¡°Hoy en d¨ªa no es m¨¢s seguro estudiar una ingenier¨ªa que dedicarte al circo¡±
Zenaida Alcalde, cirquera y trapecista, da clases de t¨¦cnicas a¨¦reas desde hace una d¨¦cada en la escuela de circo Carampa, en plena Casa de Campo, una de las tres instalaciones de referencia en Espa?a
Zenaida Alcalde (Madrid, 1981) no para de dar ¨®rdenes a sus alumnos subida al trapecio. Esta cirquera y trapecista da clases desde hace una d¨¦cada en la escuela de circo Carampa, en plena Casa de Campo. Las instalaciones son una cantera de referencia en Espa?a. Alcalde, que emigr¨® a Londres para completar sus estudios, fund¨® una compa?¨ªa junto a su pareja antes de la crisis, regres¨® a la capital y desde 2014 tambi¨¦n es docente en la universidad. "En Reino Unido hab¨ªa m¨¢s oportunidades laborales, pero no me gustaba. Aqu¨ª, a la gente le cuesta m¨¢s abrir la mente a la hora de ver circo", asegura.
?Siempre quiso dedicarse a esto?
Llegu¨¦ por casualidad. Quer¨ªa ser actriz y por eso me met¨ª en la escuela de teatro, lo que pasa es que all¨ª hab¨ªa un profesor de Carampa, Vasili, que iba a darnos una clase a la semana sobre circo en general. Ah¨ª es cuando me empez¨® a llamar la atenci¨®n este mundo y pens¨¦ que me vendr¨ªa bien en mi aprendizaje como actriz estudiar un a?o de circo. Me encant¨® la parte f¨ªsica y creativa, debido a que en la escuela de teatro te daban un papel ya definido y era todo m¨¢s encorsetado. Vi una nueva posibilidad. Tiempo despu¨¦s, en Londres, tambi¨¦n ten¨ªan una rama de circo dentro del teatro, justo lo que yo quer¨ªa.
?Por qu¨¦ se especializ¨® como trapecista?
Me encantaba la adrenalina y a la vez me daba mucho miedo. Era como una relaci¨®n amor-odio. En esa mezcla rara me termin¨¦ enganchando y eso que he sido bastante miedosa con las alturas, pero era lo que m¨¢s me llamaba la atenci¨®n.
Y de formarse como cirquera a abrazar la ense?anza. ?Dar clase le llena m¨¢s que estar en el aire?
Lo que m¨¢s me gusta es actuar. Dar clases me encanta, pero creo que una actividad alimenta a la otra. Como me apasiona tanto actuar, me gusta compartir esa pasi¨®n con los alumnos y recordarles el porqu¨¦ hacen lo que hacen. Ahora los veo muy agobiados, como estamos todos hoy en d¨ªa, m¨¢s que en mi ¨¦poca de adolescente donde viv¨ªamos m¨¢s tranquilos y no hab¨ªa tanta presi¨®n. Eso ha cambiado mucho con Internet y no paran de ver v¨ªdeos, compararse con otros y darle demasiadas vueltas a qu¨¦ van a hacer en el futuro.
?C¨®mo consigue calmarlos?
Les digo que est¨¦n tranquilos y les comento que esa gente que ven en sus m¨®viles no ha conseguido formarse de un d¨ªa para otro. Todo necesita un proceso y dedicarle mucho tiempo, sino cualquiera podr¨ªa hacerlo.
Qu¨¦ le dir¨ªa a un adolescente que se siente atra¨ªdo a estudiar este arte
Siempre he pensado que solo se vive una vez y por eso hay que arriesgar. Hoy en d¨ªa, no es m¨¢s seguro estudiar una ingenier¨ªa que dedicarte al circo. Cuando yo eleg¨ª formarme en esto, amigos y familiares me dec¨ªan: 'est¨¢s loca, no vas a ganar dinero y va a ser un desastre, coge algo seguro y luego ya veremos'. Yo siempre lo tuve claro y vivo de ello. Tengo amigos que lo han pasado peor yendo a la universidad. Uno debe hacer lo que m¨¢s le llene en la vida.
?Se desconoce todo el trabajo que implica dedicarse en cuerpo y alma al circo?
Desde luego. Nuestros alumnos trabajan ocho horas todos los d¨ªas durante dos a?os: dan malabares, equilibrios, clown, maquillaje, clases de anatom¨ªa... Los fines de semana tambi¨¦n tienen pr¨¢cticas, montan y desmontan estructuras... te tiene que gustar mucho para aguantar. En junio y julio hacen una gira por el pa¨ªs con una pieza de circo junto a un director para que tengan la experiencia de un espect¨¢culo real. En segundo a?o, cada uno hace un cabar¨¦ para presentar su n¨²mero, que es su carta de presentaci¨®n.
Este a?o, un gran n¨²mero de alumnos son mujeres, ?algo est¨¢ cambiando?
Pura coincidencia. Hace tiempo, las mujeres se interesaban m¨¢s por los a¨¦reos que los hombres, aunque la tendencia est¨¢ cambiando. Las acrobacias con el trapecio volante estaban m¨¢s ligadas a los hombres, mientras que las mujeres se dedicaban a hacer figuras bonitas o de contorsi¨®n. Ahora, en cambio, hay bastante igualdad.
En el campo laboral, ?tambi¨¦n existe ese equilibrio de sexos?
No. Llama la atenci¨®n que la mayor¨ªa de compa?¨ªas est¨¦n formadas por hombres o son mixtas. Se ven pocas que solo est¨¦n integradas por mujeres. Y entonces te preguntas: '?D¨®nde est¨¢n las mujeres que han estudiado?'. El techo de cristal aqu¨ª tambi¨¦n existe y apenas hay directoras de circo. Quiz¨¢s, nos cueste m¨¢s dar el paso para ocupar puestos de mayor responsabilidad.
Del circo al cine bajo las ¨®rdenes de Tim Burton
Zenaida Alcalde nunca ha aparcado su pasi¨®n por la interpretaci¨®n. Una dedicaci¨®n que, junto a su pareja, les llev¨® a formar parte de la adaptaci¨®n de la pel¨ªcula de animaci¨®n Dumbo, a las ¨®rdenes del afamado director Tim Burton. El film se estrena el pr¨®ximo marzo y ambos tambi¨¦n aparecen en el tr¨¢iler. "Un d¨ªa nos llam¨® el responsable del casting y nos dijo que estaba interesado en nosotros", afirma Alcalde. Les puso en contacto un circo brit¨¢nico donde hab¨ªan trabajado previamente. "Necesitaban gente de nuestro perfil que supiera interpretaci¨®n. Tras la sorpresa inicial, viajamos a Londres donde estuvimos cinco meses rodando". Lo que m¨¢s le impresion¨® del set de rodaje, adem¨¢s de la cercan¨ªa del director con los actores, fue la extra?eza de no tener al p¨²blico delante, como en sus espect¨¢culos. "Aun as¨ª, fue una experiencia ¨²nica y alucinante", recuerda.
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