Los cruceristas de Tarragona exigen tapas

Que no se quede ning¨²n crucerista con antojo de tapas. Es el objetivo que se ha marcado la C¨¢mara de Comercio de Tarragona, que ambiciona reavivar la abandonada ruta gastron¨®mica Tarragona dTapes para saciar el inter¨¦s comil¨®n de los turistas que llegan a la ciudad a bordo de alg¨²n crucero. Seg¨²n la Autoridad Portuaria, el a?o pasado 37 cruceros amarraron en el muelle de Tarragona y desembarcaron a 51.000 visitantes, un aumento del 284% con respecto a las cifras del 2016. El auge de este tipo de turismo genera un impacto econ¨®mico creciente en la ciudad y su zona de influencia: la Universitat Rovira i Virgili (URV) lo cifra en 3,9 millones de euros. En este contexto, la C¨¢mara de Comercio trata de consolidar un segmento de visitante que durante a?os estuvo muy olvidado. Laura Roig¨¦, recientemente aupada a la presidencia de la C¨¢mara, ha avanzado un plan para tratar de satisfacer la demanda de este turismo. Que nadie se marche con hambre. Italianos, brit¨¢nicos, franceses y norteamericanos son, junto con los espa?oles, los principales viajeros que desembarcan en Tarragona. Encontrar un lugar para comer es uno de los prop¨®sitos cuando pisan tierra firme y, en muchos casos, las tapas son lo m¨¢s solicitado... ?y no siempre est¨¢n disponibles!

Cuando el recientemente fallecido Albert Abell¨® era presidente de la C¨¢mara, se puso en marcha la Tarragona dTapes, una ruta que recorr¨ªa m¨¢s de cuarenta bares de la ciudad en los que se ofrec¨ªa bebida y tapa a precio m¨®dico, 2,5 euros. Los locales compet¨ªan entre ellos para cocinar la mejor tapa y el que resultaba mejor valorado, se llevaba un premio. La iniciativa fue un ¨¦xito, se llegaron a dispensar hasta 370.000 tapas, y pronto le sali¨® competencia. Estrella Damm promovi¨® otra ruta, la Tarraco Tapes, que termin¨® por colapsar la oferta y empujar a la desaparici¨®n a la Tarragona dTapes. Laura Roig¨¦ pone ahora de relieve que ser¨ªa interesante recuperar la ruta y centrarla en los viernes, el d¨ªa que la mayor¨ªa de los cruceros llegan a puerto. Se trata de lograr que, tras el atraque, llegue el atrac¨®n. Seg¨²n un estudio de la Autoridad portuaria, el turista que llega a Tarragona a bordo de un crucero tiene un perfil definido: la edad media est¨¢ entre los 35 y los 55 a?os y se gasta de 65 a 120 euros al d¨ªa. Los viajeros que s¨®lo hacen escala derrochan con m¨¢s moderaci¨®n pero, en cambio, el desembolso es m¨¢s alto entre quienes inician o finalizan su viaje en la ciudad. En este sentido, ha sido trascendental la decisi¨®n de la compa?¨ªa Costa Cruceros de escoger el puerto tarraconense como punto de partida de una de sus rutas por el Mediterr¨¢neo.

La C¨¢mara quiere aprovechar este impulso y consolidar un segmento de turismo que hasta hace cinco a?os apenas exist¨ªa. En 2013 y 2014 solo tres cruceros hicieron parada y fonda en Tarragona. Despu¨¦s de un 2017 de r¨¦cord, el sector de los cruceros volver¨¢ a crecer este 2018 en Tarragona. La previsi¨®n es alcanzar los 55 cruceros a lo largo de este a?o, un 49% m¨¢s que en 2017. En n¨²mero de pasajeros, se prev¨¦ un crecimiento de unos 30.000 visitantes.

Laura Roig¨¦ es la primera mujer que preside la C¨¢mara de Comercio de Tarragona en sus m¨¢s de 130 a?os de historia. Es, igualmente, la primera mujer en hacerlo en toda Catalu?a y la cuarta en Espa?a. Ha manifestado su deseo de que esta ¡°novedad¡± sea ¡°la normalidad¡±.

¡°En una entrevista, un periodista me pregunt¨® si, aparte de presumida y vanidosa, qu¨¦ objetivos ten¨ªa. Estoy segura de que eso jam¨¢s se lo habr¨ªa preguntado a un hombre¡±, se?al¨® como ejemplo del diferente trato que reciben las mujeres.