Portugal conquista los escenarios madrile?os

A mediados de los a?os noventa nacieron en Lisboa dos compa?¨ªas que se han convertido hoy en referentes en la escena contempor¨¢nea europea. Una, llamada Chapit?, es popular por su genio para reinterpretar los textos cl¨¢sicos y acercarlos al p¨²blico actual a trav¨¦s de un humor irreverente. La otra, Teatro Praga, destaca por su capacidad para inventar nuevos lenguajes y poner en cuesti¨®n cualquier convenci¨®n (social, est¨¦tica o art¨ªstica). Se da la feliz circunstancia de que ambas coinciden en Madrid en los pr¨®ximos d¨ªas: si alguien quiere saber hacia d¨®nde avanza el teatro portugu¨¦s, esta es una oportunidad ¨²nica.

La primera en aterrizar en la ciudad ser¨¢ la Companhia do Chapit?, bien conocida en Espa?a porque desde hace a?os realiza giras por toda la pen¨ªnsula Ib¨¦rica con sus particulares versiones de cl¨¢sicos como Macbeth, La tempestad y hasta Dr¨¢cula. El Festival de Oto?o a Primavera de la Comunidad de Madrid ha invitado ahora a este colectivo a rescatar uno de sus montajes m¨¢s celebrados, su adaptaci¨®n de la tragedia Edipo, que estrenaron en 2012, para presentarla en un ciclo junto a su Electra, otro gran personaje de la mitolog¨ªa griega, espect¨¢culo con el que Chapit? celebr¨® en 2016 su 20 aniversario. Ambas obras se ver¨¢n por primera vez en Madrid, en la sala Cuarta Pared, la primera desde esta noche hasta el domingo y la segunda el pr¨®ximo fin de semana.

Chapit? emplea siempre la comedia para deconstruir el mensaje de los textos cl¨¢sicos. Ah¨ª est¨¢ la clave de su ¨¦xito y la raz¨®n por la cual el p¨²blico logra identificarse con personajes tan lejanos como Edipo o Electra. Suelen trabajar en escenarios desnudos y vestidos con indumentaria de calle, sin disfraces ni ornamentos que los distancien de los espectadores. Para ellos, el teatro es una herramienta de socializaci¨®n.

Su Edipo, por ejemplo, incide en lo absurdo del concepto de destino y repasa con hilaridad la sucesi¨®n de infortunios, desdichas, confusiones y fatalidades que sufre el h¨¦roe tr¨¢gico: parricidio, incesto, duelos, destierro. ?Es Edipo el marido de su propia madre o el hijo de su mujer? Y sus hijos, ?ser¨ªan ellos tambi¨¦n sus hermanos, hijos de su mujer o ser¨ªa su mujer la abuela de sus propios hijos? En el caso de Electra, la compa?¨ªa elabora una sofisticada parodia su tr¨¢gica historia: la hija que mata a su madre para vengar el asesinato de su padre.

La compa?¨ªa Teatro Praga, por su parte, presentar¨¢ el pr¨®ximo fin de semana en las Naves Matadero su espect¨¢culo Despertar de primavera, elegido por la cr¨ªtica como uno de los cinco mejores montajes que se estrenaron en Portugal la temporada pasada. Antes el colectivo ofrecer¨¢ una conferencia e impartir¨¢ un taller de lunes a viernes en ese mismo escenario. Es la primera vez que Teatro Praga act¨²a en Madrid y solo hab¨ªa estado antes una vez en Espa?a, en 2011, cuando particip¨® en Salamanca en la Feria de Teatro de Castilla y Le¨®n con su versi¨®n de El sue?o de una noche de verano, de Shakespeare.

Escrita en 1891 por el dramaturgo alem¨¢n Frank Wedekind, Despertar de primavera escandaliz¨® a la sociedad de su ¨¦poca por abordar escenas con tem¨¢tica homoer¨®tica y en las que se abordan pr¨¢cticas como la masturbaci¨®n y el sadomasoquismo. Protagonizada por un grupo de adolescentes en conflicto con una sociedad conservadora y moralista, la obra sirve ahora a Teatro Praga para desenmascarar algunas de aquellas dictaduras que perduran en el siglo actual, como las identidades de g¨¦nero (hombre y mujer, homosexual y heterosexual) o la identidad que establece la lengua. Por ello, para poner en cuesti¨®n esas identidates, en la traducci¨®n del texto, el dramaturgo Jos¨¦ Maria Vieira Mendes ide¨® un lenguaje ¨²nico, repleto de palabras de diferentes or¨ªgenes. que intenta mantenerse en la versi¨®n espa?ola que se ofrece en los sobret¨ªtulos. ¡°Es el lenguaje de una generaci¨®n que crece bajo la luz artificial, ante pantallas de plasma y entre la mara?a del universo digital, que nos habla sin titubeos de la invasi¨®n del mundo globalizado¡±, explica la compa?¨ªa en su programa de mano.

La traducci¨®n al castellano que se ofrecer¨¢ al p¨²blico madrile?o (en sobret¨ªtulos) respeta ese particular lenguaje usando palabras que ya han quedado antiguas, giros gramaticales, cambios sint¨¢cticos o palabras inventadas, mezcla del castellano y el ingl¨¦s.