Ecologistas en Acci¨®n pide la paralizaci¨®n de una tala de 14.000 pinos en un monte de utilidad p¨²blica
Aseguran que el uso de maquinaria pesada hace imposible respetar las especies protegidas
Ecologistas en Acci¨®n ha pedido a la Comunidad de Madrid que paralice la tala de unos 14.000 pinos en un monte p¨²blico en Montejo de la Sierra (al norte de la Comunidad de Madrid) catalogado como zona de especial conservaci¨®n. Se quejan de que los trabajos se est¨¢n realizando con maquinaria pesada que hace imposible respetar todos los ejemplares de especies protegidas. La Consejer¨ªa de Medio Ambiente, que reconoce adem¨¢s que no cuenta con el permiso de Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del Tajo para intervenir en un arroyo de la zona, defiende que el impacto es muy peque?o y la intervenci¨®n, crucial para la buena conservaci¨®n del bosque al reducir la excesiva densidad de ¨¢rboles.
A mediados del mes de junio comenzaron los trabajos de entresaca de pinos en Sierra Escalva, un monte de inter¨¦s p¨²blico ubicado en?Este monte se haya incluido en el LIC (Lugar de Importancia Comunitaria) de la Cuenca del R¨ªo Lozoya y Sierra Norte, dentro de la Reserva de la Biosfera de la Sierra del Rinc¨®n y que linda con el? Sitio Natural de Inter¨¦s Nacional Hayedo de Montejo de la Sierra. La corta la est¨¢ llevando a cabo la empresa Le?as y Transportes El Cardoso, que se hab¨ªa adjudicado el pasado mes de enero por 38.500 euros el aprovechamiento de entre 15% y el 25% de los pinos de varias decenas de hectares (sumar¨ªan al menos 14.000 ¨¢rboles) que posteriormente vender¨¢n. Los responsables del ¨¢rea de conservaci¨®n de la Consejer¨ªa de Medio Ambiente aseguran que los trabajos, contemplados en el plan de gesti¨®n de la zona (de hecho, despu¨¦s de esta corta se prev¨¦n m¨¢s), buscan reducir la enorme densidad de pino existente en la zona, lo que aminorar¨¢ los peligros de plagas o incendios y adem¨¢s dejar¨¢ espacio para que crezcan otras especies aut¨®ctonas.
Sin embargo, los ecologistas se quejan, entre otras cosas, de que el uso de maquinaria pesada ¡ªbulldozers, arrastradoras y procesadoras, adem¨¢s de aparatos de mano auxiliar para la limpieza de ramas¡ª est¨¢ da?ando precisamente los ejemplares que est¨¢n creciendo de especies protegidas como acebo, serbal, roble, tejo, brezo, sauce y haya, sobre todo porque los peque?os son imposibles de sortear con estos m¨¦todos. Adem¨¢s, protestan porque la apertura de una v¨ªa para sacar la madera tambi¨¦n ha destruido algunos ejemplares adultos de esas especies y que los pinos que quedan en pie presentan da?os con visibles muescas.
La consejer¨ªa asegura que se trata de da?os muy reducidos y totalmente asumibles en comparaci¨®n con el beneficio del proyecto. Pero sea as¨ª o no, lo cierto es que se contradice el propio pliego de adjudicaci¨®n de la corta, que se?ala: ¡°En ning¨²n caso se apear¨¢n [cortar¨¢n] los ejemplares arb¨®reos, de cualquier calibre, de las especies catalogadas, debi¨¦ndose se?alizar su presencia antes de realizar los desbroces u otras actuaciones". Lo cual no es posible con la maquinaria que se est¨¢ utilizando, al menos, ¡°en sus estrictos t¨¦rminos¡±, es decir, cuando se trata de ejemplares peque?os, reconoce el subdirector general de Conservaci¨®n del Medio Natural, Felipe Ruza. ¡°Es verdad que puede haber una mala redacci¨®n¡±, a?ade.
El hecho es que los ecologistas, aparte de otras cosideraciones, se quejan de que la intervenci¨®n forestal se est¨¦ llevando a cabo salt¨¢ndose sus propias reglas. Lo dicen tambi¨¦n porque han intervenido en el entorno de un arroyo ¡ªpor ejemplo, se ha entubado parcialmente el cauce en un punto¡ª sin contar con el necesario permiso de la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del Tajo. La cons¨¦jer¨ªa admite que lo han pedido tarde y se escuda en que el organismo de cuenca se demora mucho en la tramitaci¨®n.
Ecologistas en Acci¨®n lo ha denuniciado ya en la Confederaci¨®n y tambi¨¦n ha cursado una solicitud a la Direcci¨®n General de Medio Ambiente de la consejer¨ªa para que se paralicen las cortas ¡ªporque se est¨¢ saltando la normativa y contraviniendo las condiciones del contrato¡ª y se someta a una evaluaci¨®n de impacto ambiental. ¡°La gesti¨®n forestal en la Comunidad de Madrid se ha quedado obsoleta. La visi¨®n productivista lo sigue impregnando todo, mientras se ignora la biodiversidad y la sostenibilidad del monte¡±, se queja Mar¨ªa ?ngeles Nieto, de Ecologistas en Acci¨®n. Reclama m¨¢s investigaci¨®n y t¨¦cnicas m¨¢s blandas, sobre todo, la corta manual y arrastre de los pinos en lugar del uso de m¨¢quinas procesadoras.
Tanto Felipe Ruza como el jefe de ?rea de Conservaci¨®n de Montes, Antonio Sanju¨¢n, responden que el terreno en cuesti¨®n, aterrazado, obliga a utilizar las m¨¢quinas. A la vez explican que el uso de esas t¨¦cnicas alternativas encaracer¨ªa el proceso de tal manera que ninguna empresa estar¨ªa dispuesta a acometerlo. Y, desde luego, con los exiguos recursos destinados a este ¨¢rea, la consejer¨ªa tampoco podr¨ªa acomenterlos.
Y eso, cuando muchos especialistas ¡ªcomo el profesor de Ingenier¨ªa de Montes de la Polit¨¦cnica de Madrid Eduardo Tolosana¡ª consideran estas intervenciones forestales imprescindibles y se quejan de que hacen muy pocas sacas de este tipo en la Comunidad de Madrid: se aprovecha comercialmente en torno al 5% del crecimiento bruto, es decir, no de total, sino de lo que aumenta la superifie cada a?o. Esto supone, en su opini¨®n, un despilfarro de recursos y un crecimiento desmesurado de la densidad de los bosques, lo conlleva a sus vez esos mayores riesgos de enfermedades, plagas o incendios.
En un trabajo del a?o pasado, Tolosana asegura que el recelo de lo que llama "la opini¨®n p¨²blica urbana" es la causa de semejante escasez, pero tambi¨¦n que las prioridades de la adminitsraci¨®n madrile?a van por otro lado, como el uso p¨²blico de los espacios forestales.??
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
Archivado En
- Comunidad de Madrid
- Protecci¨®n ambiental
- Materias primas
- Agroalimentaci¨®n
- Espa?a
- Especies
- Industria
- Ordenaci¨®n forestal
- Ecologistas en acci¨®n
- ?rboles
- Madera
- Especies protegidas
- Flora
- Pol¨ªtica ambiental
- Silvicultura
- Organizaciones medioambientales
- Reservas biosfera
- Biosfera
- Reservas naturales
- Espacios naturales
- Medio ambiente