoria m¨¢s de la familia en este largo proceso en el que le sacan punta a todo¡±, explica Eudald Vendrell, abogado de la Fundaci¨®n Julio Mu?oz Ramonet, creada por el Ayuntamiento en 1995 para reclamar y gestionar el legado. Lo que s¨ª defiende Vendrell es el dep¨®sito de las obras en el MNAC, ya que el palacete no re¨²ne condiciones de seguridad, ¡°solo tras ordenarlo un juez como medida cautelar". Seg¨²n Vendrell, se ha presentado un escrito al juzgado ¡°argumentando que el MNAC no es ajeno a la fundaci¨®n como asegura la familia ya que el Ayuntamiento forma parte del consorcio que lo gobierna y el pleito y la fundaci¨®n est¨¢n en Barcelona no en Madrid¡±. Desde el museo del Prado aseguran que nadie se ha puesto en contacto con ellos para pedirles que acojan las obras.

Pr¨®xima demanda

El pleito entre el Ayuntamiento y la familia Mu?oz Ramonet por la colecci¨®n no baja de intensidad. Despu¨¦s de tres sentencias judiciales, la ¨²ltima de marzo de 2012 del Tribunal Supremo, dando la raz¨®n a la ciudad de Barcelona en la titularidad de las obras, la familia entreg¨® en 2013 las llaves del palacete (22 a?os despu¨¦s de fallecer Mu?oz Ramonet). El Ayuntamiento comprob¨® que las obras de arte importantes hab¨ªan desaparecido y solo quedaban otras de menor valor, inici¨¢ndose nuevas demandas y querellas entre las dos partes. La pr¨®xima est¨¢ por llegar. ¡°En cualquier momento el albacea testamentario, el notario suizo Romano Kunz, presentar¨¢ en el juzgado una demanda contra la fundaci¨®n municipal asegurando que los activos no se pod¨ªan entregar a esta fundaci¨®n porque solo el albacea es el int¨¦rprete del legado y solo ¨¦l pod¨ªa constituirla¡±, explica Prado. ¡°Dimos un tiempo al Ayuntamiento para que aceptara la propuesta de integrarse en la nueva fundaci¨®n junto a los familiares, pero no han contestado¡±.

Prado, que asegura que el plazo que marca la ley para ejercer el albacea es de 30 a?os, olvida que tras fallecer Julio Mu?oz, las cuatro hermanas impugnaron el testamento de su padre, ocultaron durante a?os la voluntad de hacer heredera a Barcelona e hicieron renunciar a Kunz como albacea bajo amenazas y tras pagarle 230.000 francos suizos. Adem¨¢s, seg¨²n el abogado, hasta ahora se ha hecho una lectura err¨®nea del testamento; se ha traducido mal el testamento ya que se ha le¨ªdo que la fundaci¨®n se tendr¨ªa que hacer bajo el ¡°patronato¡± de la ciudad cuando en realidad ¡°pone patrocinio¡±; un aspecto que Vendrell ha negado con anterioridad.

Una historia rocambolesca

En 2000, Isabel Mu?oz (Premio Nacional de Fotograf¨ªa 2016) present¨® una denuncia en un juzgado de Alcobendas (Madrid) denunciando a su marido, Jes¨²s Castelo, por el robo del domicilio conyugal de dos pinturas (una de Goya y otra de El Greco), adem¨¢s de una colecci¨®n de relojes y joyas. La denuncia qued¨® sobrese¨ªda, pero la investigaci¨®n policial continu¨®.

En abril de 2011, despu¨¦s de tener noticia que las obras iban a ser vendidas, las dos pinturas fueron recuperadas en un domicilio de Alicante dentro de la "operaci¨®n Creta", pero nadie fue detenido.

Cuando el Ayuntamiento se enter¨® de la recuperaci¨®n, pidi¨® que no se devolvieran a la familia, y que en todo caso quedaran como un dep¨®sito. Pero al no disponer el juzgado de Alcobendas de instalaciones adecuadas las deposit¨® en casa de Isabel Mu?oz, con el compromiso de devolverlas en el momento en el que se acordara la ejecuci¨®n de la sentencia sobre la posesi¨®n de toda la colecci¨®n.

Tras agotar los plazos, en mayo de 2016, parec¨ªa que la entrega era inminente, pero surgi¨® un nuevo actor en esta historia: el nieto del industrial, Manuel Castelo, que aseguraba que ¨¦l las entregar¨ªa, pero que lo tras resolverse un conflicto de propiedad, ya que afirmaba que las obras no eran de su madre ni de sus tres t¨ªas (las cuatro hermanas Mu?oz Villalonga), sino suyos, ya que los hab¨ªa heredado de su padre Jes¨²s Castelo, el mismo que hab¨ªa sido denunciado en Alcobendas por haberse llevado las obras del domicilio conyugal.

Ahora, el juez tiene que acabar resolviendo estos recursos y demandas. Mientras tanto, y como medida cautelar pedida por el Ayuntamiento de Barcelona, se ha pedido que las obras se depositen en el MNAC, pero podr¨ªan acabar en el museo madrile?o del Prado.