Estrellas y masones
El espacio homenajea al alcalde Tierno Galv¨¢n, que construy¨® varios parques en zonas degradadas de la ciudad
¡°Pod¨¦is rogar a Tierno / a Barrranco o al que haya / pero al llegar agosto, ?vaya, vaya! Aqu¨ª no hay playa¡±. The Refrescos, un grupo de la Movida, alcanz¨® el n¨²mero uno de ventas en 1989, con esta canci¨®n que hace un gui?o al socialista Enrique Tierno Galv¨¢n, el primer alcalde democr¨¢tico de Madrid tras la dictadura (1979-1986). El viejo profesor humaniz¨® el urbanismo de la ciudad y promocion¨® parques en zonas degradadas. Esta zona verde comenz¨® a construirse en 1985 y, meses m¨¢s tarde, Tierno muri¨®. Su sucesor en la alcald¨ªa, Juan Barranco, decidi¨® homenajearlo poni¨¦ndole su nombre al espacio.
La asociaci¨®n Estudio de las Artes organiza visitas guiadas al parque que, seg¨²n el historiador Arturo Sacrist¨¢n, est¨¢ lleno de s¨ªmbolos masones. Hay una fuente, ahora sin agua, con una estrella de cinco puntas; una columna de acero en la Puerta Sur de 49 metros (siete veces siete, el n¨²mero de virtudes de los masones) y una enorme chimenea en cuyo voladizo se lee Algadu (al gran arquitecto del universo). No hay constancia de que Tierno fuese mas¨®n, aunque en 2012 su archivo personal fue cedido a la Biblioteca Ar¨²s, uno de los fondos de masoner¨ªa m¨¢s destacados de Europa. Los s¨ªmbolos fueron minuciosamente descritos por el arquitecto del parque, Manuel Ayll¨®n, en el libro Acercamiento profano al arte sagrado. ¡°Sin embargo, no queda claro por qu¨¦ se construyeron¡±, explica Sacrist¨¢n.
M¨¢s all¨¢ de lo esot¨¦rico, el parque dispone de 45 hect¨¢reas para pasear, relajarse y hasta para rapear: en el Tierno Galv¨¢n los adolescentes organizan batallas de gallos cada fin de semana. Son concursos de rap con refrescantes letras que ayudan a soportar mejor el verano. Quedan por Whatsapp, pero cualquiera puede unirse al p¨²blico, que hace de jurado. El duelo del pasado s¨¢bado entre Baplin y S-Kapo fue ¡°memorable¡±, coinciden Gonzalo y Alexandra, dos espectadores.
En la zona norte del parque hay un mirador que ofrece una panor¨¢mica del sur de la ciudad: a un lado Usera, al otro M¨¦ndez ?lvaro y, al frente, Vallecas. A lo lejos se divisa el Cerro de los ?ngeles. Una pareja se fotograf¨ªa y decide esperar a la puesta de sol porque ¡°tiene que ser muy rom¨¢ntica¡±. Mientras, Mar¨ªa se acerca hasta el prism¨¢tico p¨²blico que corona el talud, pero no funciona. Unos pasos m¨¢s adelante unos amigos descienden un estrecho camino que lleva hasta los estanques, pero se detienen para dejar paso a un ciclista.
El parque Tierno Galv¨¢n es id¨®neo para practicar deporte. Cuenta con pistas de voleibol y un circuito para correr alrededor del lago, en el que se ba?a Bach, un perro labrador de seis a?os. Hay tambi¨¦n una ruta verde de siete kil¨®metros que lo conecta en bicicleta con Madrid R¨ªo bordeando el curso del Manzanares. El c¨¦sped est¨¢ en perfecto estado: se organizan picnics y se juega a la pelota. La estupenda sombra que proyecta su arboleda, donde se mezclan pinos, cedros y enebros, es ideal para leer, asegura Masa Kmet, una estudiante eslovena.
Un planetario
En el centro del parque emerge un auditorio al aire libre con forma de anfiteatro. Para construirlo se aprovech¨® la depresi¨®n del terreno. Sus gradas est¨¢n realizadas con hormig¨®n y la zona que divide los asientos se sembr¨® de c¨¦sped. Tiene capacidad para 5.000 personas y en ¨¦l se realizan audiciones musicales, festivales y proyecciones. ¡°Podemos tambi¨¦n ha celebrado alg¨²n mitin¡±, afirma Juan Cuesta. A unos metros, el visitante se topa con una enorme c¨²pula blanca. Hasta 2014 fueron los cines IMAX, pero ahora el Ayuntamiento busca un nuevo uso para la estructura.
Si por algo es famoso este parque es por albergar el Planetario, obra del arquitecto Salvador P¨¦rez. Se inaugur¨® el 29 de septiembre de 1986 y desde entonces ha contribuido a la difusi¨®n de la ciencia y la astronom¨ªa. Las proyecciones tienen lugar durante todo el a?o, pero ahora un cartel en la puerta avisa: ¡°Cerrado por renovaci¨®n tecnol¨®gica¡±. No hay pases desde junio del a?o pasado, pero volver¨¢ a abrir las puertas en octubre. ¡°Mi padre ten¨ªa un concepto humanista de la cultura: si hab¨ªa que hacer un parque, ten¨ªa que incorporar tambi¨¦n elementos de aprendizaje. Por eso le dio mucha importancia al Planetario¡±, afirma Enrique Tierno, hijo del viejo profesor.
La zona antes era una escombrera, uno m¨¢s de los lugares degradados del sur de Madrid. ¡°Como alcalde, cambi¨® la ciudad. Ten¨ªa la concepci¨®n de que hab¨ªa lugares impresentables. El sur fue un reto para ¨¦l¡±, confirma el hijo de Tierno Galv¨¢n, que durante su mandato inaugur¨® varios parques (Pradolongo, Roma o La Quinta de los Molinos). El espacio que homenajea al alcalde se levanta sobre el antiguo Cerro de la Plata, llamado as¨ª por el contraste que hac¨ªan los restos de carbonilla provenientes de los trenes de vapor que sal¨ªan de las estaciones cercanas, Atocha y la antigua Delicias, ahora convertida en el Museo del Ferrocarril. De hecho, el parque est¨¢ delimitado por una v¨ªa en desuso que lleva hasta la vieja estaci¨®n dise?ada por el ingeniero franc¨¦s ?mile Cacheli¨¦vre y que el rey Alfonso XII inaugur¨® en 1880. Pero esa ya es otra historia.
El parque en datos
Superficie: 45 hect¨¢reas
Administraci¨®n: Ayuntamiento de Madrid
Horario: Abierto las 24 horas. Entrada gratuita
Puntos de inter¨¦s: Planetario, Cine Imax (cerrado), Auditorio para 5.000 espectadores, carril-bici, pistas de voleibol, circuito de footing, zonas infantiles, tres estanques y un mirador
C¨®mo llegar: Avenida del planetario, 18. Metro: Arganzuela-Planetario (l¨ªnea 6). En autob¨²s, l¨ªnea 148 de la EMT
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