Anticapitalistas y PP: juntos pero no revueltos
El reglamento del Parlament desdobla el Grupo Mixto y permite que los dos partidos tengan subgrupos
Las elecciones del 21 de diciembre depararon sorpresas y extra?as parejas: la CUP y el Partido Popular, en las ant¨ªpodas ideol¨®gicas, sufrieron un desplome de votos y esca?os que les impedir¨¢n en esta legislatura, reglamento en mano, disponer de un grupo parlamentario propio al tener menos de cinco diputados. La CUP ha pasado de 10 esca?os a cuatro ¡ªse qued¨® a 5.000 votos de pasar a siete¡ª y el PP, que ven¨ªa de tener 11, ara?¨® in extremis el cuatro diputado gracias al voto por correo. Los dos partidos, por tanto, est¨¢n condenados a figurar en el Grupo Mixto y a repartirse tiempo y subvenciones, pero el reglamento de la C¨¢mara permite los subgrupos dentro del Mixto y llevar una vida en paralelo de forma estable.
El reglamento del Parlament contempla desde hace a?os la existencia de esos subgrupos. La medida se aprob¨® despu¨¦s de que los resultados de las elecciones auton¨®micas de 2010, ganadas por Artur Mas, depararan tambi¨¦n un Grupo Mixto convulso: el partido independentista Solidaritat Catalana per la Independ¨¨ncia, de Joan Laporta, el expresidente del Bar?a, obtuvo cuatro diputados, mientras Albert Rivera, de Ciudadanos, repiti¨® sus tres esca?os. La norma introdujo entonces la posibilidad de crear esos subgrupos para ordenar el trabajo y los tr¨¢mites parlamentarios. Por tanto, tienen derecho a asistir con voz y voto a la junta de portavoces. Eso s¨ª: los dos subgrupos tendr¨¢n que consensuar el n¨²mero de diputados en comisiones; el tiempo de sus intervenciones y el n¨²mero de preguntas que formulen en las sesiones parlamentarias. Si no llegan a un acuerdo, la Mesa ser¨¢ quien fije la distribuci¨®n proporcional.
Las dos formaciones han visto reducidas dr¨¢sticamente sus subvenciones
Los resultados del 21 de diciembre arrojan cierta ventaja a los anticapitalistas respecto a los populares: los primeros lograron 193.352 votos ¡ªtres diputados por Barcelona y uno por Girona¡ª frente a los 184.108 del PP ¡ªtres por Barcelona y uno por Tarragona¡ª, convertido en el ¨²ltimo grupo de la C¨¢mara. Ninguno de los dos ha logrado parlamentario por Lleida. El Parlament tambi¨¦n penaliza a quien no obtiene grupo propio y sus ingresos se ver¨¢n considerablemente mermados: el PP recib¨ªa anualmente 1.334.000 euros y la CUP, 1.235.000. Ahora sus subvenciones se limitar¨¢n a unos 43.000 euros mensuales desglosados de esta forma: 10.000 euros por estar sujetos en el tramo entre uno y cuatro diputados y la subvenci¨®n mensual de 8.295 euros por cada parlamentario. Adem¨¢s, dejar¨¢n de percibir las partidas asignadas a los presidentes de grupo (2.885 euros). No habr¨¢ en este caso problema con los coches oficiales: el Parlament no los facilita desde hace tiempo.
Populares y anticapitalistas han acogido con resignaci¨®n circunspecta su nueva situaci¨®n. Como partidos menos votados de la C¨¢mara ¡ªen la ¨²ltima legislatura fueron quintos y sextos, respectivamente¡ª volver¨¢n a sentarse en la parte alta del hemiciclo. Y queda pendiente una duda: si alg¨²n grupo les dejar¨¢ un diputado para que puedan formar grupo propio. Ciudadanos ya rechaz¨®, cuando se les interpel¨® si barajaban esa posibilidad, prestar un parlamentario a los populares. Nadie del PP tampoco ha llamado a las puertas del PSC. La inc¨®gnita es si los grupos de Junts per Catalunya o Esquerra dar¨¢n ese paso para favorecer a la CUP y dejar al PP en el Grupo Mixto lo que, en la pr¨¢ctica, le permitir¨ªa actuar como grupo propio.
La duda es si la CUP aceptar¨ªa o no que otra formaci¨®n le ceda un diputado
Los anticapitalistas ya fueron reacios en 2012 a aceptar la propuesta de Iniciativa per Catalunya de cederles dos parlamentarios para que formaran grupo propio. Y no han recibido en ese sentido ninguna sugerencia. La CUP tiene previsto este s¨¢bado celebrar un consejo pol¨ªtico en el que analizar¨¢n los resultados electorales y su estrategia con vistas a la nueva legislatura, desde la investidura hasta su papel en la C¨¢mara. Miembros de Esquerra apuntan que ser¨ªa una mala noticia que se quedara sin grupo parlamentario. El reglamento en cualquier caso establece que en el caso de que un diputado preste sus votos a otro grupo que no es el suyo no puede despu¨¦s bajo ning¨²n concepto regresar al original. En caso de enfrentamiento, pasar¨ªa a ser diputado no adscrito.
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