La semilla del conflicto est¨¢ en la infancia

La semilla del conflicto est¨¢ en la infancia ¡°en la de todos¡±, porque vivir es angustioso y ¡°al mismo tiempo muy divertido¡±, apuntilla el escritor aragon¨¦s Miguel Serrano Larraz (Zaragoza, 1977), que ha publicado el libro de relatos R¨¦plica (Candaya) tras el ¨¦xito de Autopsia, ganador del Premio Estado Cr¨ªtico de Novela 2015. Con R¨¦plica, Serrano vuelve al relato, ¡°mi g¨¦nero favorito¡±, asegura, para diseccionar a personajes que deambulan entre la incomprensi¨®n de la vida, la angustia y problemas de identidad sexual. La mayor¨ªa de ellos viven en su ciudad natal, de la que el autor se sirve como granero de personajes y vivencias ficticias que esconden mucha realidad.

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La generaci¨®n sin opciones de futuro

¡°El tema central es la identidad narrada desde muchos puntos de vista: sexual, familiar o incluso nacional. La realidad es incomprensible por completo, al menos para m¨ª. En verdad, escribo relatos para aclarar mis ideas¡±, dice Serrano. ¡°No s¨¦ cu¨¢l es mi mundo, que en general es extra?¨ªsimo, c¨®mo la infancia: foco del conflicto de todos que aparece como flashes, sin personajes definidos, como en sue?os¡±, a?ade.

¡°En verdad, escribro relatos para aclarar mis ideas¡±

¡°En aquella ¨¦poca yo sonre¨ªa mucho, as¨ª que es posible que s¨ª tuviera alguna culpa, por mi optimismo vac¨ªo, sospechoso¡±, reflexiona uno de los personajes de los doce relatos que conforman R¨¦plica. ¡°Es una frase ambigua pero cierta. Una vez, un cajero de un supermercado me dijo que no sonriera tanto porque eso me hac¨ªa parecer sospechoso. La amabilidad a veces inspira desconfianza. La gente cambia su forma ser para aparentar quien realmente no es, algo muy triste¡±, dice Serrano. En el relato Oxitocina, otro personaje dice: ¡°Pas¨¦ revista a mi vida y me sorprend¨ª de haber sido, no hace muchos a?os, otra persona¡±. ¡°?Y qui¨¦n no ha pensado eso alguna vez? A m¨ª me pasa: hay veces que me releo y pienso: ?qui¨¦n escribi¨® esto? En ocasiones me desespero y en otras creo que la idea era buena¡±, dice el autor.

Al joven escritor aragon¨¦s le han comparado con Roberto Bola?o. ¡°Me siento c¨®modo con esa comparaci¨®n. Si lo hicieran con Paulo Coelho, entonces me preocupar¨ªa¡±, dice el tambi¨¦n autor de tres poemarios. El estilo literario del autor chileno est¨¢ muy presente en su estilo. ¡°Bola?o edific¨® mi literatura. Borges y Cort¨¢zar fueron los narradores de mi infancia¡±, explica.

¡°Roberto Bola?o es el autor que edific¨® mi escritura¡±?

Uno de los personajes de sus relatos, tambi¨¦n llamado Miguel, es un escritor t¨ªmido y enemigo del protagonismo que ha escrito una novela de parodia que nadie entiende. Huye de las entrevistas y de los actos de presentaci¨®n en librer¨ªas. ¡°En toda ficci¨®n siempre hay mucha realidad autobiogr¨¢fica¡±, afirma Serrano, tambi¨¦n t¨ªmido, de respuesta escueta exhalada desde un hilo de voz a veces casi imperceptible. Otro personaje del relato R¨¦plica, que le da nombre al libro y el m¨¢s autobiogr¨¢fico seg¨²n el novelista, vive en una realidad que no es la suya. Por momentos, su vida est¨¢ condicionada a la apariencia que refleja frente a los dem¨¢s. Le confunden con Enrique Bunbury, cantante del grupo H¨¦roes del Silencio. Le adoran, le paran por la calle, hasta una chica se desmaya en medio de una discoteca ante la presencia aparente de su h¨¦roe musical. ¡°Durante un tiempo a m¨ª me confundieron con ¨¦l, la escena de una joven revolc¨¢ndose por 'm¨ª' en una discoteca es real¡±, explica.?

Serrano descarta ¡°por el momento¡± dedicarse plenamente a la literatura. El tambi¨¦n traductor, de hecho, todav¨ªa no se reconoce a s¨ª mismo como ¡°escritor profesional¡± a pesar de que su primer ¨¦xito literario, Autopsia, haya vendido alrededor de 10.000 ejemplares. ¡°Si quieres ser profesional vas a tener que escribir siempre, aunque no tengas ganas. Eso me parece desolador. Los profesionales dir¨¢n lo que quieran, pero no me creo que siempre escriban lo que les venga en gana¡±.