Carmena lleva m¨¢s polic¨ªa a cinco distritos para calmar a los vecinos

El incremento consistir¨¢ en una mayor presencia, con puntos fijos, de coches patrulla de la Polic¨ªa Municipal, adem¨¢s de vigilancia a pie y en motos. Los agentes de los distritos afectados se ver¨¢n reforzados por la presencia de gu¨ªas caninos y sus perros, polic¨ªas a caballo y la Unidad de Apoyo a la Seguridad (UAS, los antidisturbios del cuerpo). Estos funcionarios no atender¨¢n las llamadas de la sala del 092 para que se centren en labores de vigilancia. ¡°Madrid es una ciudad segura, pero necesitamos incrementar la presencia policial en determinados puntos¡±, reconoci¨® el concejal de Seguridad, Javier Barbero.

?Los barrios han sido elegidos tras analizar los datos de delitos e incidentes, con las quejas de los vecinos afectados y tras reunirse con los colectivos de vecinos y la Federaci¨®n Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM). Seg¨²n Barbero, se busca reducir la delincuencia en estas zonas para evitar robos, agresiones, los narcopisos, adem¨¢s de mejorar la convivencia en estas zonas, como las denuncias por infracciones de limpieza. ¡°Se ha hecho un trabajo muy a fondo de planificaci¨®n y de diagn¨®stico¡±, destac¨® el edil de Seguridad.

Los mandos policiales creen que es imposible cumplir con este objetivo, ya que no hay m¨¢s agentes suficientes para destinarlos a puntos fijos o para patrullar a pie. ¡°Los refuerzos de los que nos hablan significa que como mucho habr¨¢ ocho polic¨ªas m¨¢s de la UAS por turno para hacer controles en los cinco distritos por turno. ?Qu¨¦ van a estar 20 minutos en una zona para luego irse a otra? Ni siquiera llegar¨¢n a todos los barrios¡±, se preguntaba un mando policial. ¡°Si tenemos a los caballos y a los perros en un distrito, l¨®gicamente no van a poder estar en los cuatro restantes. Las plantillas no son de goma ni se pueden estirar al antojo de los pol¨ªticos¡±, a?ade otro mando.

Los mandos tambi¨¦n discrepan de este an¨¢lisis, ya que las zonas elegidas no son las que tienen mayor n¨²mero de llamadas o de quejas vecinales. ¡°Dicen que va a haber puntos fijos con patrullas. Ya nos pueden explicar c¨®mo lo vamos a hacer porque muchas veces no tenemos ni patrullas suficientes para atender los comunicados que van saliendo por la emisora¡±, se quejaban los responsables policiales. Otro problema es que, si se colocan a agentes en puntos fijos, se corre el riesgo de abandonar otras zonas del distrito. ¡°Es como vestir un santo para desvestir a otro¡±, explica gr¨¢ficamente otro mando. ¡°Se trata m¨¢s de una presencia para que el ciudadano vea que estamos en determinados puntos, como ya ha ocurrido en Puente de Vallecas, que de un trabajo efectivo que vaya a reducir la delincuencia¡±, afirma un mando con gran experiencia en el cuerpo. Algunos acudieron con rostro serio y esc¨¦ptico a la presentaci¨®n de Carmena.

Los barrios afectados pueden variar una vez que concluya el refuerzo de la vigilancia, seg¨²n inform¨® el comisario principal de la Polic¨ªa Municipal, Teodoro P¨¦rez. ¡°No se trata tanto de un problema de seguridad objetiva, sino de la seguridad subjetiva, lo que sienten los ciudadanos. La presencia policial disuade a los delincuentes y tranquiliza a los vecinos¡±, destac¨® P¨¦rez. Este reconoci¨® que este refuerzo supone ¡°un gran esfuerzo¡± para el cuerpo, ya que el n¨²mero de efectivos (unos 6.100 agentes) son los mismos y se deben destinar a cubrir todos los servicios. Este peri¨®dico solicit¨® al Ayuntamiento, sin ¨¦xito, que se facilitara el n¨²mero de agentes destinados a cada distrito.

Alberto Cid, del Colectivo Profesional de Polic¨ªa Municipal (CPPM, el sindicato mayoritario del cuerpo), calific¨® de ¡°fatal¡± la medida porque se est¨¢n aumentando los servicios, sin que se incremente la plantilla. ¡°Al final van a conseguir que no podamos conciliar, ni librar y que los polic¨ªas acaben reventados de tanto trabajo¡±, critic¨® Cid.