Muere Juan Lladr¨®, uno de los fundadores de la famosa casa de porcelanas

Juan Lladr¨®, uno de los fundadores de la compa?¨ªa valenciana de porcelanas, ha fallecido este s¨¢bado a los 91 a?os, seg¨²n han confirmado fuentes de la familia. Juan era el mayor de los tres hermanos que en la d¨¦cada de los 50 crearon la empresa. Partiendo de un horno moruno en el jard¨ªn de la casa de sus padres, en Alm¨¤ssera (Valencia), convirtieron la firma en un s¨ªmbolo planetario del lujo.

M¨¢s informaci¨®n

Los hermanos Lladr¨® se jubilan

Nueva guerra familiar en Lladr¨®, el reino de la porcelana

Lladr¨® deja de ser de la familia Lladr¨®

El fallecido fue el principal responsable de la formidable expansi¨®n internacional que llev¨® a Lladr¨® a abrir tiendas en las calles m¨¢s exclusivas del mundo, de Nueva York a Tokio. La lista de celebridades admiradoras de la marca a lo largo de las ¨²ltimas seis d¨¦cadas incluye a la actriz Lauren Bacall, el cantante Michael Jackson o la reina Isabel II de Inglaterra.

Retirado te¨®ricamente en 2003, Juan no dej¨® de acudir a su despacho de la Ciudad de la Porcelana ¡ªun complejo de 100.000 metros cuadrados situado en Tavernes Blanques, a cinco minutos de Valencia¡ª y de mandar. Daba ¨®rdenes a los directivos, supervisaba los acabados y conversaba con los trabajadores, con quienes manten¨ªa una relaci¨®n paternalista. Lo hizo hasta diciembre de 2016, cuando decidi¨® vender Lladr¨® al fondo espa?ol PHI.

Las legendarias desavenencias entre los hermanos fundadores, aireadas en libros y medios de comunicaci¨®n, hab¨ªan provocado la divisi¨®n del imperio empresarial una d¨¦cada antes. Juan se hab¨ªa quedado con el 70% de la divisi¨®n de porcelanas, mientras que Jos¨¦ y Vicente pasaban a controlar las vertientes agr¨ªcola e inmobiliaria del grupo.

Para entonces, la crisis de la compa?¨ªa de porcelanas era notoria. En alg¨²n momento entre finales de la d¨¦cada de los noventa y principios del siglo XXI, las delicadas figuras de Lladr¨® pasaron de moda, sobre todo en el mercado anglosaj¨®n, que era el que hab¨ªa impulsado la marca, a pesar de los intentos de la compa?¨ªa por diversificar el dise?o.

El crecimiento de las ventas en mercados como China, India y Rusia, donde el n¨²mero de ricos, su clientela natural, aumentaba, no compens¨® el declive en Occidente. En 2015, la empresa declar¨® p¨¦rdidas por 38 millones de euros y un inmenso stock de figuras sin vender, valorado en 30 millones m¨¢s.?

Familia de agricultores

La evoluci¨®n del negoci¨® oblig¨® a Lladr¨® a encadenar expedientes de regulaci¨®n de empleo. Algo especialmente doloroso para Juan, seg¨²n fuentes de su entorno, debido a la relaci¨®n personal que manten¨ªa con sus trabajadores, procedentes en su mayor¨ªa de los pueblos de la huerta del norte de la ciudad de Valencia donde hab¨ªa nacido ¨¦l mismo en 1926, en el seno de una familia de agricultores.

Las rencillas internas, trasladadas a la segunda generaci¨®n de la empresa familiar, y las discrepancias sobre el rumbo a tomar desencadenaron una sucesi¨®n de cambios en la direcci¨®n de la compa?¨ªa, zanjadas por el patriarca con la venta de la empresa.

Adem¨¢s de su visionaria trayectoria empresarial ¡ªLladr¨® fue una de las primeras compa?¨ªas espa?olas en desembarcar con ¨¦xito en Estados Unidos y lleg¨® a tener un museo de ocho plantas en el coraz¨®n de Manhattan¡ª, Juan fue uno de los impulsores del movimiento pol¨ªtico y cultural de corte regionalista y conservador que floreci¨® en Valencia despu¨¦s de la transici¨®n. En 2001 sucedi¨® al poeta Xavier Casp como decano de la Real Academia de Cultura Valenciana, una instituci¨®n enfrentada al consenso cient¨ªfico por su oposici¨®n a la unidad ling¨¹¨ªstica del catal¨¢n.

Su funeral tendr¨¢ lugar este domingo en el Tanatorio Municipal de Valencia.