El arte de reinventar habitaciones

Todo empez¨® en un convento. Concretamente, en el antiguo monasterio en desuso de la calle General Or¨¢a. Un total de 43 decoradores intervinieron el espacio, en la que fue la primera edici¨®n de Casa Decor. ¡°?Qu¨¦ hacen 43 decoradores encerrados en un convento? La decoraci¨®n hace milagros¡±, fue el eslogan utilizado. Han pasado 25 a?os y la feria, un referente global en interiorismo, celebra su 52 edici¨®n interviniendo un antiguo edificio se?orial de oficinas en la calle de Antonio Maura.

¡°La verdad es que es todo un honor estar aqu¨ª¡±, afirma Asun Ant¨®. Con su equipo ha intervenido una habitaci¨®n, que ha convertido en un luminoso rinc¨®n para los lectores ¡°teniendo solo una entrada de luz¡±, subraya la interiorista catalana, que acude a Casa Decor por primera vez. Ella ha actuado en uno de los 67 espacios de la casa que han sido redecorados. En ellos, dise?adores, arquitectos e interioristas han creado todo tipo de ambientes (salones, dormitorios, cocinas, cuartos de ba?o, habitaciones infantiles). ¡°Nosotras nos hemos pasado un mes meti¨¦ndole mano al espacio¡±, cuenta Patricia Bustos desde la cuidada suite que ha realizado, inspirada en los a?os cincuenta estadounidenses (la ha llamado Despertar en Palm Springs).

¡°Casa Decor ha sido un impulso muy fuerte en mi carrera¡±, dice Guillermo Garc¨ªa-Hoz, que acude a la cita desde 2008 (tanto a la de Madrid como la que se celebra en Barcelona). ¡°Ha sido una pieza clave de la industria, porque por un lado conecta a la gente y por otro pone las tendencias a pie de calle¡±, contin¨²a el interiorista, que ha intervenido dos estancias de la casa: un gabinete de curiosidades artie y un moderno y magn¨¦tico sal¨®n.

En las cinco plantas que tiene el edificio han actuado un total de 59 estudios y profesionales, con nombres como Teresa Sapey, Erico Navazo o Miriam Al¨ªa. En Casa Decor todos los espacios se conectan, pero en la ¨²ltima planta despierta la curiosidad una puerta cerrada. Si se cruza, se accede a un angosto pasillo que permite ver el estado del inmueble antes de que todos estos artistas de los interiores los tocaran.

Casa Decor siempre se celebra en edificios que, a pesar de estar muy bien situados, llevan a?os en desuso. Es una especie de reto a los interioristas, que tienen solo 30 d¨ªas para hacer su idea realidad. ¡°Esto es m¨¢s que un evento¡±, dice un portavoz de la organizaci¨®n. ¡°No solo dinamiza el sector, sino que tambi¨¦n implica a cientos de personas que contribuyen a construir cada proyecto: pintores, alba?iles, electricistas, transportistas, carpinteros, jefes de obra... En cada edici¨®n de Casa Decor intervienen, de forma directa o indirecta, alrededor de 2.000 puestos de trabajo¡±.

¡°Parecen dos mundos distintos¡±, dice una visitante despistada desde el pasillo con gotel¨¦ que muestra la realidad del inmueble. Rauda, regresa sobre sus pasos y contin¨²a recorriendo la exposici¨®n por habitaciones que cambian de color y que invitan a los ni?os ¡ªy a mayores¡ª a so?ar (bautizadas Viaje por la imaginaci¨®n, de Espacio Gira); por cocinas con materiales que no son lo que parecen (como la de Steven Littlehales); por impresionantes ba?os, como el de Patricia Urquiola, o por alfombras persas hechas en Algete (Alfombras Rahmati, casa de origen iran¨ª y que tiene sede en Teher¨¢n y en Madrid). ¡°Lo bueno de Casa Decor es que no hay dos ediciones iguales¡±, dice la organizaci¨®n. ¡°Ninguna es mejor ni peor. Todas son distintas¡±.