Los demonios y el fanatismo llegan al Valle Incl¨¢n con ¡®Las brujas de Salem¡¯
Andr¨¦s Lima estrena en castellano esta obra cumbre de Arthur Miller con un elenco de trece actores
El fanatismo, la histeria o el miedo no son cosa del pasado. No es algo que aparezca all¨¢ a finales del siglo XVII en un peque?o pueblo de Estados Unidos, regido por el puritanismo y la religi¨®n. Lo que pas¨® en Salem recorre la historia del mundo. As¨ª lo ve Andr¨¦s Lima, que estrena en el Teatro Valle Incl¨¢n una de las obras cumbre del dramaturgo norteamericano Arthur Miller, Las brujas de Salem. ¡°Es un texto que habla de c¨®mo el poder, utilizando el terror, puede llegar a crear una situaci¨®n de histeria colectiva hasta llegar a la muerte¡±, dice el director que presenta ahora en castellano esta adaptaci¨®n teatral de Eduardo Mendoza y versi¨®n literaria de Jos¨¦ Luis L¨®pez Mu?os, ya representada en catal¨¢n en el Festival Grec. Con un elenco de trece actores, liderados por Lluis Homar, Nora Navas, Borja Espinosa o Nausicaa Bonn¨ªn, Las brujas de Salem estar¨¢ en el Valle Incl¨¢n hasta el pr¨®ximo 5 de marzo.
Lima no puede ni quiere ocultar la satisfacci¨®n por tener la oportunidad de llevar a escena este gran texto literario y pol¨ªtico de Miller, ¡°esta obra tan cr¨ªtica y tan dura¡±, y m¨¢s en un teatro nacional como es el Centro Dram¨¢tico Nacional, en un momento de rebrote de conductas radicales y fan¨¢ticas. ¡°Arthur Miller no hubiera escrito Las brujas de Salem si no hubiera sido una v¨ªctima directa de las caza de brujas que se desat¨® durante la ¨¦poca del senador McCarthy en los a?os cincuenta. Vivimos el rebrote de un nuevo fascismo en Estados Unidos dispuesto a utilizar el terror para imponer su autoridad. No es una situaci¨®n extra?a ni ajena. Por eso me interesa especialmente esta obra.
Debajo de estas brujas, de estos demonios de Salem no hay m¨¢s que codicia por parte de los poderosos. Lamentablemente esta piedra sigue rebotando en Europa y Estados Unidos. Su nuevo presidente, Donald Trump, es un ejemplo de esta tradici¨®n radical y puritana que no est¨¢ tan alejada de las posturas del m¨¢s rancio catolicismo en Espa?a y del rebrote de los fascismos en Europa. Es bueno que el teatro refleje y denuncie esto porque siempre es el ser humano el que acaba perdiendo frente al poder¡±, asegura Lima (Madrid, 1961) que compatibilizar¨¢ este montaje con el estreno en Barcelona el pr¨®ximo d¨ªa 28 de La mare, de Florian Zeller que protagoniza Emma Vilarasau.
Lo que empez¨® como un juego infantil, el baile de unas ni?as en el bosque, en una comunidad represora y puritana se convirti¨® en un estado de histeria y terror. Este hecho real se vivi¨® en 1692 en Salem (actual estado de Massachussets), un pueblo dominado por las luchas entre familias por la posesi¨®n de las tierras y el fanatismo religioso, y acab¨® con las condenas a muerte de diecinueve personas, en su mayor¨ªa mujeres, acusadas de brujer¨ªa. ¡°La superstici¨®n hace que el demonio aparezca siempre cuando le interesa al poder¡±, denuncia Andr¨¦s Lima que a?ade que en Espa?a tampoco escapamos a este tipo de conductas. ¡°Ah¨ª est¨¢ la reciente caza de brujas contra dos titiriteros o la propia ley mordaza¡±.
Era algo reticente Lluis Homar, que se estrena como actor en el Valle Incl¨¢n y tambi¨¦n a las ¨®rdenes de Lima, ante este encuentro teatral con Arthur Miller. No es la primera vez. Le ha pasado en otras ocasiones con Harold Pinter o Thomas Bernhard. Pero, ahora se confiesa un enamorado de Las brujas de Salem, de Miller y de ese reflejo de la vida y la condici¨®n humana que retrata la obra. ¡°En la mente humana anida una especie de pestilencia, una fatalidad siempre al acecho de que se den las condiciones necesarias para su estallido de alarmas, sospechas y asesinatos. Somos esto, lo queramos o no, hay esta parte dentro de nosotros que no sabemos muy bien de donde viene pero que es capaz de hacer barbaridades como se hicieron en Salem, en la ¨¦poca de McCarthy o en el nazismo. Todo esto demuestra que somos unos seres perdidos que evolucionamos con los m¨®viles y las m¨¢quinas pero que nuestra alma humana camina muy lentamente¡±, asegura el actor, que hace el papel de demoledor gobernador de Danforth.
Nuevo idioma y nuevo espacio
A veces es bueno dejar dormir las obras. El reencuentro con ellas puede ser formidable porque aparecen muchas m¨¢s lecturas. Y m¨¢s cuando se cambia de idioma como es el caso de Las brujas de Salem, estrenada en catal¨¢n en Barcelona y ahora representada en castellano. As¨ª lo asegura la actriz Nora Navas, que ha encontrado nuevos matices en este montaje en Madrid, una caja de madera en medio de un bosque, creaci¨®n de Beatriz San Juan. ¡°Es una forma nueva de expresarse, tambi¨¦n de odiar y de amar. En el espacio cerrado del Valle Incl¨¢n, la obra ha cogido una fuerza diferente a la que experimentamos en el Grec, al aire libre. Aqu¨ª se hace todo m¨¢s claustrof¨®bico y oscuro¡±, explica la int¨¦rprete y vicepresidenta de la Academia de Cine.
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