Arqueolog¨ªa en familia
Los ni?os aprenden de Roma mientras sus padres les asisten en la excavaci¨®n de Complutum, la antigua Alcal¨¢
??igo, de 12 a?os, se entusiasma cuando piensa que hace 2.000 a?os ya viv¨ªa gente en su ciudad, Alcal¨¢ de Henares. Se llamaba Complutum y era uno de los asentamientos romanos m¨¢s importantes de la pen¨ªnsula Ib¨¦rica. El conjunto se localiza dentro del actual casco urbano y est¨¢ abierto al p¨²blico desde 2008. Sin embargo, muchos desconocen su existencia. Para remediarlo, la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento desarrollan un programa gratuito en el que ni?os de 8 a 14 a?os como ??igo se convierten en arque¨®logos mientras sus padres les asisten en las tareas de excavaci¨®n.
Los trabajos en Complutum comenzaron en 1985. Sin embargo, de las 55 hect¨¢reas solo se ha excavado el 1,5%, que es la superficie vallada, explica Eduardo Cuadra, gu¨ªa del yacimiento. A escasos metros se encuentra el r¨ªo Henares y el cerro del Viso, donde los expertos sit¨²an otra ciudad romana del siglo II antes de Cristo. La entrada actual del conjunto est¨¢ flanqueada por cipreses y lavanda. Un grupo de 40 personas, la mitad ni?os, se adentraba este s¨¢bado en ellos mientras el arque¨®logo Daniel Sanmart¨ª les explicaba lo que ve¨ªan: canalizaciones, termas y una pared de la bas¨ªlica, centro del poder pol¨ªtico y financiero local.
Cerca del foro, donde se cruzan las v¨ªas principales del urbanismo romano (el cardo y el decumano), emergen unas piedras. Un d¨ªa fueron viviendas, aunque la que mejor se conserva es la Casa de los Grifos. ¡°Pertenec¨ªa a una familia pudiente. Es la joya de la corona, porque han aparecido pinturas murales romanas, algo muy dif¨ªcil de encontrar¡±, subraya Sanmart¨ª. Hay visitas programadas las ma?anas de todos los fines de semana de septiembre y octubre, pero es necesario inscribirse antes. En total, desde el verano se han ofertado 3.500 plazas, el triple que en 2014.
La excavaci¨®n
La Casa de los Grifos est¨¢ protegida por una cubierta met¨¢lica que ayuda a excavar la zona, visitarla y conservarla. Tras observar sus grafitis, los peque?os vuelven al yacimiento. Los trabajadores de Complutum han preparado un caj¨®n artificial con sedimentos obtenidos en la excavaci¨®n y los han escondido para que los menores los encuentren. Cada uno ocupa una cuadr¨ªcula de 50 cent¨ªmetros delimitada con hilo blanco. ¡°Saber lo que va a salir nos permite crear un discurso did¨¢ctico¡±, reconoce Sanmart¨ª.
Los ni?os remueven la tierra con entusiasmo mientras sus padres anotan lo que encuentran. Nico, de ocho a?os, ha obtenido un vidrio que pudo ser parte de un vaso de la ¨¦poca. Su madre, Isabel Torres, lo felicita y explica: ¡°Nos apuntamos porque siempre me apasion¨® la arqueolog¨ªa y quer¨ªa transmitirle que hay cosas m¨¢s all¨¢ del f¨²tbol¡±. Las gemelas Olga y Valeria han encontrado una hebilla, un elemento que permite comprender c¨®mo viv¨ªan nuestros antepasados. ¡°Con los dibujos de Tadeo Jones, la arqueolog¨ªa se ha puesto de moda¡±, afirma la madre, Raquel Mart¨ªn.
¡°Todo lo que se descubre va a los museos, que son los garantes de nuestra cultura¡±, insiste Sanmart¨ª.?Asegura que es la lecci¨®n m¨¢s importante que deben aprender los peque?os. Y es que Complutum fue saqueada durante d¨¦cadas. En los sesenta, incluso, se levantaron viviendas en la zona. Francisco Fern¨¢ndez, de 77 a?os, vive en una de ellas desde hace medio siglo, y afirma: ¡°Siempre se supo que exist¨ªan los restos, pero ni se buscaron. Hasta no hace mucho aqu¨ª sembraban garbanzos, cereales y hasta melones¡±.
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