Entidades y alcaldes cuestionan el presupuesto de Rajoy para carreteras

Era la gran apuesta del Gobierno para calmar los ¨¢nimos en Catalu?a, anunciada a bombo y platillo hace un a?o: aumentar la inversi¨®n en infraestructuras catalanas y llegar hasta los 4.200 millones en tres a?os. Con el proyecto de los presupuestos de 2018, presentado por el Partido Popular en el Congreso la semana pasada, el Ejecutivo de Mariano Rajoy defiende que se est¨¢ avanzando en esa direcci¨®n. El presupuesto de Fomento para Catalu?a aumenta un 16,7%, hasta los 1.244 millones de euros, un incremento cuya efectividad cuestionan tanto los alcaldes como muchas entidades del territorio.

En el ¨¢mbito de las carreteras la aportaci¨®n aumenta seis millones, hasta los 221 millones. Sin embargo, entidades y Ayuntamientos lamentan que las cuentas todav¨ªa olvidan algunas de las obras p¨²blicas m¨¢s esperadas y muchas veces retrasadas, como la variante de Vallirana de la N-340 o la autov¨ªa A-27.

En el ¨¢mbito de las carreteras catalanas hay una serie de proyectos que llevan a?os estancados, con obras paralizadas o que avanzan muy lentamente: la N-II en Girona, la A-27 en Montblanc, las carreteras N-240 y 340, la autov¨ªa de la Vall d'Aran o la B-40, el Cuarto Cintur¨®n, son algunos de estos proyectos. Para uno de ellos, la variante de Vallirana de la N-340, los vecinos llevan 30 a?os esperando. La N-340 es percibida en Vallirana como una fractura: cruza el pueblo por completo, siempre est¨¢ saturada de veh¨ªculos, muchos de ellos camiones que forman largas colas, e implica un riesgo para la seguridad, ya que los coches tienen que disminuir la velocidad de forma dr¨¢stica. Adem¨¢s, hasta hace poco tiempo casi no hab¨ªa sem¨¢foros.

¡°Es un riesgo permanente, ya cuando yo era peque?o la aventura empezaba cuando tus padres te dejaban cruzar la carretera¡±, explica Toni Garc¨ªa, de 58 a?os, miembro de la comisi¨®n de seguimiento de las obras de la variante de Vallirana. Esta comisi¨®n recoge las reivindicaciones de los vecinos que reclaman que la N-340 rodee el municipio en lugar de cruzarlo por el medio, por donde pasan unos 32.000 veh¨ªculos cada d¨ªa. Despu¨¦s de a?os de protesta, las reivindicaciones se relajaron cuando el cercano municipio de Cervell¨® consigui¨® una variante en 2003, tras solo tres a?os de espera.

Los vecinos de Vallirana creyeron que quedaba poco para que se construyera otra variante, esta vez en su pueblo. Pero las comparaciones son odiosas: las obras empezaron en 2004, se paralizaron en varias ocasiones debido a problemas t¨¦cnicos o a la crisis econ¨®mica, y el plazo para terminarlas se ha retrasado en incontables ocasiones. La ¨²ltima, la exministra de Fomento Ana Pastor asegur¨® que la variante estar¨ªa completada en 2017. Pero los presupuestos presentados esta semana ampl¨ªan el plazo hasta 2019, y la partida para este a?o es de 24,2 millones de euros, 7,5 millones menos de lo previsto, seg¨²n ha denunciado el Ayuntamiento de Vallirana.

Obras menores

¡°Es una decepci¨®n m¨¢s en un sue?o que parece eterno¡±, se queja Garc¨ªa, que recuerda que la reivindicaci¨®n del pueblo lleg¨® a discutirse en el senado gracias a la intervenci¨®n del senador y exconseller Josep Llu¨ªs Cleries, vecino de Vallirana. En un comunicado, el Consistorio reclama que se terminen las obras y lamenta que estas no se hayan incluido en el acuerdo entre Generalitat y Gobierno central para desviar los camiones de la N-340 hacia la AP-7. El delegado del Gobierno en Catalu?a, Enric Millo, destac¨® esta semana que los presupuestos reflejan que la seguridad en las accidentadas N-240 y 340 es ¡°una prioridad¡±, aunque solo anuncian mejoras en las intersecciones, accesos y glorietas. Adem¨¢s, el Ministerio todav¨ªa no ha puesto fecha al desv¨ªo de camiones a la autopista AP-7.