Llu¨ªs Puig, un perfil bajo y de confianza para Cultura

La crisis abierta tras las declaraciones de Jordi Baiget, en las que dudaba de que se pudiera celebrar el refer¨¦ndum el 1 de octubre, comport¨® su destituci¨®n fulminante y el nombramiento de Santi Vila para sustituirle al frente del Departamento de Empresa y Conocimiento. Despu¨¦s de unas horas en las que parec¨ªa que Vila iba a ocupar las dos carteras, la crisis se cerr¨® ayer con el nombramiento de Llu¨ªs Puig i Gordi (Terrassa, 1959) para hacerse cargo del Departamento de Cultura, el tercero con menos presupuestos de toda la Generalitat.

Al producirse el cambio en la fase final de la legislatura, a las puertas de verano y con el refer¨¦ndum previsto para el 1 de octubre, que se celebre o no, lo cambiar¨¢ todo, es normal que Carles Puigdemont no haya tenido muchas opciones y se haya encontrado con la dificultad de incorporar referentes potentes del mundo cultural dispuestos a ocupar un cargo tan solo tres meses (dos h¨¢biles). Y al mirar adentro del Departamento de Cultura all¨ª estaba Puig, un viejo conocido que fue concejal de cultura del ayuntamiento de Girona cuando Puigdemont fue alcalde de la ciudad.

En el sector hay cierta unanimidad en que si bien Puig no formar¨ªa parte de los nombres en los que se suele pensar para un nombramiento de esta naturaleza, s¨ª bien es un personaje valorado en el campo de la cultura popular y con un car¨¢cter que puede favorecer la creaci¨®n de consensos, por dialogante y cordial.

Puig, un hombre curtido en el mundo de la tradici¨®n y la cultura popular, que desde 2011 estaba al frente de la Direcci¨®n General de Cultura Popular, Asociacionismo y Acci¨®n Cultural del departamento que ahora dirigir¨¢, no se le conocen grandes enemigos dentro del mundo cultural catal¨¢n. El nuevo consejero tampoco pasa por ser un gran ide¨®logo ni un pensador cultural, al estilo de sus predecesores Joan Manuel Tresserres y Ferran Mascarell, sino m¨¢s bien un ¡°hombre de acci¨®n¡± y de equipo, algo que le ir¨¢ bien para ganarse el apoyo de todos en el Palau Moia.

Puig cuenta con estudios musicales de danza y de producci¨®n audiovisual. Tambi¨¦n estudi¨® Humanidades en la Universitat Oberta de Catalunya. Es sardanista, dansaire, director de esbarts, m¨²sico de folk y fundador y gestor de varias entidades culturales de Terrassa, su ciudad natal.

El nuevo consejero, galardonado en 1984 con el Premio Nacional de Danza, es adem¨¢s, promotor y m¨¢nager de artistas y puso en marcha la casa de la M¨²sica de Terrassa. Autor de varios libros sobre cultura tradicional ha dirigido la Fira de la Mediterr¨¤nea (1999 y 2010) y el Mercado de M¨²sica Viva de Vic (2008 y 2011).

Puig, bombero profesional entre 1981 y 1991, tendr¨¢ que hacer frente a varios incendios que afectan su consejer¨ªa. Sobre todo el de Sijena que enfrenta judicialmente a Catalu?a con Arag¨®n por los bienes de este monasterio y que tiene varias sentencias pendientes de ejecutar; la situaci¨®n critica del cine, que no consigue superar la cuota del 1% de p¨²blico y la crisis de crecimiento del MNAC, son otras cuestiones a resolver.