Medio Ambiente no aclara el futuro de los montes de utilidad p¨²blica de Cercedilla y Navacerrada

El consejero de Medio Ambiente y Ordenaci¨®n del Territorio de la Comunidad de Madrid, Carlos Izquierdo, mantiene la partida de ajedrez en tablas sobre el caso de la concesi¨®n de los montes de utilidad p¨²blica en Cercedilla y Navacerrada que caducan en abril de 2019. Por ahora, nada nuevo. Izquierdo se ha presentado en la comisi¨®n de Medio Ambiente y ha contado lo que ya se sab¨ªa, que la Comunidad de Madrid est¨¢ intentando llegar a un acuerdo con todas las partes. As¨ª lo ha expuesto el consejero durante su comparecencia a petici¨®n del Grupo Parlamentario de Podemos, donde la diputada de la formaci¨®n Laura D¨ªaz ha tachado de ¡°incontestable que las condiciones de la ocupaci¨®n de los montes de utilidad p¨²blica para la construcci¨®n de sanatorios de altura fueran incumplidas por la concesionaria¡± y que se haya especulado y vendido por parcelas y los terrenos para lujosos chal¨¦s y otros abandonados por Navacerrada.

¡°Es necesario elaborar un estudio completo de la situaci¨®n real existente en el momento en el que caduca la ocupaci¨®n, desde el punto de vista ambiental como desde el punto de vista legal. Medioambientalmente porque los terrenos est¨¢n afectados por varias normativas, muchas de ellas relacionadas con el parque de la sierra del Guadarrama. Y legalmente porque hay que estudiar detenidamente qu¨¦ obligaciones tiene el titular, en qu¨¦ situaci¨®n jur¨ªdica se encuentran las titularidades derivadas de las cesiones, transmisiones de derechos o transacciones que afecten a la propiedad¡±, ha explicado el consejero medioambiental, Izquierdo.

¡°Por otra parte, hay que tener en cuenta que por su car¨¢cter de utilidad p¨²blica estos montes est¨¢n gestionados por la Comunidad de Madrid, pero se tratan de montes de titularidad municipal. Quiero decir con esto que cuando caduque el plazo de la ocupaci¨®n, la propiedad de los terrenos y de todo lo construido sobre ellos pasar¨¢ autom¨¢ticamente a ser propiedad de los ayuntamientos de Cercedilla y Navacerrada, y esto nos obliga a tener constantes reuniones con dichos ayuntamientos. Tambi¨¦n es necesario inventariar la situaci¨®n actual de los terrenos y analizar los condicionantes establecidos por la normativa ambiental para poder valorar las posibilidades de su restauraci¨®n paisaj¨ªstica y ambiental. En resumen, creo que es entendible que debido a la gran dificultad jur¨ªdica, social y econ¨®mica de las posibles soluciones este tema se est¨¢ estudiando cuidadosamente, valorando las distintas opciones y vi¨¦ndolo con los ayuntamientos afectados¡±.

Tanto Podemos, como PSOE y Ciudadanos han pedido al consejero de Medio Ambiente que especifique cu¨¢les son esas opciones para poder valorarlas. ¡°Igual estamos de acuerdo, pero necesitamos saber qu¨¦ se est¨¢ barajando, tanto nosotros como parlamentarios, como los Ayuntamientos implicados y los ciudadanos afectados¡±, se ha quejado el socialista Rafael G¨®mez Montoya. Por su parte, tanto el diputado de Ciudadanos, Enrique Veloso, como la de Podemos, Laura D¨ªez, han hecho un recorrido hist¨®rico bas¨¢ndose en un expediente de 1.000 p¨¢ginas sobre el conflicto para tratar de desgranar los detalles de la especulaci¨®n urban¨ªstica en la zona de Camorritos y el puerto de Navacerrada.

¡°Cuando la sociedad del ferrocarril solicita la ocupaci¨®n de 85,5 hect¨¢reas, esta vez dirigida a la construcci¨®n de sanatorios de altura, localizados en el paraje de Camorritos y complementados con edificaciones de mayor altura en el puerto de Navacerrada, se esgrim¨ªa como argumento las razones de salud p¨²blica. Era el inicio de un proyecto urbanizador. Y se le dio el visto bueno. Fij¨¢ndose una indemnizaci¨®n total para ambos ayuntamientos de 22.922 pesetas de aquella ¨¦poca. Una vez concedida la ocupaci¨®n, solicit¨® que con una inversi¨®n de 30 millones de pesetas se puedan ceder parcelas a particulares, para que ellos mismos construyan sus chal¨¦s, obteniendo as¨ª esta empresa un importante beneficio¡±, ha narrado Veloso.

¡°Todo ello fue aceptado por una real orden en 1921. As¨ª pues la v¨ªa urbanizadora quedaba abierta y con unas perspectivas de negocio altamente remuneradoras para la sociedad concesionaria. Y esto es lo que motiv¨® dos intentos de anulaci¨®n por parte de los Ayuntamientos. El primero fue en los a?os 30, tras un conflicto entre los Ayuntamientos y la sociedad el¨¦ctrica del Guadarrama. Los Ayuntamientos solicitaron la anulaci¨®n de la concesi¨®n y la reversi¨®n de los terrenos, ya que todav¨ªa no se hab¨ªa construido ning¨²n sanatorio, y solo se hab¨ªan cedido terrenos a terceros. Esta compa?¨ªa aleg¨® que hab¨ªan construido ya la l¨ªnea de ferrocarril, un hotel y el club alpino espa?ol, y que para la construcci¨®n de los sanatorios la concesi¨®n no fijaba ning¨²n plazo, para la finalizaci¨®n de esas obras, por lo que todo era leg¨ªtimo y legal¡±, desgrana. ¡°El segundo intento fue en 1944 cuando pretendieron la anulaci¨®n de la concesi¨®n, argumentando que la beneficiaria de la ocupaci¨®n nunca tuvo como objetivo acometer la construcci¨®n de una ciudad sanitaria sino ¨²nica y exclusivamente conseguir una brutal plusval¨ªa, puesto que adquiri¨® por 3 c¨¦ntimos por metro cuadrado los terrenos, para luego venderlos a 8 pesetas por metro cuadrado de aquella ¨¦poca. Los problemas terminaron, eso s¨ª, con la incorporaci¨®n de estos Ayuntamientos al proceso especulativo. Mediante un convenio en 1946, en virtud del cual la compa?¨ªa el¨¦ctrica del Guadarrama, el Ayuntamiento de Cercedilla y de Navacerrada firman y por el que la compa?¨ªa deber¨¢ abonar a esos Ayuntamientos dos pesetas por cada metro cuadrado de superficie que a partir de ese momento se vendiera de las 60 hect¨¢reas que se calcul¨® que todav¨ªa faltaban sin transmitir. As¨ª todos eran beneficiarios directos de la promoci¨®n inmobiliaria, con lo cual esas quejas ya no se volvieron a producir¡±.

¡°En esos expedientes de casi 1.000 p¨¢ginas que nos han hecho llegar hay documentos que parecen cap¨ªtulos del ¨²ltimo exponente de la novela picaresca, que no es que hayan pasado 100 a?os, es que parece que seguimos en el a?o 1.554¡±, a?ade D¨ªez, que adem¨¢s de de los cap¨ªtulos de 1930 y de 1944, se fija en otro m¨¢s reciente. ¡°El 13 de mayo de 1981, se recibe un escrito en Al ayuntamiento de Cercedilla en el que la sociedad del ferrocarril el¨¦ctrico del Guadarrama propone la cesi¨®n al Ayuntamiento de 75.151 metros cuadrados de terreno de los montes de utilidad p¨²blica a cambio de que el ayuntamiento acceda a realizar las obras de infraestructura de alcantarillado de la zona de Camorritos. El escrito da lugar a un largu¨ªsimo debate en el pleno el 16 de junio de 1981 en el que uno de los concejales, el se?or Espinosa L¨¢zaro, hace hincapi¨¦ en que parte de los terrenos que la sociedad dice querer ceder, no son propiedad de tal sociedad, y a?ade que deber¨ªa rechazarse de plano la propuesta de la sociedad ya que sigue creyendo que tales terrenos que quiere ceder al Ayuntamiento son ya del Ayuntamiento y no pueden ser cedidos por nadie a quien es ya su propietario¡±, recuerda D¨ªez.

¡°Y as¨ª llegamos hasta este momento, en el que nos hemos enterado por la prensa que hasta hay bancos intentando vender locales cuando quedan meses para que caduque la concesi¨®n¡±.

¡°No podemos mirar el pasado con las gafas del presente¡±, ha respondido Izquierdo. ¡°De la misma manera que hace a?os pod¨ªamos ir en coche sin el cintur¨®n de seguridad y no pasaba nada, ahora ni se nos ocurre¡±, ha continuado. Izquierdo ha expuesto que la Comunidad quiere la restauraci¨®n forestal de todo el entorno de la sierra, y su recuperaci¨®n paisaj¨ªstica y ambiental y que, por ello est¨¢n trabajando con Adif para la resoluci¨®n de la concesi¨®n del ferrocarril. ¡°Lo que queremos es reordenar territorialmente pero buscando un acuerdo entre todas las partes y la recuperaci¨®n paisaj¨ªstica y medioambiental del parque¡±, ha concluido.