M¨¢s de 23.500 ancianos est¨¢n en lista de espera para una residencia
Casi la mitad de las personas mayores que aguardan una plaza est¨¢n ingresados en un geri¨¢trico privado subvencionado, en parte, por la Generalitat
La lista de espera para acceder a una plaza en una residencia p¨²blica en Catalu?a asciende a 23.757 ancianos, se trata de un 2,6% menos que el a?o pasado. En 2011, cuando se iniciaron los recortes, eran 17.000 las personas mayores que aguardaban una plaza. En los ¨²ltimos a?os, el presupuesto de las residencias se redujo en 43 millones en dos a?os (entre 2011 y 2013) y aunque la partida a este sector se ha incrementado (en 2017 se han destinado 629,9 millones) todav¨ªa no alcanza las cifras de antes de la crisis. Los trabajadores avisan de que la mayor¨ªa de los ancianos que llegan a los geri¨¢tricos ya son altos dependientes con una salud muy debilitada.
De hecho, la lista de espera para acceder a una plaza de residencia se conforma de dependientes de grado II y III, los m¨¢s altos. Estos ancianos ya han sido valorados por los servicios sanitarios y sociales y tienen aprobado el Programa Individual de Atenci¨®n (PIA), donde se recoge la prestaci¨®n adecuada a su estado de salud y grado de pendencia (en este caso, la residencia). Seg¨²n los ¨²ltimos datos de Asuntos Sociales, unos 27.000 ancianos tienen aprobada la prestaci¨®n de una plaza en una residencia p¨²blica.
El Departamento puntualiza que no todas las personas en lista de espera est¨¢n aguardando en su casa. Casi la mitad de ellos (10.051) est¨¢n ingresados ya en un geri¨¢trico privado cuya plaza paga, en parte, la Generalitat, a trav¨¦s de la llamada Prestaci¨®n econ¨®mica vinculada (PEV): por un anciano valorado con el grado II de dependencia, Asuntos Sociales aporta 426 euros para ayudar a la familia a pagar una plaza privada mientras espera por su lugar en una residencia p¨²blica. Si el anciano tiene un grado III de dependencia, la cuant¨ªa que subvenciona la Generalitat sube a 715 euros.
Con todo, el Departamento se?ala adem¨¢s que se producen muchas renuncias cuando se les ofrece una plaza. En 2016 hubo 9.790 y entre enero y junio de 2017, otras 5.457. ¡°Pueden apuntarse por previsi¨®n y cuando se lo van a dar, pues dicen que todav¨ªa no. O tambi¨¦n puede ser que, como pueden elegir tres opciones, les llamen de la segunda o la tercera, y prefieran esperar y seguir en la lista¡±, apunta una portavoz del Departamento.
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