El esprint final de Colau

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, afronta el esprint final de su mandato. Faltan nueve meses para las elecciones de mayo de 2019 y las carpetas de los concejales est¨¢n llenas de temas por cerrar. Unos deberes necesarios para vender obra de gobierno que deber¨¢n ejecutar con la inc¨®gnita de si se ver¨¢n afectados por los ajustes presupuestarios que prepara el ejecutivo. Nueve meses, adem¨¢s, en los que arreciar¨¢ la presi¨®n por parte de la oposici¨®n y en los que, como todos, Barcelona en com¨² tendr¨¢ que prepararse para las elecciones: programa, lista, etc. Hace una semana, en su cuenta de Instagram, Colau escrib¨ªa: ¡°Preparada para un curso que promete ser #telamarinera #todoscontracolau¡±. Las que siguen son algunas de las principales carpetas pendientes.

El presupuesto de 2019. En una situaci¨®n ins¨®lita, Colau ha aprobado los dos ¨²ltimos presupuestos por cuesti¨®n de confianza. En vistas a las de 2019, es tan previsible que el gobierno de Barcelona en com¨² presente un proyecto de presupuestos como que le resulte imposible aprobarlo. Le quedar¨¢ la posibilidad de prorrogar las cuentas de 2018.

Vivienda. La lucha por el derecho a la vivienda fue la principal baza electoral de Colau y la prioridad de su gesti¨®n. La alcaldesa ha reactivado la maquinaria del antiguo patronato municipal para construir pisos, pero los resultados todav¨ªa no se ver¨¢n, porque habr¨¢ 3.000 en obras, licitadas o en proyecto. Mientras, Colau ha comprado pisos a los bancos o ha hecho contratos de cesi¨®n como nunca. En teor¨ªa s¨ª deber¨ªa haber terminado los tres primeros proyectos de viviendas prefabricadas (92 en total), construidas en contenedores, los APROP. Y antes de finales de este a?o el AMB deber¨ªa haber elegido el socio privado para la sociedad mixta que construir¨¢ vivienda de alquiler.

El contrato de la recogida de basura y la limpieza viaria. Colau sigue sin encontrar consenso pol¨ªtico para aprobar en el pleno el mayor contrato que se licita en el Ayuntamiento, el de la limpieza viaria y la recogida de la basura, que se lleva m¨¢s del 10% del presupuesto anual. El pliego de condiciones prev¨¦ novedades importantes, como premiar a las familias que m¨¢s reciclen, extender la recogida puerta a puerta a barrios de trama urbana antigua (ya se hace en Sarri¨¤) y un mayor control p¨²blico para evitar irregularidades.

Definir los usos de la antigua c¨¢rcel Modelo. Tras su cierre en junio de 2017, la antigua c¨¢rcel es de titularidad municipal desde el pasado 1 de enero. El Ayuntamiento ya ha dejado claro que las obras no comenzar¨¢n antes de que acabe este mandato (ser¨¢ en 2020), pero tiene pendiente concretar, tras el proceso participativo, sus nuevos usos. La cuesti¨®n m¨¢s dif¨ªcil de decidir es si se derriban brazos del recinto y cu¨¢les; y tramitar (para lo que se requiere apoyo pol¨ªtico) la modificaci¨®n del planeamiento para recalificar una parte del suelo para hacer pisos sociales.

La Rambla. La arquitecta y exconcejal de Ciutat Vella Itziar Gonz¨¢lez, al frente del equipo km-ZERO, acaba de entregar el documento de estrategias para la v¨ªa y el anteproyecto. La premisa es que la Rambla vuelva a ser un paseo para los barceloneses. En oto?o de 2018, deber¨¢ estar terminado el proyecto ejecutivo para que las obras comiencen a principios de 2019.

Plan de barrios. Es uno de los proyectos m¨¢s ambiciosos del mandato de Colau: una inversi¨®n de 150 millones de euros en los barrios con menor renta de la ciudad. El plan fija para cada barrio media docena de proyectos tractor, para que impacten en el entorno. Darle la vuelta a una escuela para que el barrio se la sienta suya, a un comedor que es referente, dignificar un trozo de parque abandonado¡­ Y tambi¨¦n prev¨¦ obras. En octubre y noviembre est¨¢ previsto que comiencen muchas de estas obras. Y a las que no se llegue (Can 60 en el Raval, El Bors¨ª) la idea es dejar a punto los proyectos.

La renta b¨¢sica y la moneda. Barcelona consigui¨® fondos europeos para ensayar una renta ciudadana. Un proyecto que en la ciudad se llama B-Mincome y en el que mil familias de los barrios del Bes¨°s comenzaron a recibir en mayor pasado una media de 568 euros al mes. La recibir¨¢n durante dos a?os con distintos condicionantes (seguir un itinerario de formaci¨®n, laboral, etc.) que permitan evaluar su impacto. Estas familias, adem¨¢s, ser¨¢n las primeras en utilizar la moneda ciudadana de Barcelona, el REC, con la idea de que comience a circular en el peque?o comercio de sus barrios. Su puesta en marcha, con todo, lleva cuatro meses de retraso.