?Gasta demasiado un ayuntamiento con un super¨¢vit de 1.000 millones?

Habitualmente, cualquier cargo electo se queja de la carencia de medios financieros de la Administraci¨®n en la que sirve y reclama, constantemente, un aumento de los fondos que gestiona. En el Ayuntamiento de Madrid, sin embargo, nos encontramos en una peculiar¨ªsima situaci¨®n que se resume en que no se nos permite gastar los ingresos que ya tenemos. No solicitamos mayor financiaci¨®n a nadie (ni un euro), simplemente pedimos que nos dejen emplear nuestros propios recursos para mejorar los servicios a la ciudadan¨ªa.

En efecto, la ciudad de Madrid cerr¨® el ejercicio 2017 con una capacidad de financiaci¨®n de 1.057 millones de euros. No se trata de un escenario puntual o coyuntural, sino que ha sido el cuarto ejercicio consecutivo que se cierra con una capacidad de financiaci¨®n por encima de los 1.000 millones de euros. Esta envidiable e inaudita situaci¨®n financiera contrasta con la necesidad de financiaci¨®n de 1.043 millones de euros con la que la Comunidad de Madrid concluy¨® el mismo ejercicio presupuestario o con los m¨¢s de 22.000 millones de euros de d¨¦ficit que present¨® la Administraci¨®n Central.

No solamente somos la Administraci¨®n local con el super¨¢vit m¨¢s alto de Espa?a, sino que tambi¨¦n hemos rebajado nuestra deuda a un ritmo vertiginoso. Veamos los datos: de 2014 a 2017 el Ayuntamiento de Madrid disminuy¨® su deuda viva en un 43%; en ese mismo periodo la Comunidad de Madrid la aument¨® en un 29% y la Administraci¨®n Central la increment¨® en un 12%. La reducci¨®n del pasivo de nuestra ciudad est¨¢ siendo tan intensa que, de seguir as¨ª, en 2019 ya no podremos continuar amortizando anticipadamente deuda, so pena de incurrir en ahorros negativos.

Pues bien, ante esta situaci¨®n en la que la capacidad de financiaci¨®n supone casi un tercio del gasto no financiero total, cualquier ciudadano leg¨ªtimamente puede preguntarnos, al menos, dos cosas: ?por qu¨¦ no bajamos los impuestos o por qu¨¦ no gastamos m¨¢s?

En cuanto a lo primero, con el actual dise?o de la regla de gasto, una bajada de impuestos implica autom¨¢ticamente, y por el mismo importe, una disminuci¨®n del techo de gasto no financiero. Es decir, si en la actualidad nos permiten llegar a un gasto de aproximadamente 3.600 millones y decidi¨¦semos bajar los impuestos por un importe de 500 millones, significar¨ªa que nuestro techo de gasto disminuir¨ªa hasta 3.100 millones y, en consecuencia, tendr¨ªamos que recortar gastos por valor de 500 millones, lo que nos llevar¨ªa, de nuevo, a un super¨¢vit de 1.000 millones. Esto es, tendr¨ªamos el mismo super¨¢vit y habr¨ªamos tenido que llevar a cabo importantes recortes.

Respecto de lo segundo, los proyectos de modernizaci¨®n de nuestra ciudad y de mejora de los servicios p¨²blicos que queremos llevar a cabo se enfrentan, cada d¨ªa, con la implacable regla de gasto que, en la interpretaci¨®n que se ha dado en el actual Plan Econ¨®mico Financiero que afecta al Ayuntamiento, implica que la capital debe reducir sus gastos en aproximadamente 63 millones de euros respecto de lo realmente gastado en 2017. Esto es, a la Administraci¨®n con la mayor capacidad de financiaci¨®n de toda Espa?a (m¨¢s de 1.057 millones de euros) no solo no se le permite incrementar ni un c¨¦ntimo su gasto, sino que se le obliga a reducirlo en 63 millones. Evidentemente, esto es un sinsentido jur¨ªdico y econ¨®mico que no se puede aceptar.

Un ¨²ltimo dato: seg¨²n la AIReF (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal espa?ola, organismo independiente de control fiscal), la ciudad de Madrid present¨® un gasto no financiero per c¨¢pita de 1.080 euros, mientras que en Barcelona la cifra alcanz¨® los 1.549 euros (a¨²n por debajo, por cierto, de los 1.570 euros de Bilbao). Esto significa que el gasto no financiero per c¨¢pita de Barcelona fue en 2017 m¨¢s de un 43% superior al de Madrid, lo que ilustra claramente la necesidad de incremento de gasto que tiene la capital de Espa?a.

No se trata de gastar por gastar, sino de utilizar los ingresos p¨²blicos para crear m¨¢s empleo, reequilibrar el territorio y proteger a los m¨¢s vulnerables. Esto es todo lo que pedimos: un trato justo para la ciudadan¨ªa madrile?a.

Jorge Garc¨ªa Casta?o, Delegado de Econom¨ªa y Hacienda del Ayuntamiento de Madrid